Es muy patética.
Aún vivía con mis padres. Todo empezó un sábado que sali de fiesta y cogí una borrachera importante, fue tal, que creo que me dejaron solo en la discoteca.
Supongo que me pondría insoportable, buscando alguna golfilla que me hiciera caso y me dejarón alli con mi cubata. Mis padres se habían ido al pueblo.
Al día siguiente con una resaca insoportable, pero mas que salido un burro, me levante sobre las 12 y me puse a chatear en uno de esos chats de tercera regional, y di con una puta de 50 tacos que estaba en un locutorio y que ofrecia sus servicios ambulantes, vamos que te hacía de todo en el coche. Yo no quería una puta pero estaba tan caliente, que me daba igual ya, y reconozco que me daba algo de morbo todo.
Para allí que acudo en mi flamante payot al valenciano barrio de Benimaclet. Un calor de mil demonios, pleno Junio. Cuando la vi entrar en el coche se me cayó un poco el alma al suelo, en las fotos pintaba mal pero en persona era la reencarnación de Pumuki, Beatriz Carvajal y chus lampreave. 50 mal llevados con aspecto de yonki alcohólica y una chimenea andante (no me quemo la tapicería de milagro). Nos miramos, no se quien daba mas pena a quien, me dijo que primero el dinero, y fue la puntilla para decirle va a ser que no...la despedí como un caballero, y regresé por donde había venido.