Ayer escuché más en profundidad sobre la que está aconteciendo en un directo de un canal de tenis. Por lo visto, a djokovic le prometieron los gobernantes de Victoria que no le hacía falta vacunarse, que presentando una exención médica lo dejarían participar. Dicen que hubo quejas de muchos ciudadanos en contra de esta decisión, de permitir a un no vacunado entrar al país y jugar. El primer ministro, de ideología contraria al gobierno de Victoria ha cambiado lo pactado entre ellos y finalmente al no estar vacunado le deniega el visado.
Vamos, por hacer un simil, sería como si el Madrid Mutua open fuera un grand slam, Ayuso le dijera a djoko que venga pese a no estar vacunado y cuando este aterriza se mete por medio Pedro Sánchez y le deniega la estancia en el país.
Es un tema que me genera sentimientos contrapuestos, porque si bien las reglas a llevarse a cabo ya se sabían desde hace tiempo y vacunarse era una de ellas, me alegro que no te anteponen el dinero y el que el número 1 juegue si no las cumple. Por otra parte Djokovic a pesar de no simpatizar con él, está metido en el mismo barco que yo con las vacunas y respeto que vaya hasta el final con ello.