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Tema del mensaje: mujeres
De: ****
Enviado: Vie 08 Jun 2012, 21:39
Para: freerider
Mensaje
Buenas, te sorprenderá que te escriba y lo cierto es que algo de peculiar sí que puede que tenga, el caso es que en su tiempo te he leído bastante, actualmente entro poco y posteo menos y creo que tú tampoco posteas mucho. El caso es que me he visto reflejado en bastantes ocasiones en algunos de tus relatos, ese avatar animado de la niña con el ahorcado me llama mucho la atención, en fin el caso es que estoy bastante tocado a causa de una tía y si bien no tengo ni idea de si vas a leer lo que te voy a escribir o te vas a molestar en contestar lo cierto es que dado que mi capacidad de visión del asunto ahora mismo es nula y mis amigos están prácticamente todos casados o viviendo en pareja y los que no es porque no tienen ni puta idea de mujeres, te expongo el asunto porque quién sabe si la visión de alguien con experiencia y que no conoce de nada a las partes puede aclarar muchas cosas...
El caso es que a mis 30 años y después de una relación de dos años y medio con una chica que no me llenaba y que parecía perfecta a la vista de todo mi entorno, buena chica, guapísima, con futuro, buena familia, etc... con la que lo deje hace un año, había vuelto a mi estado más salvaje, "enamoramientos" cada dos por tres de chicas desde los 20 hasta los treinta y largos, historias cortas y sin sentido de crías con las que pasaba el rato en mi casa hasta que me cansaba de follármelas y que luego deseaba que se largarán de mi casa pues poco teníamos en común y poco interesante había que decirse, en el otro extremo tías más longevas que sabían perfectamente cuál era su papel y el tiempo justo que tenían que estar allí, hasta otras más en mi tramo de edad que se acababan enganchando y con las que tenía que cortar el vínculo puesto que ninguna me llenaba lo más mínimo ni tenía interés tampoco en que lo hicieran, al fin y al cabo he de reconocer que ni teniendo pareja cada dos o tres meses una mirada en un bar, una salida esporádica o un encuentro casual podían acabar en una infidelidad sin mayor remordimiento.
Era alguien libre, no me preocupaba por nada, porque mis amigos se fueran distanciando en matrimonios de mentira la gran mayoría, porque cada vez era menor la cantidad de colegas con los que podía contar para ningún plan, mientras hubiese algún compañero de trabajo, del gimnasio o de donde fuese para salir y proseguir con mis actividades o incluso a través de páginas como Badoo me sentía intocable y al margen de la soledad y el sufrimiento. Hasta que como si de un macabro plan se tratase todo se torció el 1 de enero de este año, ese día recibo una felicitación por whatsapp de un número que no tengo en la agenda, tras unos timoratos mensajes iniciales resulta que es una chica con la que había perdido el contacto hacía ya unos cuantos de años y que siempre me había gustado bastante.
A partir de ese día comenzamos a mensajearnos todos los días a todas horas, ella desapareció por algún motivo de mi vida en su día, yo tendría 24 años y ella 20, el caso es que en todo ese tiempo bien es cierto que podía haberla llamado en lugar de buscarla por redes sociales y ese tipo de cosas pero no lo hice. Quise quedar con ella, aparentemente no es una chica fácil y digo aparentemente porque a estas alturas ya nada me extraña de las mujeres, me costó vencer una resistencia inicial inusitada prácticamente un mes y por fin quedé con ella, absolutamente espectacular, si bien me confesó que tenía novio y que estaba bien con él desde hacía bastante tiempo pero que por algún motivo no era capaz de dejarlo, lo había intentado en un par de ocasiones y al final siempre acabó volviendo, me llegó a preguntar que dónde estuve todo este tiempo...
Es evidente que le pregunte por qué en ninguna conversación me había hablado de él, qué cómo no se extrañaba de que estuviera tanto tiempo al móvil y era porque prácticamente no le echaba cuenta, quedaban cuando a él le parecía bien casi, no le llamaba nunca porque podía sentarle mal y agobiarle y luego tenían discusiones, si discutían se podía tirar sin hablarle ni verla una semana y luego volver cuando le pareciera como si nada, pero que en contrapartida los días que estaba de buenas se sentía muy especial y cuando le decía "te quiero" se sentía en una nube... Yo le dije que parecía que en vez de su pareja era su perra, y que a los perros hay que domesticarlos y una vez domesticados y enseñados de vez en cuando hay que pasarles la mano por el lomo y se echó a llorar...
Sentí la atracción en aquel momento y la probable veracidad de su confesión de que nunca había hablado tan abiertamente con nadie de como se sentía en su relación de pareja que se extendía ya por tres años, sentí en la despedida que pude haber hecho algo pero no lo hice, así pues el día siguiente en un arranque visceral me fui a su casa, no estaba, me quedé esperándola durante más de tres horas, finalmente le dejé una nota bajo la puerta y me fui. Al llegar y leerla me llamo y me dijo que le provocaba miedo que no sabía qué decir, poco tiempo después de aquello vencí una mínima oposición y nos encontramos y acabamos liándonos, no paso a mayores puesto que antes iría al día siguiente a cortar con su novio, lo triste de aquello es que probablemente ese día fue el que más querido me sentí por ella...
Dejo a su novio, al parecer montó en un ataque de ira (y eso que no sabía que había algo más detrás que su forma de tratarla) y como no aceptó que la dejase se dedicó a acosarla, a buscarla en su trabajo, a buscarla en su casa, a hablar mal de ella en su grupo de amigos que al fin y al cabo comparten amigos de toda la vida, y a forzarla a verse. Mientras tenían lugar estas situaciones de auténtico maltratador, yo mantenía una especie de relación con ella "de puertas a dentro", sumamente pasional puesto que con pocas mujeres he disfrutado como con ella en la cama, una chica sin tabúes y que se deja llevar y hace que te dejes llevar también, nunca quiso que me metiese por medio en aquel acoso aunque en más de una ocasión estuve a punto, sin duda pienso que el miedo a que el se enterase y por extensión su entorno a que "ya estaba con otro" le aterraba.
Empezo entonces tras una serie de encuentros de planes futuros, de confesarse más feliz que nunca, de decir que prácticamente estaba en una nube, que ahora si sentía lo que se debe sentir por una pareja cuando sabes que vas a encontrarte con ella... comenzo como digo casi de la misma forma una serie de subidas y bajadas sin sentido, fruto de sus propias reflexiones y/o alentadas por sus amigas más cercanas al relatarles lo que sucedía en su vida y decirle que era demasiado pronto para otra relación y que lo que estaba sintiendo en tan poco tiempo no era posible, que esos sentimientos sólo afloran con el tiempo y que se estaba equivocando, que lo mejor sería estar sola por un tiempo y darse algunos caprichos...
A la par que esto iba aconteciendo los episodios paranoides de su ex novio se iban haciendo cada vez más graves hasta el punto que en el cumpleaños de un amigo común, yo por su puesto nunca he llegado a conocer a nadie de su entorno puesto que siempre me mantuvo en la sombra, se subió con él en el coche y con una amiga más, dejo a la amiga y luego no quería dejarla en su casa hasta que volviese con él, llegó a agarrarle fuertemente del brazo e incluso a estampar el coche con otro aparcado y tal fue el miedo que sintió que tuvo que consentir que durmiese en su cama, ella dice que no paso nada pero cualquiera sabe qué pensar.
Por lo visto ya le pasó a este maltratador en su anterior relación con otra chica del grupo algo parecido y a la chica no se le creyó mucho se pensó que exageraba y tuvo que alejarse del grupo y de semejante especimen, el caso es que ésta no era capaz de pararle los pies ni denunciarlo ni nada por muy raro que parezca le daba pena y creía que lo único que tenía que hacer era alejarse y sugerirle que fuera a tratarse con un psicólogo...
Al final y antes de cumplir los dos meses de encuentro me dijo que no podía seguir, que se estaba precipitando todo, que necesitaba tiempo y allí que me quedé con cara de imbécil, hecho polvo y destruido por más que me abrazará y llorase como si le estuviesen quitando la vida cuando ella misma estaba decidiendo libremente...
Una semana después de aquello volvió a contactar conmigo excusándose, mandándome correos eternos hablando de cómo se sentía de lo duro que era lo que estaba viviendo, fruto de la culpabilidad de haber actuado mal pienso, y alguna vez quedamos y acabamos acostándonos, parecía que todo iba a cambiar pero al poco tiempo acababa tomando la misma línea y yo no era capaz de comprender cómo podría ser aquello premeditado, ese juego con las personas o si era inconsciente cómo podría ser que no se diese cuenta de aquello.
Finalmente un día tras prácticamente haberla visto 2 veces en un mes veo en su facebook fotos en una fiesta con sus amigos y en una de ellas junto con su ex como si no hubiese pasado nada y ya fuesen tan amigos, me embargó la ira, la llamé le dije todo lo que se me pasó por la mente, la borré de las redes sociales y acabó buscándome de nuevo y yo dejándome encontrar.
Me dijo que era lo mejor tratar de normalizar la relación con su ex, que al fin y al cabo sus amigos son comunes y se van a tener que ver, que la cosa estaba mejorando y yo le dije que era de risa que viese más a su ex que a mi, lloró me pidió perdón, me dijo que entendía que yo no lo comprendiese pero que necesitaba tiempo y otra vez acabamos acostándonos, aquella fue la última vez.
Tras seguir escribiéndonos prácticamente a diriario y llamándola yo de vez en cuando porque ella ya nunca llamaba, de quedar nada, se queda en el paro, me ofrezco a quedar con ella para que se despeje, me dice que es mejor que no, que no me puede ver solo como un amigo, yo no entiendo qué tiene que ver eso con que la apoye en un momento así, y después de esa conversación se pasa una semana sin hablarme ni dar señales de vida, no he comentado que poco después del último encuentro volví a agregarla a las redes sociales pues le expliqué que fue un calentón y dos semanas después ella ni me había aceptado ni había hablado de aquello.
Después de esa semana sin saber nada más decidí acabar con aquella historia, borre su número, sus fotos, las conversaciones, la bloqueé del whatsapp, le escribí un correo diciéndole todo lo que pasaba por mi mente y que me devolviese mi colección de DVDs, me respondió con una ferocidad inusitada aunque no me importó, le dije que quería perder el contacto y que me diese lo que era mío que no quería que después le diese un ataque de los suyos y apareciera de nuevo en mi vida con esa excusa y tal vez al ver que no iba de farol me llamó llorando y diciéndome lo de siempre que lo que necesitaba era tiempo pero que yo no se lo daba, que hacía lo posible por distanciarse de mi para que no lo pasaramos mal duratne este tiempo que necesitaba pero que yo no la dejaba y que tampoco era de piedra, que no me había aceptado en las redes sociales para que no viese fotos o situaciones que pudieran llevarme a enfadarme, en fin una película siempre llorando que hizo que le dijese que bueno que vale que no podíamos ser amigos de momento, que me devolviese lo que era mío y ya está que la entendía y que dejaramos pasar el tiempo.
El caso es que hace casi una semana de aquello, lo he pasado mal, debatiéndome entre si alguien puede ser tan mala o si verdaderamente ni es consciente de cómo es, como no la tengo en ningún sitio me he hecho fuerte tratando de no tener noticias de ella... hasta el otro día que como si de una señal interna se tratase me da por mirar el perfil de su exnovio y veo que dos días después de aquella última conversación ha vuelto a agregarla como amiga, y yo me digo, cómo puede ser que alguien que la ha tratado como la ha tratabdo, que no le ha dado nada, que la haya obligado a mil y una cosas, que no le haya dado ni un minuto de respiro, esté formando parte de su vida ya no solo por el tema de las redes sociales sino viéndola regularmente y cómo puede ser que yo haya desaparecido como si nada y esté incluso vetado para saber de su vida en redes sociales...
Perdón por el tocho si es que llegas a leerlo y como ya te he dicho no sé por qué te cuento esto pero ha sido como un impulso, necesito alguien que me pueda decir desde la objetividad y la experiencia y sin ser parte qué opina de esto, yo si me contasen esta historia sin ser parte de ella no creo que tuviese dudas, la putada es que estoy dentro, en este momento es como si esa sensación de libertad que tenía se hubiese venido abajo, me siento solo, y nada de lo que hago lo remedía, me he ido de fiesta, me he acostado con varias desde entonces pero nada de lo que hago me aleja de esa soledad, he ido a una boda solo de un compañero de trabajo donde todos iban con la mujer o la pareja y por primera vez me he sentido vulnerable... me quiero quitar de en medio en vacaciones haciendo un viaje y veo que mis amigos ya tienen su vida y que el que se escapa no coincide conmigo y no me atrevo a irme solo cuando antes ni me hubiese planteado problemática alguna el irme solo a la aventura, cómo puedes ver me siento como el ahorcado que llevabas en tu avatar, lo dicho si llegas a leerlo y si contestas o no, un saludo de respeto.