Yo ayer no follé, pero me quedé a gusto owneando a una rubia de 35 con cara de chica de la limpieza, con un carácter de lo menos atractivo y de lo más insignificante que te puedas echar a la cara.
No era fea, tampoco era guapa. Tenía cara de haber sufrido malos tratos. De cuerpo tenía barriguita, aunque no era gorda, su cuerpo no estaba mal, pero que no, en definitiva en aquel momento me autoexigía más, quizá porque no bebí lo suficiente.
Se acerca a mí, poniéndose insinuantemente a un milimetro de mi cara mientras me dedica una sonrisa, así por sorpresa. Además parece que lo hacía en parte para ver si yo me "asustaba" y titubeaba ante tan decidida actuación. Ipso facto tenía en su culo mi mano dejando claro que por tan poco lorealismo yo no me asustaba, y de paso comprobé lo si lo tenía durito. No estaba mal.
En ese momento le digo algo que es cierto.
- Me recuerdas a una persona.
Ella contesta:
- ¿Para bien o para mal?
- Para mal
- Jijiji ¿cómo se llamaba?
- Marian
- ¿Y tú como te llamas?
- Yo me llamo "me inventé el nombre"
- ¿Sí?!! Te llamas como el padre de mis hijos
Y aqui le respondí, con dos huevos:
- ¿Y qué haces aqui a estas horas, no tendrías que estar con tus hijos?
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Por LOL, qué grande soy.