Vengo de hacer unas pequeñas gestiones, vaya que salí de mi casa, cercana relativamente al Camp Nou, en donde dentro de unas dos horas se jugará la final de Copa entre Atlético de Madrid y Sevilla
Miles son los aficionados que me he encontrado por la calle de un bando y otro, y para mi sorpresa tengo que decir que los sevillanos se mean a los madrileños
De calle
En cordialidad, en discreción, en saber estar y en caballerosidad. Veías a cada personaje con la camiseta del Atlético de Madrid, que de verdad coleguis, era para llegar a casa y echarse a llorar.
Agitanados, estúpidos, catetos, cutres y gipiosos. Y no hablo de chavalines radicales -que esos también, lo doy por sentado- sino de hombres, de mujeres, de niños, de ancianos, de médicos, de torneros, de abogados, de enfermeras, de amas de casa. Todos, absolutamente todos los que iban con la camiseta rojiblanca eran unos jodidos Torrentes
Hay que decir que ellos eran mayoría respecto a la afición sevillana, ponle 80%, y que algunos de ellos iban gritando "Puta Sevilla" con claras intenciones provocativas, así que quizá los sevillistas hayan moderado su comportamiento por la cuenta que les trae, pero me da que no, que no es eso. Porque es que de sevillistas (sevillanos, que coño) habían muchos, menos que madrileños, sí, pero muchos, y francamente a modo general me han dado una imagen claramente más positiva que los otros mendrugos
Para pensar