Esto del tuppersex responde, exclusivamente, a la condición de estúpida que es inherente a la gran mayoría de las mujeres. Ojo, que los hombres también son idiotas en su mayoría, pero es que como ha dicho mundele, cada vicio del hombre cuando la mujer lo tiene lo desarrolla infinitamente más.
Ahora la moda, lo guay, lo liberado, lo moderno que te rilas es coger y hacer este tipo de reuniones, ahora se nos pretende hacer ver que es virtuoso y deseable el exhibir una conducta detestable, el extender el zorrerío hasta líimites vergonzantes. Qué moderna soy, que compro pollas de goma, cómo molo. Y encima nos tiene que parecer bien. Y encima hay que aplaudir. Y encima hay que admirar esto, y decirles que sí, que eso es virtud, que eso es modernez, que eso es bueno y deseable, y bonito, y que es lo que queremos ¿A qué extremo hemos llegado en el que la exhibición impúdica de estas cosas se nos pretende vender como el no va más de lo moderno y libre? ¿Qué coño es esto? ¿Qué clase de imbéciles son estas que se juntan a comprar pollas de goma y aplauden como adolescentes hiperhormonadas sólo porque así se creen más cool?
Me gustaría asistir a una reunión de tuppersex de esas e introducir esos aparatos en las cavidades cranelaes de las asistentes. Matarlas metiéndole un consolador por la oreja, abriéndome hueco hasta clavárselo en el cerebro. O por la nariz. O por la boca, hasta introducírselo entero en la tráquea, por supuesto sin ningún lubricante de ninguna clase, salvo la sangre que se derive de todo ello.