Yo lo achaco a una mala planificación física de la temporada, a un error garrafal de cálculo del Profe Ortega.
Se les ve sin chispa, no llegan a ningún balón dividido, no desbordan ni al banderín del córner.
Me fijo en los dos casos más llamativos, los que tienen mejor físico, el capitán Koke y Llorente. Antes del partido del Levante Koke ocupaba todo el campo, el jugador área a área, presionando con criterio en todo el campo, y llegaba el minuto 80' y estaba más fresco que nadie. Y Llorente era coger la pelota en una banda y se iba por velocidad de todo Dios.
Ahora miralos, es penoso, no llegan a ninguna.
Sumado a Saulitros, pelele que pulula sin fuersa para vivil. Uno menos.
Correas, un partido bueno, tres malos. Su corazón está reparado aquí, pero sigue en la barriada con los amigos.
Renan Lodi, nombre de Star Wars para un ataque regulero, y un defensor malo. Filipe era Filipe, pero vamos.
Hemos estado jugando con dos o tres menos, porque inexplicablemente no ha sacado a quienes se arrastraban jornada tras jornada para meter a los frescos, a los que tienen que demostrar.
Kondogbia, roba 19 balones en medio partido, no vuelve a jugar.
Dembele, lo único potable algún ratillo de sopor, y no vuelve a jugar.
Y poco más tenemos, porque los secundarios tipo Herrera o Torreira son descartes, que pareciera que volvemos a principios de los 2000, cuando vivíamos de 15 descartes por temporada.
Mandril y Farsa van mal, juegan mal, sus jugadores están acabados, tienen problemas en los despachos, el VAR les jode vivos, y todo lo que queramos, pero encienden todos los años el 1900 diésel en Febrero, y se quedan solos arriba, fueran como fuesen en navidades.
Nuestra mayor cagada este año ha sido no ganarle uno de los dos partidos al Mandril. Siempre igual, parece que no aprendemos que ganar a uno de estos dos son 6 puntos por partido.