- Registro
- 10 Nov 2006
- Mensajes
- 80.578
- Reacciones
- 33.932
Hace poco que he estado pintando mi habitación -de un precioso color albero, cálido en invierno y no exento de un toque colonial en verano (esto me suena)-. Tenía dos opciones: o poner un petardo en el cubo de pintura, Mr. Bean Style, o bien sacar todos los muebles y trastos al salón para poder pintar. Entre estos muebles y trastos, evidentemente estaba la caja que tengo debajo de la cama con todos los recuerdos de mis exnovias, de las dos con las que he estado realmente tiempo, de las únicas dos que me han importado. Me acordé de este hilo, me acordé que aquí se dijo que se tirasen estas cosas, que estas cosas lastran, me acordé que me recomendásteis que me deshiciera de esa caja y de lo que hay dentro de ella. Hice un amago de tirarla, tal cual. Lo intenté, de verdad, miré a la caja, intenté tirarla, tomé aire... y seguí sacando trastos al salón para poder pintar. Ya la tiraría después. Mientras sacaba libros de la estantería que tengo en mi cuarto cayó un postit al suelo. Lo cogí. Mi última novia había escrito en él, con su bonita caligrafía, "Es increíble lo mucho lo que te quiero", subrayando "increíble" y dibujando un esmaili. Fui a la caja, lo metí dentro también. Pinté, esperé a que se secara, repasé los rodapiés, los rincones detrás del radiador y metí de nuevo los muebles. Metí también la caja, debajo de la cama, y ahí sigue. No puedo tirarla.