Amigo respeto tu opinion aunque discrepo totalmente.De acuerdo al principio me costó mucho su lectura, se hacía algo densa, espesa y lo complicaba más los nombres rusos, tanto hacía referencia a un personaje por su apellido, su diminutivo o el nombre propio (muy util que en la parte final del libro hay un apéndice donde te hace referencia a todos los personajes, situándolos en los escenarios en los que se desenvuelve la novela), cambia casi en cada capítulo de escenario y personajes, al principio parece que son novelas distintas, pero conforme avanza la lectura vas relacionándolos todos entre sí. Los escenarios van desde campos de exterminio nazis, frente de Stalingrado (de ambos bandos), laboratorio de científicos, casas familiares, retaguardia de los ejércitos, prisiones soviéticas...
Mientras no empiezas a encontrar un hilo que una todo esto, el lío es grande (al menos para mi lo fue). Ahora bien cuando todo empieza a tomar forma te vas dando cuenta de lo grande que es lo que estas leyendo, y no por el tamaño, que también (1100 páginas).
Fácilmente comparable con Guerra y paz por su ambientación, su enfoque y su temática, lo cierto es que me ha parecido mucho más agradable de leer y más completa que la novela de Tolstoi, del que sin duda ha heredado las descripciones costumbristas y muchos otros detalles, más cercana por sus análisis psicológicos a la prosa de Dostoievski y con el mismo gusto por los detalles, incluso los más nímios, que se encuentra en las obras de Capote. Me ha encantado, para mi es casi perfecta y creo que es de las pocas obras imprescindibles de los últimos cincuenta años. Todo un clásico al que vale la pena dedicarse.