Spade rebuznó:La razón que se esconde detrás de esto es puramente evolutiva. Estamos programados para valorar más la evitación de los fracasos antes que la consecución de los objetivos.
Simple y llanamente porque desde siempre las consecuencias del fracaso son más graves que lo que puedan reportar los éxitos. Pura supervivencia. Y puros retrasados primates que somos que seguimos sin poder trascender nuestra condición de monos expulsados del árbol. QED.
Me imagino que esa será la razón, pero a todos nos han dicho alguna vez que no, y sabemos que no es tan trágico. Supongo que la vez que esperas tanto hasta que te llegas a enamorar cuando la chica que piensas que te dirá un sí rotundo ni siquiera te enseñaria una teta en su habitacíon es cuando tiene que joder, pero una persona a la que apenas conoces y que llevas charlando con ella 2-3 horas? (depende el aguante o la decisión de cada uno...) pues sigues a tu rollo y punto. Antes de salir no contabas con su existencia en el mundo pues la vuelves a borrar de la mente y listo.
Al igual que en el otro hilo están desarrollando el arte de entrar a desconocidas, podriamos aprender a quitarse el miedo al no y verlo como una ocasión fallada de muchas y no como un fracaso que nos estará rondando la cabeza días.
Será posible?