El bar de los quintos que está en Benimaclet, ahora no recuerdo la calle, pero es lugar mítico de peregrinación, atendido por "El Alegrías", un hombre que no sonríe ni aunque le toque el Euromillón.
Otro punto a favor de Valencia es el Fila o Bar Els Tonells (o Els Llauradors, yo qué sé), donde se pasa de bar de abuelacos al mediodía a bar de batalla por la noche, joder la de castañas que me he metido allí. Además, se peta de Erasmus, que invaden Valencia cada vez más.
También tenemos cines, teatros, el IVAM y el MUVIM, plazas mu bonicas, salas de conciertos pequeñas pero muy buenas, como El Loco, el Wah Wah, y bares como el Asesino y el Burlón, el Pinball, el Espill y el Roca, donde escuchar buena música.
Como decían, lo chungo son algún barrio que es mejor no pisar mucho, como La Coma o la Plata (ya de Nazaret ni te cuento), y que se hayan cargado la belleza del Cabanyal y la honradez de sus gentes de pueblo los putos gitanos. Sus muertos, el otro día iba por los Naranjos y parado en un semáforo un Mercedes descapotable con cuatro gitanacos ShÜnGºS_Ahï con sus OrÈlEh y con Camarón a todo trapo. Hijos de puta.