Las águilas rojiblancas devoran todo el oro para Austria
Austria hizo buenos todos los pronósticos y, posiblemente con el mejor cuarteto de su historia, integrado Wolfgang Loitzl, Andreas Kofler, Thomas Morgenstern y Gregor Schlierenzauer, revalidó el título olímpico de saltos de trampolín por equipos que ganó hace cuatro años en Turín. Las águilas rojiblancas no fallaron en la rampa larga del Parque Olímpico de Whistler, centro deportivo donde en las jornadas previas brilló el suizo Simon Ammann, que repitió en los Juegos de Vancouver la proeza de hace ocho años en Salt Lake City (EEUU), al ganar oro en ambos trampolines.
Pero como quiera que la Confederación Helvética no tiene saltadores para completar cuarteto, impidiendo de esta forma que "Harry Potter" pudiese optar al pleno que logró el finés Matti Nykaenen en Calgary''88 (la otra ciudad canadiense que albergó unos Juegos de Invierno), Austria llevaba todas las papeletas al triunfo por equipos, con los cuatro mejores del ránking mundial de cuantos compitieron hoy.
Loitzl, de 30 años, ganó hace un año el Cuatro Trampolines, cuando, después de estar 222 pruebas sin conocer el triunfo en Copa del Mundo encadenó triunfos en las tres primeras pruebas de 2009 para anotarse el éxito más importante de su carrera. Kofler, de 25 -que integró el cuarteto triunfal hace cuatro años- le sucedió hace mes y medio en el historial del prestigioso torneo navideño.
Morgenstern, de 23, capturó hoy su tercer oro olímpico, después de los ganados hace cuatro años en Pragelato, en rampa larga y por equipos. Y Schlierenzauer es la gran estrella del vuelo austriaco.
Con 20 años, el tirolés ganó la última Copa del Mundo, competición en la que lleva nada menos que 32 victorias y 51 podios y es segundo en la general de esta temporada, por detrás de Ammann.
Partiendo de estas premisas, sólo una tragedia impediría que Austria no se hiciera con uno de los oros que había marcado hace mucho tiempo con una gran cruz en su calendario olímpico.
Y en el Whistler Olympic Park no hubo sorpresas. el cuarteto de la República alpina dominó la competición desde el primer salto y no cedió el liderato hasta el último, en el que Schlierenzauer -que hoy añadió oro a sus dos bronces en las pruebas individuales- pulverizó las marcas saltando 146 metros y medio, para mayor alegría de sus compañeros, que ya llevaban celebrando la victoria un buen rato en zona de meta.
Austria lideraba con claridad la prueba tras la primera ronda, en la que sus cuatro figuras sumaron un total de 547, 3 puntos, 38 más que el cuarteto alemán, integrado por Michael Neumayer, Andreas Wank, Martin Schmitt y Michael Uhrmann.
El segundo acto no alteró la clasificación del primero en sus primeros ocho puestos y el veterano Schmitt celebró la ampliación de su brillante palmarés con otra plata olímpica. El alemán, que cumplirá 33 dentro de una semana, es -aparte de cuádruple campeón mundial- doble ganador de la Copa del Mundo, competición en la que, con 28, es sexto en la relación histórica de triunfos.
En los Juegos de Salt Lake City''02 (EEUU), fue campeón olímpico por equipos, cuatro años después de haber integrado el cuarteto de plata en Nagano (Japón). Schmitt se colgó hoy al pecho su tercera medalla olímpica.
La única emoción en una prueba en la que Austria ''aplastó'' a sus rivales, antes de hacer sonar el "Land der Berge" en Whistler, fue la pugna por el bronce, que Noruega, en los instantes finales -en los que el viento aplazó un par de veces el desenlace- amarró ante Finlandia, a la que finalmente superó en más de quince puntos, gracias, sobre todo, al último salto de Anders Jacobsen.
Jacobsen recibió la medalla de manos de la española Marisol Casado -presidenta de la Federación Internacional de Triatlón (ITU)-, recién nombrada miembro del Comité Olímpico Internacional (COI). La madrileña también condecoró a Anders Bardal, Tom Hilde y Johan Remen Evensen, los otros contribuyentes al bronce noruego.