Os voy a contar algo por lo que es mejor no suicidarse, y por lo que yo a veces rezo por los familiares que se me fueron de la forma más terrible que existe, la que más duele a los que se van y a los que se quedan: Las almas de los suicidas no van al mismo "mundo" que los demás, ni pueden reencarnarse ni ver a sus seres queridos difuntos en mucho tiempo. Sus almas pasan mucho tiempo vagando en una dimensión aparte, reviviendo una y otra vez el momento en que se quisieron ir.
Es preciso que los que quedamos aquí no les lloremos, pues dificultamos su evolución; tan sólo hay que pedir a los seres espirituales que los acompañan que les ayuden a sentirse reconfortados. La vida es un regalo que se os da, y quien la tira a la basura, paga.
Buscad el amor: en cada momento hermoso, en ese pequeño café, en el parque de enfrente, en el tiovivo de de los niños, en el árbol de los deseos.