Lasputasonbaratas
Veterano
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Bueno, la frase no es la adecuada para dar una idea el contenido del hilo, pero si resume mi mejor recuerdo sobre lo que voy a exponer.
La pregunta que les quiero hacer es:
[highlight]¿Que habeis sentido la primera vez que os encontrásteis con el novio de la infiel que os habeis follado?[/highlight]
Cuento mi experiencia mientras recordais la vuestra.
La conocí por internet, aunque no era lo habitual en mi. Cayeron un par de copas esa noche y tras 4 frases bien hechas me la llevé al hotel que utilizo para estas lides. Quedamos otras 3 veces, no mas, no me gusta repetir porque soy facil de enamorar a pesar de mi nick. Bueno, el caso es que uno de los temas de conversación fue su novio, si, el que le pagaba a ella la mitad del alquiler, la comida, viajes, vicios, regalos y esas cosas caras y extrañas que se hacen por amor. Resultó para mi sorpresa que él era Interventor de FEVE (cobrador para los no iniciados) y que ejercia su labor por la lineas de ferrocarriles cercanas a mi ciudad y que yo casualmente utilizaba a diario. Nunca quise saber nada de las terceras personas, y menos metido en estos turbios asuntos, pero en este caso me picó la curiosidad, así que me informé lo necesario para averiguar quien era el cuernos pagafantas de semenjante zorra infiel.
No tardó en suceder, a las 2 semanas, era un dia feo, lluvioso, y allí apareció, con su uniforme de Interventor, impóluto, bien planchado (la zorra sabia planchar), corbata de seda, pulcro y educado, como todo empleado público que se precie, aunque algo falto de vitalidad. A medida que se acercaba a mi me di cuenta de que todo parecía encajar, no se porque, pero parece que adivino a los ciervos a leguas; tienen una fisionomia especial, su mirada, sus andares inseguros, cansinos, reflejan que no son dueños de sus vidas y, por supuesto, mucho menos de la relación afectiva con el ser amado que tienen en su casa. En fin, que mientras observaba al pobre astado acercandose por el pasillo, yo me imaginaba empalando a su hembra a la vez que ésta pegaba aullidos de placer en el hotel citado.
Una risa floja se apoderó de mi hasta el punto de no poder controlarla, incluso seguía cuando llegó a mi altura, mientras, imagino, me interrogaba tomándome por un loco, ¿me enseña el billete por favor?... aqui tiene "amigo", le dije, y continué, "bonito día para quedarse en casa ¿verdad?" (follando a tu novia pensé).
Le mostré el billete, lo validó y se fué. No sentí nada diferente a otros dias, ¿algo de pena quizás?, pero no, no era eso, solo indiferencia y eso si, se me estaba poniendo dura de nuevo, la volvería a llamar esa tarde, teníamos aún 3 horas de margen para dar rienda suelta a nuestra pasión antes de que el ciervo volviese a al hogar.
La pregunta que les quiero hacer es:
[highlight]¿Que habeis sentido la primera vez que os encontrásteis con el novio de la infiel que os habeis follado?[/highlight]
Cuento mi experiencia mientras recordais la vuestra.
La conocí por internet, aunque no era lo habitual en mi. Cayeron un par de copas esa noche y tras 4 frases bien hechas me la llevé al hotel que utilizo para estas lides. Quedamos otras 3 veces, no mas, no me gusta repetir porque soy facil de enamorar a pesar de mi nick. Bueno, el caso es que uno de los temas de conversación fue su novio, si, el que le pagaba a ella la mitad del alquiler, la comida, viajes, vicios, regalos y esas cosas caras y extrañas que se hacen por amor. Resultó para mi sorpresa que él era Interventor de FEVE (cobrador para los no iniciados) y que ejercia su labor por la lineas de ferrocarriles cercanas a mi ciudad y que yo casualmente utilizaba a diario. Nunca quise saber nada de las terceras personas, y menos metido en estos turbios asuntos, pero en este caso me picó la curiosidad, así que me informé lo necesario para averiguar quien era el cuernos pagafantas de semenjante zorra infiel.
No tardó en suceder, a las 2 semanas, era un dia feo, lluvioso, y allí apareció, con su uniforme de Interventor, impóluto, bien planchado (la zorra sabia planchar), corbata de seda, pulcro y educado, como todo empleado público que se precie, aunque algo falto de vitalidad. A medida que se acercaba a mi me di cuenta de que todo parecía encajar, no se porque, pero parece que adivino a los ciervos a leguas; tienen una fisionomia especial, su mirada, sus andares inseguros, cansinos, reflejan que no son dueños de sus vidas y, por supuesto, mucho menos de la relación afectiva con el ser amado que tienen en su casa. En fin, que mientras observaba al pobre astado acercandose por el pasillo, yo me imaginaba empalando a su hembra a la vez que ésta pegaba aullidos de placer en el hotel citado.
Una risa floja se apoderó de mi hasta el punto de no poder controlarla, incluso seguía cuando llegó a mi altura, mientras, imagino, me interrogaba tomándome por un loco, ¿me enseña el billete por favor?... aqui tiene "amigo", le dije, y continué, "bonito día para quedarse en casa ¿verdad?" (follando a tu novia pensé).
Le mostré el billete, lo validó y se fué. No sentí nada diferente a otros dias, ¿algo de pena quizás?, pero no, no era eso, solo indiferencia y eso si, se me estaba poniendo dura de nuevo, la volvería a llamar esa tarde, teníamos aún 3 horas de margen para dar rienda suelta a nuestra pasión antes de que el ciervo volviese a al hogar.