Capitán Hediondo rebuznó:
hay algo enfermizo en esas grasas... no sé porqué, estoy seguro de si le visita un repartidor de pizzas o el cartero, posiblemente le secuestre y le deje encerrado en su casa durante meses, tiempo que invertirá en follárselo y alimentarlo con la misma dieta que ella, con lo que cuando se aburra de él, al pobre sólo le quedará la salida del infarto fulminante.
Odio los viernes por la mañana. Estoy deseando que sean las dos para largarme de finde de una puta vez. Me cago en vuestros muertos, hijos de puta.
Las gordas tienen muchas ventajas, pasemos al examen minucioso:
- No solo tienen patata y ojete: Disponen de cienes y cienes de pliegues para perder tu miembro entre las lorzas (añadir corrección phpbb para que al decir lorzas lo cambie por Señor Cojones).
- Son guarras: Pillan de vez en cuando y al igual que son ansiosas para la panceta lo son para la lefa y las pollas.
- Son agradecidas: Te van a tratar como un señor y te van a invitar a desayunar judías con chorizo por las mañanas.
Son relajantes: La sinuosidad de sus turgentes curvas son hipnóticas. Prueben a fumarse un peta con un Jack Daniels en las rocas tumbados en la cama y que ella os dance un bailecito frenillo style. Caereis rendidos de sueño ante tanta relajación y visión talmente como una lámpara de lava.
- Sudan mucho: Por esta razón son tremendamente olorosas y toda su piel (kilómetros) están impregnadas de feromonas. Lamer su canalillo, su perineo o directamente su raja del culo es toda una sensación experimental explosiva de sabores ácidos, amargos y tremendamente excitantes.
- Soretes titánicos: Si señor, alguien lo ha dicho ya, sueltan unos palomos como delfines.
Juel con la Tanque, Nocilla: que meriendilla, yum yum.
En fin hipoglúcidos, pongan una gorda en su vida.
Saluda hijo de gorda:
Hola, Gñe! Me como creaturas y canapieses. Un bechi