Premio Nacional de Hipocresía 2019

No me interesa lo que escriba esta tía ahora, lo que será interesante es cuando la palme el legado literario que habrá dejado. Intuyo que será menos que nada, un pedo de monja que se llevará el viento de la historia.

Y el mundo de las letras está trufado de one hit wonders, y que son veinte mil euros de mierda de los que la mitad serán arrebañados por Hacienda. Que no es que le hayan dado el Planeta, o el Cervantes, precisamente.
 
Ni con la polla de otro atada a una pértiga.
Necesita una manada de menas que la ponga en vereda.
 
Es el arquetipo de español hijo de puta criado en democracia. Gentuza, en el sentido estricto, personas que no aportan nada a la sociedad, con evidentes síntomas de múltiples trastornos de la personalidad de los tres tipos, así a botepronto paranoide, narcisista, esquizotípico, antisocial.

Esta nini, es otro claro caso de hipocresía. Critica al estado español, a la democracia, al sistema, pero no duda en aprovecharse al nivel máximo, es decir, se ha planteado vivir de él, pidiendo becas, medrando y robando si hace falta, para vivir sin dar un palo al agua, de esta sociedad buenista, cristiana en el sentido de poner la otra mejilla y luego la otra y vuelta a empezar.

Lo estaba leyendo y estaba viendo a este:

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Recibe un premio mensual de 3500 euros todos los meses, con dos accésits más en verano y en invierno. De becario chupapollas a profesor interino, y de ahí a podemita consumado en el congreso a hablar de antisistema. Le da vueltas a la loca esa del coño que escribe cuentos.
 
Manda cojones las paridas que decís, mientras idolatráis a "liberales en lo económico, conservador en lo social", que han chupado toda su vida del erario.

Y eso que la tía huele a kilómetros, pero por el premio Hipocresía 2019 sois dignos contendientes.
 
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