Regular la regla

Sir Ano de Bergerac

La becaria de Aramís Fuster.
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10 Abr 2007
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En La novela Contraluz de Thomas Pynchon la construcción de la vía ferroviaria que unirá el este con el oeste de Estados Unidos es símbolo de la domesticación del mundo. La vía del tren es un vector de progreso que va avanzando a paso firme por tierras salvajes y alrededor de él y su construcción proliferan pueblos, ciudades, nuevas gentes, ideologías y normas de uso. El paisaje inexplorado por el hombre occidental es potencialmente infinito y cuando es sometido a la retícula cartográfica se divide en parcelas, en categorías, se dispone en reparto.

La generación de la posguerra española ha abrazado el mito del progreso con tanta fuerza que ha confundido austeridad con miseria, ha celebrado como un éxito la llegada del centro comercial y la franquicia a sus pequeñas ciudades, que ahora son mucho más parecidas a las estampas de otros lugares desarrollados.

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En menos de treinta años todos hemos visto cómo infinidad de espacios tradicionales con sus propios usos y costumbres han ido muriendo en pro del espacio homologado, del agente globalizador.

En el canon ideológico de estos años de democracia hay figuras evidentes y otras que no lo son tanto. Bajo ese pastiche de ideas incongruentes que es eso que llamamos derecha, se ha perseguido una especie de liberalismo económico, una suerte de libertad en lo macro mientras que se ha impuesto, como de soslayo la hiperregulación en lo micro. De soslayo porque cualquiera cree poseer una opinión formada sobre si quiere una economía más o menos liberal, pero no se ha parado a pensar si quiere que le regulen hasta sus costumbres más privadas. Es más, somos nosotros mismos agentes de la norma, que bajo la dialéctica del amo y del esclavo sufrimos su uso a la vez que censuramos a los demás.

Si queremos entender cómo hemos llegado a algunos de los episodios más bochornosos de nuestra historia reciente como los días de la policía del balcón, o el cierre del Retiro todos los días de viento porque un día un niño tuvo mala suerte, habríamos de preguntarnos hasta qué punto hemos dejado que se metan en nuestra vida con pequeñísimas regulaciones ante cualquier disputa o problema. Ahora que el momento está maduro el feminismo regula nuestra intimidad y los supuestos contratos afectivos que aún no han sido verbo. Es todo parte de la misma lógica, es esta la pura ideología madre, que pasa inadvertida y asumida con la misma naturalidad por quienes se creen de derechas y de izquierdas. Hacer una nueva ley es muy fácil, pero eliminarla es casi imposible, ya que generalmente se anulan a golpe de más regulaciones alimentando aún más a esta bestia mastodóntica.

Buenas tardes, @BILBOKOA
 
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En La novela Contraluz de Thomas Pynchon la construcción de la vía ferroviaria que unirá este con oeste de Estados Unidos es símbolo de la domesticación del mundo. La vía del tren es un vector de progreso que va avanzando a paso firme por tierras salvajes y alrededor de él y su construcción proliferan pueblos, ciudades, nuevas gentes, ideologías y normas de uso. El paisaje inexplorado por el hombre occidental es potencialmente infinito y cuando es sometido a la retícula cartográfica se divide en parcelas, en categorías, se dispone en reparto.

La generación de la posguerra española ha abrazado el mito del progreso con tanta fuerza que ha confundido austeridad con miseria, ha celebrado como un éxito la llegada del centro comercial y la franquicia a sus pequeñas ciudades, que ahora son mucho más parecidas a las estampas de otros lugares desarrollados.

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En menos de treinta años todos hemos visto cómo infinidad de espacios tradicionales con sus propios usos y costumbres han ido muriendo en pro del espacio homologado, del agente globalizador.

En el canon ideológico de estos años de democracia hay figuras evidentes y otras que no lo son tanto. Bajo ese pastiche de ideas incongruentes que es eso que llamamos derecha, se ha perseguido una especie de liberalismo económico, una suerte de libertad en lo macro mientras que se ha impuesto, como de soslayo la hiperregulación en lo micro. De soslayo porque cualquiera cree poseer una opinión formada sobre si quiere una economía más o menos liberal, pero no ha parado a pensar si quiere que le regulen hasta sus costumbres más privadas. Es más, somos nosotros mismos agentes de la norma, que bajo la dialéctica del amo y del esclavo sufrimos su uso a la vez que censuramos a los demás.

Si queremos entender cómo hemos llegado a algunos de los episodios más bochornosos de nuestra historia reciente como los días de la policía del balcón, o el cierre del Retiro todos los días de viento porque un día un niño tuvo mala suerte, habríamos de preguntarnos hasta qué punto hemos dejado que se metan en nuestra vida con pequeñísimas regulaciones ante cualquier disputa o problema. Ahora que el momento está maduro el feminismo regula nuestra intimidad y los supuestos contratos afectivos que aún no han sido verbo. Es todo parte de la misma lógica, es esta la pura ideología madre, que pasa inadvertida y asumida con la misma naturalidad por quienes se creen de derechas y de izquierdas. Hacer una nueva ley es muy fácil, pero eliminarla es casi imposible, ya que generalmente se anulan a golpe de nuevas regulaciones alimentando aún más a esta bestia mastodóntica.

Buenas tardes, @BILBOKOA

El otro día, mientras comentábamos la enorme deuda que contrajo Stalin con Europa y EEUU en sus primeros años de mandato, la conversión fue a parar a este mismo tema. ¿Hasta donde va a llegar la regulación de todo y a todos los niveles?¿y cuál es la última frontera? ¿La familia? ¿Tu casa? ¿Tu cuerpo? Cada vez se trata de difuminar la propiedad privada, hasta el punto de hacerla desaparecer, porque parece que tu cuerpo deja de ser un asunto privado tuyo también.

Y todo aplaudido por auténticos hooligans de este pensamiento.
 
El otro día, mientras comentábamos la enorme deuda que contrajo Stalin con Europa y EEUU en sus primeros años de mandato, la conversión fue a parar a este mismo tema. ¿Hasta donde va a llegar la regulación de todo y a todos los niveles?¿y cuál es la última frontera? ¿La familia? ¿Tu casa? ¿Tu cuerpo? Cada vez se trata de difuminar la propiedad privada, hasta el punto de hacerla desaparecer, porque parece que tu cuerpo deja de ser un asunto privado tuyo también.

Y todo aplaudido por auténticos hooligans de este pensamiento.




Un colega acaba de volver de Buenos Aires y estaba muy impresionado con algunos aspectos de la vida ahí. Cómo se organizaba el tráfico más por instinto que por la norma, cómo habían aprendido a vivir en una caída continua del valor del dinero y de esta forma éste había dejado de ser tan abstracto para así volver a estar más cercano al trueque, cómo allí nadie utilizaba el google maps para orientarse y se preguntaba más por los lugares dando así pie a pequeñas relaciones espontáneas.

Que no se me malinterprete, no quiero romantizar lo salvaje, sólo quiero hacer explícita la ideología que busca llegar al puro orden y reflexionar sobre qué hemos perdido por el camino en estos años de "desarrollo".

He aquí una buenísima conferencia sobre la ideología de la norma. Comienza con un "buenas tardes" así que no puede ser mala ¿eh, @BILBOKOA ?

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Cada vez se trata de difuminar la propiedad privada, hasta el punto de hacerla desaparecer,

Se os va la pelota una barbaridad. Se trata por parte de quién, de esos comunistas que según vosotros nos gobiernan desde la sombra? Cómo "van" a querer hacer desaparecer la base sobre la que se estructura la sociedad entera. Dejad de creeros que vivís en las distopías que vosotros mismos imagináis.
 
Se os va la pelota una barbaridad. Se trata por parte de quién, de esos comunistas que según vosotros nos gobiernan desde la sombra? Cómo "van" a querer hacer desaparecer la base sobre la que se estructura la sociedad entera. Dejad de creeros que vivís en las distopías que vosotros mismos imagináis.
Si fueran solo los comunistas no habría problema. Como dice @Sir Ano de Bergerac hay hasta en las élites liberales gente que aboga por todo esto. Con la crisis covid los gobiernos han llegado a rebasar límites impensables y se han encontrado con aplausos.
 
Un colega acaba de volver de Buenos Aires y estaba muy impresionado con algunos aspectos de la vida ahí. Cómo se organizaba el tráfico más por instinto que por la norma, cómo habían aprendido a vivir en una caída continua del valor del dinero y de esta forma ésta había dejado de ser tan abstracto para así volver a estar más cercano al trueque, cómo allí nadie utilizaba el google maps para orientarse y se preguntaba más por los lugares dando así pie a pequeñas relaciones espontáneas.

Que no se me malinterprete, no quiero romantizar lo salvaje, sólo quiero hace explícita la ideología que busca llegar al puro orden y reflexionar sobre qué hemos perdido por el camino en estos años de "desarrollo".

He aquí una buenísima conferencia sobre la ideología de la norma. Comienza con un "buenas tardes" así que no puede ser mala ¿eh, @BILBOKOA ?

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Hemos naturalizado las normas más increíbles a un nivel alucinante. Como bien dices no se trata de volver a la España por desarrollar, pero es que actualmente cualquier acto tonto está regularizado y normativizado. En eso somos número uno en el mundo, no creo que haya país además con tal grado de titulitis que hasta para cargar sacos se necesita una titulación edpecífica.
 
Si fueran solo los comunistas no habría problema. Como dice @Sir Ano de Bergerac hay hasta en las élites liberales gente que aboga por todo esto. Con la crisis covid los gobiernos han llegado a rebasar límites impensables y se han encontrado con aplausos.

Claro, pero lo que quieren es ultraregular, monitorizar y estandarizar. La propiedad privada no te preocupes que no te la van a tocar.
 
Claro, pero lo que quieren es ultraregular, monitorizar y estandarizar. La propiedad privada no te preocupes que no te la van a tocar.
Yo considero mi cuerpo, mi casa y mi familia como propiedad privada.

La coacción que se ha hecho sobre nuestro propio cuerpo en tiempos de covid sí me parece una invasión de la intimidad de la propiedad privada. Porque la gente respondió como quisieron y la coacción muy grande, si no el paso siguiente hubiese sido la vacunación obligtoria.
 
Si fueran solo los comunistas no habría problema. Como dice @Sir Ano de Bergerac hay hasta en las élites liberales gente que aboga por todo esto. Con la crisis covid los gobiernos han llegado a rebasar límites impensables y se han encontrado con aplausos.



Todos aquellos quienes considero que tienen un poco de cabeza se han dado cuenta de que la crisis covid ha servido fundamentalmente para estructurar un nuevo marco de reglas mucho más ceñido y opresivo que el que existía antes. Cuando la cagamos es cuando pensamos que éste ha caído del cielo o, peor aún, por la emergencia de una crisis sanitaria más que cuestionable. La clave de esto no es fijarse en la gran embestida regulatoria que nos ha pillado por sorpresa, sino en cómo a través de una ideología de las pequeñas regulaciones han ido allanando el camino para que el momento estuviera maduro y así hacer lo que han hecho.

El arquetipo occidental tiene mucho que ver con la dupla Saturno-Mercurio y quienes estructuran esto saben muy bien manejar los tiempos, el solve et coagula que va trabajando en los tiempos distendidos pero de vez en cuando necesita un gran cataclismo para consolidarlo todo. Ocurrió el 11s, ocurrió con el covid y volverá a ocurrir con la próxima. Porque somos unos pobres borregos agilipollados que aunque vayan de críticos por la vida en el fondo se creen toda la mierda de propaganda que le echan por las noticias.
 
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Aunque os apabulle el lenguaje filosófico del principio, miráos el vídeo, que es muy bueno, joder.
 
Yo considero mi cuerpo, mi casa y mi familia como propiedad privada.

La coacción que se ha hecho sobre nuestro propio cuerpo en tiempos de covid sí me parece una invasión de la intimidad de la propiedad privada. Porque la gente respondió como quisieron y la coacción muy grande, si no el paso siguiente hubiese sido la vacunación obligtoria.

Vacunación obligatoria y, llegado el caso, extracción de irredentos en sus casas e internamiento en campos. Y con el aplauso del vecino, ese tan educado que siempre saluda.
El dinero que tenemos, que nos han dado a cambio de nuestro tiempo y trabajo, ¿es propiedad privada?
Porque mis 1000€ del año pasado valían un 10% más que ahora. O eso dicen las mismas instituciones que viven del dinero que me quitan por trabajar.
¿Puedo comprar un casa y dejarla sin ocupar y sin pagar impuestos anuales?
¿Puedo echar de mi propiedad a quien la ocupe ilegalmente?

Son tantas invasiones que no da abasto el sistema.
 
Todos aquellos quienes considero que tienen un poco de cabeza se han dado cuenta de que la crisis covid ha servido fundamentalmente para estructurar un nuevo marco de reglas mucho más ceñido y opresivo que el que existía antes.
Desde el alcalde más muerto de hambre hasta el presidente del gobierno pasando por cualquier Comunidad Autónoma , decenas de políticos se saltaron sus propias leyes , ellos lo sabían , la gente lo sabía pero todos continuaron adelante porque nos estaban salvando de una muerte atroz.
Han probado que con el miedo la población obedece.
Ahora están hablando mucho de tercera guerra mundial y de un posible holocausto nuclear, ya se han llevado por delante todos los medios de comunicación rusos en Europa ¿ qué más pretenden metiendo el miedo en la población sabiendo que en un intercambio de misiles no hay salvación posible?
 
Desde el alcalde más muerto de hambre hasta el presidente del gobierno pasando por cualquier Comunidad Autónoma , decenas de políticos se saltaron sus propias leyes , ellos lo sabían , la gente lo sabía pero todos continuaron adelante porque nos estaban salvando de una muerte atroz.
Han probado que con el miedo la población obedece.
Ahora están hablando mucho de tercera guerra mundial y de un posible holocausto nuclear, ya se han llevado por delante todos los medios de comunicación rusos en Europa ¿ qué más pretenden metiendo el miedo en la población sabiendo que en un intercambio de misiles no hay salvación posible?

Que la gente obedece a quien haga falta para no pasar miedo es tan viejo como nuestra propia especie.
Es sorprendente lo poco o nada que ha cambiado este negocio religioso, desde el primer chamán capaz de controlar las tormentas a cambio de mamadas a un busto de bata blanca por la tele que nos dice que quince días para aplanar la curva mientras seguimos pagando impuestos.
 
Pero esta histeria a nivel mundial y sin entrar en las leyes de otros países , que seguro también se las han saltado , esta dictadura que hemos tenido aquí, nunca se ha visto.
Es que te quitabas la mascarilla en un parque sin un humano a la vista y te rodeaban seis coches de policía.
 
Vacunación obligatoria

Discutible, pero ni eso.

llegado el caso, extracción de irredentos en sus casas e internamiento en campos.

Ya os empezáis a flipar, como siempre.

Eres Oyente Loco Boicot?

El dinero que tenemos, que nos han dado a cambio de nuestro tiempo y trabajo, ¿es propiedad privada?
Porque mis 1000€ del año pasado valían un 10% más que ahora. O eso dicen las mismas instituciones que viven del dinero que me quitan por trabajar.

No lo dicen ellas, lo dicen los mercados que son los mismos que usáis de justificación para hacer tragar con arbitrariedades que en este caso no son políticas sino económicas.

¿Puedo comprar un casa y dejarla sin ocupar y sin pagar impuestos anuales?
¿Puedo echar de mi propiedad a quien la ocupe ilegalmente?

No, pero es que aunque eso sea muy matizable confundís el derecho a la propiedad privada conque ese mismo derecho prevalezca por encima de otros.

En resumen yo, yo, yo, yo, yo, mi dinero y yo. Que está muy bien pero tranquilo, que no te flipes, que no te van a tocar la propiedad privada ni acabarás internado en un campo.

Con tanto victimismo polarizado sólo desvirtuáis debates interesantes.
 
Ahora que habláis de que cada uno hace con su cuerpo lo que quiere, la revista Político ha filtrado que el Tribunal Supremo de Estados Unidos se va a cargar la histórica sentencia sobre la constitucionalidad del aborto de 1973.
 
Pero esta histeria a nivel mundial y sin entrar en las leyes de otros países , que seguro también se las han saltado , esta dictadura que hemos tenido aquí, nunca se ha visto.
Es que te quitabas la mascarilla en un parque sin un humano a la vista y te rodeaban seis coches de policía.
No, nunca se ha visto aquí. Qué va.
 
Que conste que te doy liken por expresarte muy bien, no porque esté de acuerdo.

Y añado que eres un ENEMIGO del progreso, y tanto el siglo XXI como @BILBOKOA te mandan un cordial saludo.
 
Difusa la linea que separan coacción de obligación. Chúpeme la polla o le pego un tiro en los morros, pero recuerde que no le estoy obligando a que me chupe la polla.
Demasiado difusa.
Ha habido centros de internamiento oficiales en otros paises, aquí se han limitado a internanos en nuestras propias casas. Si alguien considera que no poder salir a dar un paseo por el monte no es internamiento, pues ese alguien tiene dos problemas. Uno es que es un imbécil abducido por un terror religioso, el otro es que no tiene miedo a que le quiten la libertad de ir a su aire sin joder a nadie.
Los mercados no dicen una mierda, lo hacen los bancos centrales con sus papeles de colores.
Existe el derecho constitucional a la vivienda, y no veo al Estado, primer defensor de la Constitución, llevarlo a cabo. Si no lo hace el Estado, ¿por qué tengo que hacerlo yo?
Esto parece una perogrullada, pero es sota, caballo y rey: ya que no me la proporciona el Estado, me haré cargo yo mismo, por lo menos hasta que el Estado, por acción o por omisión, me la quite cuando le dé la gana.
Hay quien no acaba de entender que ya no existe la propiedad privada. Coño, que ni siquiera nosotros mismos somos propiedad privada.
 
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