Otro de "trágame tierra" fue en una auditoría que realizamos no mucho a un proveedor de mi compañía.
A mi me encargaron la parcela de seguridad e higiene, muy importante esta última ya que estamos hablando de productos de consumo alimenticio. La chica de la empresa que nos acompañaba, explicaba afanosamente que eran una empresa impoluta, claro ese día que ibamos nosotros, por lo menos había 200.000 mujeres de la limpieza, el vestuario de los currelas estaba impoluto, circunstancia que da a entender que con nuestra visita lo habían preparado sin escatimar, en fin lo que siempre pasa en este país.
Todo iba sobre ruedas, incluso yo estuve tonteando con la anfitriona, que no estaba nada mal, cuando decido ver los vestuarios y cual es su estado. Abre la puerta la muchacha, cuando de pronto encontramos a un moruno de la plantilla con el pinrel metido en el lavabo, si el lavabo de las manos, frotándose afanosamente los espacios entre los dedos de los pies, donde se generan las famosas pelotillas. A la mujer se le inyectaron los ojos en sangre, y contuvo a duras penas las formas. Yo sufrí por no descojonarme cual bestiajez. Y se llevaron una no conformidad por este asunto. Acción correctora: Enseñar al personal al uso apropiado de las instalaciones para el higiene.