Siga el video a continuación para ver cómo instalar nuestro sitio como una aplicación web en su pantalla de inicio.
Nota: This feature may not be available in some browsers.
No. No lo sabemos. Cuéntanoslo.No sabéis lo que es tener como 10 o 12 años,que tu tía (la madre de tu prima/amor platónico de 20) te invite una semana a unos apartamentos que han alquilado y que en el coche te enteres que va su novio,que "te toque" en su apartamento y te pases la semana escuchándolos fuckar a través de la pared...
.
Mi loca tía, cuando vino mi padre a pasar un fin de semana, era reacia a que la viera en bañador, y se fue a otra parte de la playa, separada de nosotros. Se durmió y se quemó tanto que le dio fiebre y le salieron ampollas. Es que fue divertidisimo.
Un suplicio necesario y luego si sale bien la leche.
Qué cuadro, no me lo espera, me he quedado turulato.
Hostia, qué lol de tía, pon fotos, que ya e stará muerta. ¿Era la hermana o la cuñada de tu padre?
.
Un poco exagerado:
1000km en 8h nos sale la media a más de 120 km/h ( 8 x 120 = 960 ).
Teniendo en cuenta que la velocidad máxima de un 600 eran 100km/h , radiador ardiente, pues que no cuadra nitampoconá.
Ka®ma aritmétika
Era de esperar.En mi casa nunca se ha pagado alojamiento por ir de vacaciones, siempre a casa de algún familiar
Ni con el pápa a tope de tiritos de Pitarra, ni con el 600 (25cv) a tope de tiritos de NO , nos aproximamos a las 8 hSe habría puesto unos tiritos antes, hombre. Haga honor a su avatar y tenga fe.
Ni con el pápa a tope de tiritos de Pitarra, ni con el 600 (25cv) a tope de tiritos de NO , nos aproximamos a las 8 h
Ya sería un día entero. Se lo digo porque, aunque poco, también de nene viajé en 600.
¶ioputas¶ los que sois jóvenes.
Que no apreciáis lo que tenéis ahora: cualquier Dacia coge lis 120, con Radio y a.a.
No. No lo sabemos. Cuéntanoslo.
Tranquilo. Mañana rebuscaré y a ver si me hago con material para batallitas del infame levante español, que supongo serán similares en parte con las de muchos de los aquí leyentes.
Hola soy Chavy Chase, padre de Ferris, nunca tuve ni puta gracia como él, pero sirvo para presentar este hilo con las vacaciones más desastrosas que se hayan pasado en familia
Pues si hamijos el otro día en una comida familiar loles como soles remorando unas vacaciones familiares tan anheladas como desastrosas en sus inicios y final.
Primero pongámonos en antecedentes.
Verano del 1988. Por primera vez mi padre podía tomarse un mes de vacaciones en el mes de Julio. Su trabajo le obligaba a pasar todo el verano fuera, de Mayo a finales de Septiembre, amén que en esa época solía ganar unos horocs extra para poder pasar mejor el invierno, comprar unas Yumas a su hijo mayor y más cosas a los pequeños.
La emoción embargaba a toda la familia. Por una vez no nos comíamos todo el puto verano en Bronxtoles, sorbiendo flashes, minizumos y jugando al Imperio Cobra en los portales hasta que nos echaban. Mis padres se plantearon alquilar un apartamento (no muy caro) en el Levante. Hasta aquí todo normal, ya que era lo habitual en las demás familias. No sé el porqué pero hicieron caso de una vecina a la que veíamos de pascuas a ramos que había alquilado un apartamento en Gandía. Nos dió un teléfono y se contrató el alquiler.
Ya estaba todo hecho, nos íbamos quince días a la playa. La espera se hizo eterna, pero llegó el día
El día era un 1 de Julio. Nos levantamos a las 3:00 AM, cargamos el coche como si fuerámos la Delta Force en misión de urgencia, mi padre arrancó el Renault 12 cargado hasta las trancas cual magrebí de camino a Algeciras e iniciamos el viaje por unas calles que no estaban ni puestas. Era el ansia de salir de vacaciones y no gastar ni un minuto.
Yo iba de copiloto con mi padre, ya que mi madre se quedó al cuidado de mis hermanos pequeños en el asiento trasero. Bueno al cuidado, lo que se dice al cuidado, a los 10 minutos ya estaba roncando. Mi padre y yo íbamos de cháchara, criticando a los otros conductores que iban con mejores cochacos y nos adelantaban, pero que en las curvas con la pericia al volante de mi progenitor les comíamos terreno. También nos metíamos con los familiares que no nos caían bien, habiendo loles durante el viaje.
Así llegamos a Gandía a las 8:00 AM sin parar ni a mear. Obviamente a esa hora no estaba el dueño para darnos las llaves. Desayunamos en un baretucho de mala muerte, un café y unas magdalenas valencianas más duras que el grafeno.
A las 10:00 apareció un tipo gordo, con pinta de borrachín a darnos las llaves. El edificio parecía bastante vetusto mirado desde el exterior. Subimos unas escaleras (no había ascensor) y abrió la puerta.
Emanó un olor a cerrado y de humedad que ni la celda del Conde de Montecristo. Teniendo en cuenta nuestra experiencia (ninguna) en estos lares, todos nos quedamos como un conejo al que han deslumbrado con las largas. Nos enseño deprisa y corriendo las habitaciones, saliendo de allí como si los Marshall le estuvieran pisando los talones.
Mis padres pese a lo que estaban viendo, le habían pagado religiosamente la parte pactada a la llegada. Nunca debieron hacerlo. Aquello era una pocilga. Había un sofá de las guerras Carlistas que te sentabas en él y te quedabas literalmente pegado, cuando te levantabas parecía el papel de las magdalenas. En la nevera había especies animales todavía no descubiertas, los dormitorios con unas camas que chirriaban más que una gata en celo con unos colchones para verlos. Yo siempre me quedé perplejo con un manchurrón en un cuadro del comedor, que parecía una lefada de un escopetazo al aire. Mi mente calenturienta de la adolescencia daba como hipótesis mas probable esa opción, y así imaginarme situaciones para paja. No tenía ni tele, ni radio, nada para contactar con el exterior
Y el baño, madre mía el baño. Nunca ví cosa igual. Con nada que hicieras se formaba una neblina que te cagas. Era como una sauna, literal. Te ponías a cagar y al minuto te caía una gota de sudor por la nariz como si estuvieras desactivando una bomba. Poco podías hacer allí, ni pajas.
En los minutos siguientes, toda la familia empezó a darse de bruces con la realidad. Mi madre cagándose en la puta vecina, de los ojos de mi hermana brotaban las lágrimas de rabia más duras que he visto, yo intentando que mi hermano no se pusiera a jugar en el suelo con sus coches guisval y mi padre callado. Un drama.
Pero hete aquí que de manera instantánea, cual comando del SAS y bajo las órdenes marciales de mi madre, se empezó la operación limpieza. Mi padre y yo al super que había debajo de casa, donde provocamos una rotura de stock de amoniaco y lejía, comprando también útiles para limpiar. Cuando llegamos mi madre dispuso los trabajos para empezar lo antes posible. El apartamento tenía cuatro habitaciones, como nos podíamos apañar con tres, una la utilizamos de trastero para quitar lo más mierda y la ropa de hogar, que gracias a Dios mi madre la había traído de casa.
Antes del mediodía aquella cochiquera estaba reluciente y con un olor a lejía importante. Yo junto con mi padre, ibamos barriendo y fregando en varias tandas, dando varias manos en todas las estancias. Me quedé una habitación para mi sólo, donde dispuse mis cosas sin meterlas en el armario. Lo bueno de esto es que me podía hacer pajas en la soledad de mi habitación. Rememorando el cuadro y a modo de venganza, lancé unos cuantos escopetazos a una foto con un marco en mi mesilla.
Pese a la mierda de lugar, la fortaleza de mi madre nos hizo sobreponernos y empezar a disfrutar de las vacaciones. Así estábamos, pasando todo el día en la playa, mi padre haciendo paellas, por la tarde dando paseos castañeros, paseos sin rumbo y sin gastar un duro, hasta que tres días antes de salir, nos llama el del bar de abajo. Habíamos recibido una llamada de Extremadura. La familia de mi padre. Nos intentamos poner en contacto, pero no estaban en casa, hasta que al día siguiente ya conseguimos contactar. El abuelo paterno había sufrido una trombosis y estaba a punto de quedarse queco. Deprisa y corriendo a llenar el R12 y tirar para Madrid. Aquí hubo un comentario LoL de mi madre, que no se llevaba nada bien con el suegro, y soltó: Siempre jodiendo la marrana como es habitual en él. Mi padre y mi madre se enzarzaron en una fuerta discusión, pero a mi me provocó LoL porque mi madre tenía toda la razón.
Camino de vuelta a Bronxtoles, con el R12 dando a lo que podía, cuando en Motilla de Paláncar dijo basta. Ahí tirados durante horas, hasta que llegó una grúa. Llegamos como si hubiéramos servido en Afganistán, a las mil en casa. Nos dejó un coche un vecino, y mi padre me eligió para salir con él hacía Cáceres. Así fuimos de madrugada, para que luego el cabrón del abuelo se recuperara a los pocos días.
No sabéis lo que es tener como 10 o 12 años,que tu tía (la madre de tu prima/amor platónico de 20) te invite una semana a unos apartamentos que han alquilado y que en el coche te enteres que va su novio,que "te toque" en su apartamento y te pases la semana escuchándolos fuckar a través de la pared...
Utilizamos cookies esenciales para que este sitio funcione, y cookies opcionales para mejorar tu experiencia.