Por ir un poco más rápido, y ya que hemos hablado de 1987 y Slip on the Tongue. Durante la grabación del primero ocurrieron todo tipo de problemas, que retrasaron muchísimo el disco y, a la larga provocaron todo tipo de confrictos internos.
Coverdale estuvo de baja seis meses, tiempo, según él, que aprovechó Sykes para hacerse cargo del proyecto y, siempre según la versión del cantante, querer incluso hacerse cargo del grupo buscando un cantante que reemplazara al bueno de Coverdale.
Así, y una vez hubo un baile de productores y técnicos de sonido bastante grande, el disco se publicó; Coverdale se quitó de enmedio a Sykes, a Murray, según el cantante, porque había apoyado al guitarrista y a Dunbar que, aunque hace un grandísimo papel en el disco, no daba el perfil físico".
Contrató a Sarzo, Vandenberg, Aldridge y Campbell para los videos musicales y gira de un disco donde no habían tocado una sola nota, llegó el éxito tremendo del disco, las apariciones de Coverdale con su framante señora Tawny Kitaen, la continuación Slip on the tongue, con todo lo comentado arriba y, como suele pasar, la caída después de llegar a la cumbre.
Un Slip on the tongue que no vendió tanto como 1987, un Coverdale con problemas de voz, lo cansado que estaba de las presiones del sello norteamericano por tener otro disco exitoso y, la separación bastante jodida, de su mujer.
Así que tenemos a Coverdale con tiempo libre después de bastantes años de no parar, planteándose su retirada del mundo de la música (no sería la primera vez) ante todo lo que trajo el Grunge (que prácticamente barrió a todos los grupos como Whitesnake) y no demasiado bien de ánimo.
Y, si todo lo que he leído en estos años es cierto, Kalodner, al ver que no le sacaba un disco de Whitesnake a Coverdale, lo puso en contacto con Jimmy Page que, como ya dijimos, habían tenido un acercamiento en el 82. Page también llevaba años tratando de convencer a Robert Plant, sino para resucitar Led Zeppelin con el hijo de Bonzo a la batería, para al menos hacer algo juntos. Si uno conoce la muy recomendable discografía de Plant, sabrá que hubo algunas colaboraciones puntuales, pero que el cantante para nada iba a vivir de la nostalgia (en serio, echarle un oído a la discografía de Plant, a partir de Now and zen no tiene disco malo).
Así que tenemos a un Coverdale con ganas de hacer algo distinto y a un Page uniéndose a un tipo con el que tenía feeling y que era en aquellos años lo más parecido al Plant de Led Zeppelin (al menos en registro alto).
Yo con este disco no soy objetivo, me parece una puta maravilla; no me resulta anticuado, la producción creo que no ha envejecido nada mal, Page toca como dios, Coverdale no abusa tanto de su registro alto como hará después, y si abusa en alguna canción no chirría demasiado. Recuerdo hace diez o doce años discutir en foros con que Coverdale abusaba hasta el límite para tener contento a Page y ser un mero clon de Plant. No estoy de acuerdo, canta alto cuando la canción lo requiere, no lo fuerza como en los últimos discos de Whitesnake.
Y, con todo lo bueno que me parece el disco, no ha dejado de ser una anécdota. Vendió poco, sea porque salió en una época donde mandaba el Grunge, por la recesión económica de la época y, sobre todo, porque no hubo gira. Unos pocos shows en Japón y poco más. ¿El motivo? Según Coverdale, por el manager de Page; mi teoría, una vez me he leído la autobiografía de Steve Gorman, ex batería de The Black Crowes, y con los que colaboró Page, es que el bueno del guitarrista es un tipo bastante peculiar, que lo mismo hoy te dice de salir de gira y, mañana se levanta con el pie cambiado y anula todo. Al final, quien mejor lo entiende es Robert Plant. También es cierto que este último se sintió bastante herido al ver como Page hacía un proyecto con alguien al que ve como un mal clon (Plant siempre ha soltado pestes del Coverdale de los 80) y, claro, no tiene la misma relevancia un proyecto con Coverdale que uno de Page & Plant, aunque, con todo lo que me gusta No Quater y Walking into Clarksdale, prefiero, de lejos, el disco que estoy reseñando.
Como sea, insisto, el disco es potente, no tiene ninguna balada ñoña o comercial, Page toca de cojones y nos dejó para la posteridad ver a Page tocar en Japón Still of the night, canción de cuyo video musical se había descojonado bastante al ver como le imitaban el movimiento de guitarra con el arco de violín y, a Coverdale cantar varias de Led Zeppelin. Eso si, la portada es un error y el listado de canciones no es el más afortunado.
Minutos musicales:
Una puta maravilla donde Coverdale si se deja las cuerdas vocales:
Un blues donde si creo que a Coverdale le sobra el registro alto pero aún así es buenísima:
Coverdale cantando Rock and Roll de Led Zeppelin en Japón, no lo hace mal pero es imposible cantarlo como Plant hasta el 73:
Concierto integro en Japón: