Hable gentilmente con la pareja, que hablando se entiende la gente. Luego, cuando su amigo ya sea un adicto al tetra-brik de Don Simón cásese con la puta, adopte una niña china de diecisiete años y cuando cumpla dieciocho déle el biberón. No olvide ponerle unos zapatos de esos de madera que le aprietan el pie para que no pueda huir.
Grabe y postee a su amigo en Callejeros, a la mujer de su amigo amenazándole con el jamonero, y sobre todo los tropezones de la china mientras usted la persigue rabo en ristre.
De nada.