Joder, este hilo está ahí como escondido, se me pasó responder. La verdad es que estoy casi totalmente de acuerdo con todo lo que dices. Lo que ocurre es que esta peli no me parece que base su eficacia (bueno, un 6 creo que le tengo) en la brillantez o coherencia del guión, sino en el ambiente creado por, en buena parte -no me parece excesivo decirlo-, la interpretación del master Walken, además de la planificación -y demás cosas de esas de directores- que hace Cronenberg, o la fotografía, que me parece una gozada. La parejita, el brutal accidente, la nieve, la recuperación, las visiones, el padre, la nieve, la puta de la ex, el candidato, la nieve, la final epifanía de Walken como típico psycho yanqui (el desenlace casi es lo de menos, aunque tiene su aquel).
No sé, a mí me pareció una peli sobre la soledad de un tipo, que pasa de ser un hombre normal y enamorado a ser un individuo devastado por el dolor y que guarda un terrible secreto que le hace estar aún más solo, sin posibilidad de comprensión, sin afecto, culminando su brutal alienación con la negación de su auténtica identidad ante todos: no es un asesino desequilibrado; él sabe, él ama, él está vivo aunque todo y todos le den la espalda, y se mantiene íntegro hasta el sacrificio final, tal vez como única forma de mantener una cordura, o algún tipo de ligazón con la bondad o con algo que le reconfortara, que le uniera a sí mismo y a cualquier rescoldo emocional que pudiera conservar de su antigua vida. Sostengo que a través del asesinato del político cobarde, el personaje del tito Chris finalmente vuelve al seno amantísimo de su madre, y en última instancia a Dios Todopoderoso que está en los cielos y que desde allí vela por todos nosotros. Amén.
Qué coño, esta película sería un terrible canto al individualismo, y perfectamente empalmable su visionado con el del docu sobre la filmación de Apocalypse Now, otra oda a la fuerza de uno mismo frente a la adversidad.
Supongo que a Quatermass le parecerá sosa y blanda porque el tipo de cosas que cuenta la peli a él le pasan continuamente, pero a mí me parece un film razonablemente acojonante. Una peli bastante sensorial y física (toda ella, aunque siempre hay detalles especial y totalmente imprescindibles para la comprensión de la narración, como el de las tijeras), como todo el cine (el que he visto) del tarado irrecuperable que es Cronenberg, en el que el guión me importa un poco menos que el ambiente, el cómo me resulta más impactante que el qué. Este post se autodestruirá en 3, 2, 1...