Bueno voy a rematar la noche.
LOSING MY REMIGIO
Puede parecer un juego de palabras, y de echo lo es. Remigio era un ludopata que llevaba varios años en centros de rehabilitación diversos. Era manchego como yo, de un pequeño pueblo de apenas 1000 habitantes. Decía que menos mal que la casa no estaba a su nombre porque se la habría jugado hace décadas. Era un tipo recio, fuerte, de apenas 1.65, pero muy duro.
La gente en general en el centro eran extremadamente duros, el único que le ganaba era un Peruano con metastasis en todo el cuerpo y que aún así curraba desde las 7-00 como el que más. Allí aprendí que la gente no se anda con chiquitas. A pesar de no tener ni la EGB era un tío bastante culto, aunque se le notaban los 4 años que llevaba en centros-sectas de este tipo. Muy imbuido por el tema de la religión, era de los que levantaba las manos y cerraba los ojos mientras sonaban las alabanzas. Eso si, era un gran tipo, como todo buen manchego trabajador y noble.
Nos hicimos amigos. Yo le preguntaba que porqué después de 4 años no se iba de aquel sitio y se buscaba la vida. Tenía 51 años y se había pasado la vida trabajando de albañil. Tenía tres vértebras aplastadas y se llevaba mesas de madera de dos metros de dos en dos. Era mi colega de los retiros el A y yo. Eramos el trio de camareros imparable. Que venían 300 comensales, nosotros barríamos, fregabamos quitabamos el polvo y montabamos las mesas.
Para el que no haya trabajado en un restaurante o salón de bodas poner 300 servicios (servilleta, cuchara, cuchara de postre, tenedor, vaso, tenedor) añadelé luego que estabamos en Julio y el agua tenía que estar fresca. Tomabamos dos bidones de 50 litros y con una carretilla los llevabamos a la camara frigorifica, pero a veces 2 no eran suficientes asi que llegamos a llenar hasta 6. Que luego tras la traca había que volver a rellenar y poner en la cámara. Saqué unos deltoides de llevar las putas garrafas que ya los quisiera black.
Remigio era uno de los pocos a los que les dejaban el movil las 24 horas al día. Eso solo te lo daban cuando llevabas 3 años o más. Nos poniamos canciones de los scorpions, la verdad es que era un tío muy bruto pero serio, noble y trabajador. Muy bueno con los panfletos y aún mejor como camarero. Le sobraban bastantes kilos, pesaba 90 kg o así, pero eso no lo hacía más lento ni menos activo. Era un Crack y ya está.
Pero entre que un dia se le calleron 11 mesas de madera encima y le detectaron una neumonía lo empecé a ver como más como yo, más depre. Me decía que se iba a ir... yo por otra parte lo animaba, "llevas 4 años aquí, no vas a caer en lo mismo" era un tío que había vivido 1 año en la calle pidiendo limosna, como los tios que veis por la calle, esos somos nosotros, balas perdidas en busca de una diana. Pero no. El se empeñó en que se iba, que aún tenía el dinero de la casa de sus padres y mucho ahorrado.
Yo, al ver el plan que tenía en mente me imaginaba lo peor. Le dije que si, que se fuera, pero que tuviera cuidado con lo que hacía. Yo veía algo en su actitud que no me daba confianza. Estaba dejado, aislado, pensativo. Ni a mi que eramos uña y carne me hacia caso. Tenía un gusto musical excelente y un día que el que llevaba 20 años alli que era el que tocaba las alabanzas me dejó la guitarra pensando que le había mentido al decirle que sabía tocar me marqué un "Dust in the Wind" que me quedo perfecto, en su honor. Pero no conseguí nada. Fue la perdida que más me dolió. No se que habra sido de él. Espero que todo le haya ido bien, se lo merece.
Y aqui venía lo de "losing my remigio" que acompaña el titulo del hilo. Saludos
Clásico
Asiduo
Freak
Se te quitan las vergüenzas.
Baneado
), ante mi perplejidad me decía lo mismo, "por si acaso". Yo no tuve educación religiosa en absoluto, ni mucho menos cristiana, así que nunca me llegué a plantear el "por si acaso". Pero en otras personas, ver a la abuela ir a misa cada día y ser machacado sin piedad sobre Dios desde la más tierna infancia, pues eso tiene que marcar quieras o no, por más racional y sensato que se sea uno.