Yo nunca he fumado, y tampoco me ha molestado nunca el tabaco, a no ser que esté comiendo en un restaurante y el de al lado no pare de encenderse cigarro tras cigarro, o que haya alguno fumándose un puro. Y la gente es tan poco considerada que te pone el cigarro al lado tuyo, e incluso te echan el humo en la cara. Desde que empecé a trabajar siempre he comido menús fuera de casa, y me ha pasado esto centenares de veces.
La verdad es que se está mucho mejor ahora en los bares que antes, y ya no te digo en las discotecas. Cuando sales de estos locales, ya no hueles a chimeneas podridas, e incluso puedes aprovechar el tejano y la camisa para ponértelo al día siguiente, ya que estos no se han escapado corriendo de la mierda que antes sí tenían.
También hay que destacar el comentario de fanegas, y se lo amplio. Cuando antes se podía fumar en la discoteca, y te enrollabas con una chica que fumara, como ya estás borracho y metido en el túfido ambiente, casi no notas el sabor del tabaco en su boca, pero amigo, una vez quedas con ella un lunes para ir a tomar un café, y le das un beso después de fumarse un piti, el sabor es repugnante, yo por lo menos no lo aguanto.
Y como sé que os gustan las fotos ilustrativas, aquí os dejo algunas.
Sigan fumando, sigan.