Cuando al-Motamid, rey de Sevilla, y el Cid están tramitando su pago, les llegan noticias del movimiento de tropas de Abd Allah, rey de la Taifa de Granada, junto con tropas cristianas (encabezadas por García-Ordoñez, conde de Nájera y amigo personal del Alfonso VI) hacia Sevilla. El Cid trató de evitar el combate pero la insistencia de García-Ordoñez hizo que el Cid uniese sus tropas a las de al-Motamid, tributario de su rey, y así derrotar a los granadinos y sus aliados. El Cid capturó a García-Ordoñez y al rey de Granada y los tuvo encadenados tres días, para escarmiento. Al-Mutamid pago, encantado, las parias e hizo varios regalos personales al Cid, entre ellos Bavieca.