Rica. Comparto foto de una con las que he intimado en el último viaje.
Esta no es la de la maldición, pero bien lo podría haber sido:
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Muy maja. Hasta la estoy echando de menos ahora, solo un poco.
No la conocí vistiendo así de tradicional. Es la foto que tiene ahora en WhatsApp.
La conocí estando ella con un chaval en un bareto tomando una birra, al chico lo conocía de la noche anterior y me paró a dar charla y presentármela. Buen rollo desde el primer momento, unos tragos, bailoteo y pal catre. La dije que si podía venir a domir conmigo y ni lo pensó, encantada de la vida. En mi hotel cobraban 50.000 chelines de multa por llevar compañía (12€, aunque un par de días llevé compañía y no los pagué), la dije si sabía algún sitio y me llevó en moto a un hotelito que en España sería de mala muerte pero allí llegaba a ser casi aceptable, por 15.000 troskis (3'50€) la amanecida.
Me estuvo chupando el rabo un rato largo con ganas disfrutando como una gorrina la muy perra.
Luego se me regaló entera con un squirting antológico, flipé al principio y pensé que me estaba meando (al revés que con la regadera humana que pensé primero en un posible squirt), la dije varias veces pi-pi, y acabó diciéndome: "why you call it pee pee?". Ahí confirmé que de meados nada, dentro del coño parecía que tenía una bomba de agua y no paraba de chorrear la hija de su madre. Dejó la cama que parecía una piscina, por suerte había otra cama en el cuarto y después de la larga follada nos pudimos mudar y dormir bien a gusto abrazados.
Por la mañana otro polvo antológico y quedamos en volver a vernos, a punto estuve de ir a su casa a conocer a su familia, menos mal que no cuadró.
Chateamos un par de días, y cuando la volví a ver en el mismo bareto andaba yo con otra liado y ella muy comprensiva saludó y no me montó ningún jaleo.
Ahora pienso que si me pasa con la que me está echando la maldición el pollo que me habría montado hubiera sido de órdago.