Lolitonta
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Lo que dice de que ralentiza, en mi caso es cierto. Yo recuerdo que solía ser una muchacha muy nerviosa, casi hiperactiva. Caminaba siempre muy rápido, y hacía mil cosas al mismo tiempo. Es más, si ya era difícil la comunicación a causa de mi discapacidad, pues con la hiperactividad lo era aún más, con lo cual hasta que empecé a fumar porros no puedo recordar ninguna conversación realmente trascendental para mí (algo que tuvo consecuencias nefastas en mi desarrollo psíquico).
Pues eso, que empecé a fumetear... y recuerdo que una noche, en vez de hacer el tonto o follar, me dio por encerrarme en el piso con un colega a conversar durante horas, sin más. Fue algo enorme, trascendental.
Y también es cierto eso de que los efectos negativos se dan sobre todo por unas circunstancias inadecuadas... en mi caso, yo fumeteaba en las escaleras de emergencia de mi finca, y estaba constantemente emparanoiada por si me pillaban los vecinos. No paraba de mirar debajo de la puerta, me ponía muy cerca de la ventana, etc... Al final, pasó que fumar se convirtió en algo muy desagradable, que me llevaba a pensar cosas horrendas acerca de mi futuro, me deprimía mucho, e incluso con sólo una calada llegaba a vomitar. Fue entonces cuando pasé a fumetear ocasionalmente (cuando me encontraba sola en casa). Y, bueno, la última vez ha sido el verano pasado, y por ahora no parece que vaya a volver a fumetear a corto plazo.
Pues eso, que empecé a fumetear... y recuerdo que una noche, en vez de hacer el tonto o follar, me dio por encerrarme en el piso con un colega a conversar durante horas, sin más. Fue algo enorme, trascendental.
Y también es cierto eso de que los efectos negativos se dan sobre todo por unas circunstancias inadecuadas... en mi caso, yo fumeteaba en las escaleras de emergencia de mi finca, y estaba constantemente emparanoiada por si me pillaban los vecinos. No paraba de mirar debajo de la puerta, me ponía muy cerca de la ventana, etc... Al final, pasó que fumar se convirtió en algo muy desagradable, que me llevaba a pensar cosas horrendas acerca de mi futuro, me deprimía mucho, e incluso con sólo una calada llegaba a vomitar. Fue entonces cuando pasé a fumetear ocasionalmente (cuando me encontraba sola en casa). Y, bueno, la última vez ha sido el verano pasado, y por ahora no parece que vaya a volver a fumetear a corto plazo.