Hoy me he cagado en la calle

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Creo que todo el mundo se ha cagado encima alguna vez. Reyes, papas, modelos de lencería, presentadores de programas de televisión...., pienso incluso que es una experiencia que te pone a prueba para ver cómo sales de una situación tan grave. Resumiendo, quien no se haya cagado aun no ha demuestrado su hombría.

Afortunadamente yo ya pasé la prueba. En las fiestas de mi ciudad me pillé una cogorza que hubiera sonrojado al mismísimo Boris Yeltsin. Borracho como un lémur, me arrastré a un piso franco que mis hamijos y yo teniamos para juerguecillas y ligoteos. Total, que me quedé dormido y al despertar descubrí con horror que me había cagado, pero no manchado ligeramente ni emponzoñado el calzoncillo con mierdecilla líquida, no, me había cagado de forma pantagruélica, formándose incluso un enorme bulto en la parte de atrás de mi pantalón.

Pues bien, tuve que recorrerme toda la ciudad de aquella guisa, volviendo la cara a todas las personas conocidas con las que me cruzaba. Al llegar a casa de mis padres, me metí al baño e intenté asearme. Como todavía estaba afectado por la borrachera, al intentar meterme a la ducha, me resbalé arrastrando la cortina con tan mala suerte que me caí sobre ella de culo y pringué de mierda toda la tela. Pues bien, me duché, me puse guapo e hice lo que cualquier forero de esta casa hubiera hecho, irme de juerga one more time y dejar todo el cuarto de baño lleno de mierda para que mi madre lo limpiara todo. Mi madre tardó meses en perdonarme.

FIN.

Edito para decir que en aquel piso franco no había ni siquiera agua corriente. Que sois listos como robocs y seguro que lo estáis pensando, pájaros.
 
Luego las mofas van al enfermo de Crohn, oséase, YO.

La última vez que yo me cagué fue en un bar de Granada, el Flashback, sitio elegantemente decorado con fotos de Raphael y Radio Futura por todos lados. Llevaba ya no se cuantos Jameson y me invitaron a un chupito de Four Roses. Al bebérmelo y por acto natural de la ebriedad granadina hostióme para atrás, tirando varios cuadros y cagándome en el acto, al llegar al suelo. El olor era nauseabundo, a caverna. Mis pantalones puro pantano. Al salir a la calle llovía a mares y me fui a mi casa andando, chorreándome mierda y agua por todo mi cuerpo y cantando a viva voz Tupés en Crecimiento de Derribos Arias.
 
Aperturas de hilo como estas fueron las que me engancharon a PL.

A mí lo que me pasa pasa es que, cuando comparto mi tiempo con mi señora y paso varios días seguidos en su piso, a fuerza de reprimirme las flatulencias acaban escapándoseme cuando me duermo.

He llegado a despertarme a mí mismo con mis propios pedos a mitad noche. Lo normal es que cuando se caen los pedos en privado, la cosa no va más allá de un discreto soplido. Pero tras estar horas y horas aguantando con firmeza delante de mi señora, al mínimo relajamiento muscular se escapan los truenos palmeteando a presión. Cuando eso sucede siento un fuerte alivio, pero me corroe la duda y la vergüenza cuando la miro a ella, cuando está de espaldas y no sé si está despierta o se hace la dormida.

Lo de defecar con ella presente se me hace una odisea. Nunca encuentro el momento adecuado, y cuando lo hago siempre está toda la casa en silencio.

Los olores en cambio no deberían despertar preocupación. Todo es cuestión de dejar que la materia oscura se sumerja sin papel de por medio, aunque salpique.

Mierda y romanticismo.
 
Pero vamos a ver, estamos tontos o que cojones pasa?

¿Que es eso de aguantarse los pedos cuando uno esta con la parienta?

Luego os quejais de que os echan la bulla si meais y salpicais, si dejais los zapatos en medio del salon, o si os rascais los huevos por dentro del pantalon con tal intensidad que es perceptible no solo por la vista, sino tambien por el olfato.

Como no os van a dar caña, si estais hechos una panda de maricones hombre.

Lo suyo es, no solo no aguantarselo, sino rodear el pedo de un ritual, o varios, que lo adornen hasta tal punto de poder considerarlo "Barro-co".

Como se hace esto, bien sencillo.

En invierno, es mas facil, estando tapados por una manta, se puede uno aliviar de "Rieju" style, con el culo aposentado en el sofa, o bien hacer como que vas a coger (¿sabéis que había escrito coger con j? así de cateto y de subnormal soy) el mando, le pones el culo en un muslo, te trallas y a continuacion puedes sentenciar algo como "Que siempre estas helada".

Otra modalidad, es ir, dia tras dia, asociando la virilidad del hombre a la flatulencia incontrolada.

Esto es, levantarse, simular tener una escopeta paralela apoyada en el hombro apuntando al infinito, cerrar un ojo, gritar "PLATO!" y acontinuacion liberar el el contenido de los intestinos, fingiendo incluso el retroceso del arma.

Homosexuales, travelos y bisexuales, se puede ser, pero mariconas, jamas.
 
No a ver, que yo tan calzonazos no soy.

Que si me la encuentro por un foro le llamaría puta y que se escanease las tetas. Sabe usted?




Al tema.

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Me siento bastante identificado con este hombre, yo si no voy cagao bien cagao, la práctica de deporte de alta intensidad se me hace un suplicio.

Si voy a un ritmo normal todo va bien, pero a la que me meto en un rango de pulsaciones tal como para matar algun forero, en vez de salirse el higado por la boca, me sale la caca por el culo. Nunca he llegado a cagarme, pero alguna vez he tenido que parar en casa de un colega, porque a mi casa no llegaba limpio.

Últimamente lo tengo más controlado, no comer tanta fibra, que además es de maricas y antes de una carrera levantarte a las 6 para que te de tiempo a desayunar y posteriormente cagar.
 
Los peligros del día a día son los pedos que suenan a mojado. Uno los suelta y es como si se te dispara la escopeta, durando 3 segundos no sabes si te ha dado el tiro. Lo normal es que esos pedos se queden en susto, o en bóxer humedecido sin más. Por eso son mejores los bóxer de algodón, absorben mucho más.

Para giñadas, una vez tras unas cervezas llegué a mi casa doblado y andando como una geisha, con tantas ganas, que empezé a soltar nocilla 2 segundos antes de pensar lo que estaba haciendo. Me cagué con la tapa puesta. El puto baño parecía una peli de max hardcore, pero en triste y solitario. Menos mal que estaba sólo, y pude regocijarme limpiando mis propias heces acuosas. Aquello durante 2 días olió peor el que trastero de los McCann.
 
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