Aplicación de la ventaja
El árbitro podrá aplicar la ventaja siempre que se cometa una infracción.
El árbitro deberá considerar las siguientes circunstancias para decidir si debe
aplicar la ventaja o interrumpir el juego:
• la gravedad de la infracción; si la infracción implica una expulsión, el árbitro
deberá interrumpir el juego y expulsar al jugador, a menos que se presente
una oportunidad subsiguiente de marcar un gol
• la posición en la que se cometió la infracción: cuanto más cerca de la meta
adversaria, tanto más efectiva será la ventaja
• la oportunidad de un ataque inmediato y peligroso contra la meta
adversaria
• el ambiente del partido
La decisión de sancionar la infracción original deberá tomarse en los siguientes
segundos después de que ocurra.
Si la infracción implica una amonestación, esta deberá imponerse durante
la siguiente interrupción del juego. Sin embargo, a menos que exista una
clara situación de ventaja, se recomienda que el árbitro interrumpa el juego
y amoneste inmediatamente al jugador infractor. En caso de NO imponer la
amonestación en la siguiente interrupción del juego, la tarjeta no podrá ser
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