Claro, vosotros no creéis en la sobrenaturalidad porque creéis en el pasado y el futuro; yo que no creo en el tiempo, y cada vez menos, os podría contar historias increíbles, acerca de cómo beso a las chicas y siento el deseo en mi cuerpo. Trascender siempre debió ser superar el espacio-tiempo, y los pocos que lo consiguieron alcanzaron una paz inaudita; yo alcanzo ese punto a veces, muy de vez en cuando, y hoy me ha ocurrido.
Los ideales sólo los alcanzan quienes no creen en el tiempo, por eso el hombre viril imita al toro y lo posee; siente como el toro, respira como el toro y ama como el toro. Las mujeres extasiadas, los hombres temerosos, todos le dejan un hueco al toro.
Los hombres podemos alcanzar cotas imposibles, y si algo no es creíble hoy, en el espacio-timepo aparecerá el hito que marcará el pistoletazo de salita. El artista es el ser más viril sobre la superficie de la tierra, incluso Oscar Wilde (gracias Redivivo) era más hombre que todos vosotros juntos; la pasión nos convierte en bestias nobles y poderosas, y es mucho más satisfactoria la vida de bestia que la de hombre, ojalá algún día me convierta en bestia...
A los que hemos alcanzado los límites que nos marcamos, sólo nos queda enfrentarnos a Dios por osadía y seguir a nuestra pasión inhibiendo el intelecto. Y partirle la puta boca si hace falta a Hércules, Hades, Neptuno y júpiter.
MAYAYO LOVES YOU AS YOU LOVE MAYAYO