ESTRIPATERRONES rebuznó:
Oleeee! Es una tercera serie, creo.
La primera tenía radios metálicos las llantas de acero cromado.
La segunda seguía siendo amarilla, ya traía llantas de aluminio anodizado en azul, a juego con las pinzas de freno, las manetas, los protectores del manillar y la tija. Y el resto de series con llantas de plástico (la última era la serie Mag, roja con llantas negras que era la hostia), como la tuya, con un descomunal plato que, sumado al peso de la bici, hacía las cuesta arriba un sufrimiento (ya entiendo por qué llevabas un portacantimploras
). Pero cuestabajo era imbatible por su largo desarrollo. Y cómo olían a goma quemada las de llantas de plástico tras una larga frenada a fondo, ¿eh? Esos pedales de plástico azules resbalaban un huevo mojados...
Yo suspiraba por una California o una Bicicross plateada con neumáticos Michelín Cobra rojos, pero mi madre no tenía dinero para comprármela y me conformaba con darme una vuelta en la de mis amigos.