Jose David
Clásico
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- 2 Jul 2006
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Ayer sin ir más lejos, entré en terra. Sin ninguna pretensión, solo hablar. Pero cuando vi los deliciosos nicks de las chicas, no me pude contener. Así que entré a algunas con la frase: “¡¡¡Ayúdame por favor!!! “. Una contestó con un “k quieres” que echaba para atrás, pero bueno… la mujeres ya no tienen mucha educación así que se lo dije.
“necesito sexo, lo necesito realmente”. Me di cuenta de que en el fondo era verdad. Y me contestó lo que otras también han dicho innumerables veces a innumerables chicos “pues pajéate”
A ver, chicas. LAS PAJAS NO SUSTUTIYEN EL SEXO. Alivian, ayudan, desahogan, pero solo superficialmente. Se alivia la testosterona, y se genera una pequeña cantidad de oxitocina, pero para nada lo necesario. Para estar en calma y relativamente feliz, necesitamos estar con una mujer REAL. Sin eso, puedes matarte a pajas que cada vez te volverás más agresivo, amargado y loco perdido. El contacto humano, esa es la clave. Dormir abrazados puede ser mejor que el mejor polvo del mundo para una persona que lleva meses sin que una mujer lo toque.
El sexo con una mujer, quita la tensión sexual y también la tensión de la falta de contacto humano con dicha mujer. Mata dos pájaros de un tiro.
Supongo que muchas sonreirán y pensarán (mejor todavía, más poder tendré yo). ENHORABUENA, eres una hija de puta, pero a lo que voy… hay una forma de ayudar.
Si veis a un chico que no os gusta nada de nada, pero que sabéis de buen grado que necesita estar con una mujer, probad esto, poned vuestra mano (en caso de que sea un conocido claro está, los desconocidos lo van a tomar como algo raro) sobre la de el, y dejad que ese contacto humano permanezca unos minutos, veréis como a los cuatro o cinco minutos, se nota mas calmado. No es broma, intentadlo.
Por supuesto es solo un alivio minúsculo y muy a corto plazo, pero ayuda. También notareis otra cosa: a ese chico le vais a caer bien y va a pensar mejor de vosotras… efectos colaterales.
Hala, usad esa información como queráis. Y argumentos a favor, en contra, y con más conocimiento que yo quiero…
Besos a todos en plan fraternal, me voy a la cama y me acabo de dar cuenta, por patético que resulte, que os conozco mejor a algunos de vosotros, que a muchos de mis conocidos cotidianos.
“necesito sexo, lo necesito realmente”. Me di cuenta de que en el fondo era verdad. Y me contestó lo que otras también han dicho innumerables veces a innumerables chicos “pues pajéate”
A ver, chicas. LAS PAJAS NO SUSTUTIYEN EL SEXO. Alivian, ayudan, desahogan, pero solo superficialmente. Se alivia la testosterona, y se genera una pequeña cantidad de oxitocina, pero para nada lo necesario. Para estar en calma y relativamente feliz, necesitamos estar con una mujer REAL. Sin eso, puedes matarte a pajas que cada vez te volverás más agresivo, amargado y loco perdido. El contacto humano, esa es la clave. Dormir abrazados puede ser mejor que el mejor polvo del mundo para una persona que lleva meses sin que una mujer lo toque.
El sexo con una mujer, quita la tensión sexual y también la tensión de la falta de contacto humano con dicha mujer. Mata dos pájaros de un tiro.
Supongo que muchas sonreirán y pensarán (mejor todavía, más poder tendré yo). ENHORABUENA, eres una hija de puta, pero a lo que voy… hay una forma de ayudar.
Si veis a un chico que no os gusta nada de nada, pero que sabéis de buen grado que necesita estar con una mujer, probad esto, poned vuestra mano (en caso de que sea un conocido claro está, los desconocidos lo van a tomar como algo raro) sobre la de el, y dejad que ese contacto humano permanezca unos minutos, veréis como a los cuatro o cinco minutos, se nota mas calmado. No es broma, intentadlo.
Por supuesto es solo un alivio minúsculo y muy a corto plazo, pero ayuda. También notareis otra cosa: a ese chico le vais a caer bien y va a pensar mejor de vosotras… efectos colaterales.
Hala, usad esa información como queráis. Y argumentos a favor, en contra, y con más conocimiento que yo quiero…
Besos a todos en plan fraternal, me voy a la cama y me acabo de dar cuenta, por patético que resulte, que os conozco mejor a algunos de vosotros, que a muchos de mis conocidos cotidianos.