Maravilloso hediondo, maravilloso.
Eso, es lo que yo llamo como rotores a traición, en lugar de a presión, porque todo apunta a que lo que vas a expulsar es un flagrante pedo castellano, con su empaque, su rugido, su pestuzo y su castidad anal, y lo que realmente sale es caquita, a saber:
1-líquida, y por ende transgresora de tejidos textiles, sea cual sea su naturaleza o facción.
2-papillera, que tiene unas connotaciones más espesas que la líquida pero algo más consistente y con un micraje superior, traspasa con facilidad tejidos más finos como el del gallumbo pero que si no se actúa una leve presión presión sobre la misma, no traspasa de por sí tejidos más allá del gallumbaire.
3-argamasienta o pastosa, esta es la más habitual, queda bien compactada en el calzón pero es susceptible de poseer aceites derivados de productos cárnicos ingeridos previamente y como tal, son altamente jugosas y es recomendable actuar como con las papilleras, aunque éstas si soportan algo más de presión leve.
4-standard tipo A, de dureza moderada, son directamente trozos de zurullo que salen y adoptan la forma de la raja del culo o dibujo del tejido que componga el gallumbo, con suerte y según nuestra dieta, podamos salvar el pantalón o el gallumbo, depende del cariño que le tengamos a este último.
5- standard tipo B, son directamente hectoplastos salidos del mordor que adoptan formas de hamburguesa y que con un simple tirón salen a modo de medallón tipo abrefacil con lo que podemos incluso continuar los quehaceres diarios sin mayor problema (suelen ser las más raras de ver)
A mi, la última, allá por 2009 trabajando yo para planeta, paseando lozana y alegremente con unos cuantos novelones en un brazo y trolley arrastrando por el entramado rectangular de la acera, con su ruido característico. Impecable de traje y corbata, me viene uno de estos a traición y el resultado fué un tipo3.
Al ir andando no se produjo la hecatombe al pantalón pinzado impecable de mi traje, pero bien es cierto que tuve que entrar al restaurante más cercano (iba por zona noble) y me soplaron 3,50 por una botella de agua la cual mientras se calentaba en su elegante copa de cristal medianamente caro, me dió el tiempo suficiente para entrar al retrete de tan magno lugar y hacer un lavado esfintal con notorias bolas a presión formadas por una ingente cantidad de papel higiénico que actuaba a modo de esponja con su correspondiente agua y jabón.
Los gallumbos fueron a parar a la más gigantesca bola de papel higiénico jamás antes vista por el ser humano, los enrollé ahí y los tiré a la papelera del bar cubriendolo con más papel para así por lo menos dejar menos rastro de la hecatombe fecal.
Salí del tigre, pagué con tarjeta firmé con mi montblanc meisterstück, y seguí currando.
Amazing fecal tales
Baneado
Leyenda
Freak
Veterano
Muerto por dentro+
Frikazo
