Yo tenía Barbies, Nancys, Ponys rosas con olor a fresita (Hola Stracci), Mariquitas Pérez y, por supuesto, sus correspondientes casitas y complementos. También tenía aquella Playstation primitiva con la cual me podía pasar horas y horas jugando como una boba.
Ah, y como dato anecdótico-erótico-festivo, decir que una vez me tragué una figurita de Polly Pocket sin querer. De ahí se deduce que actualmente esté como estoy.
Ah, y como dato anecdótico-erótico-festivo, decir que una vez me tragué una figurita de Polly Pocket sin querer. De ahí se deduce que actualmente esté como estoy.