Si aún no has deducido lo que opino de todo esto con mi último plus one, relaciónalo con ese otro en el que te daba opciones a) y b)
Carbura que, ya olvidando que le mandaste un mail en vez de hacer todo cara a cara, estamos hablando de su dirección de mail de trabajo; que todo lo que te ha respondido suena a pitorreo y vacilada; no hay ni un hola, ni un interés por cómo estás, ni despedida; an' all the lot.
Este fracaso con patas, celulítico, ajado y con un mocoso de regalo que tiene los putos huevazos de llamarse a si misma bancaria, se está dando humazos. Es lo que pasa cuando das importancia a gente que no se la merece, que se ponen tontos.
Yo pasaría a planear la venganza, para mí esto es una puta guerra, y ella ahora te va ganando de largo. Has de conseguir humillarla y hacerla sentir mal de alguna forma. Lo he hecho en situaciones parecidas, y créeme, es la única forma de zanjar esto a tu favor.
Todo muy tranquilamente, nada de perder la puta papelada, ni mostrar tu rencor evidente, ni malas caras, ni cipotes en vinagre. Normalidad.
Cuida tu físico, no te hinches a mortadela para quitar esa cara de patata, vete al gym (donde voy a ver pollas), saca un pecho hercúleo que se insinúe a través de tu camiseta de manga corta, coge color en tus vacaciones...
Yo aparecería por el banco dentro de un tiempo, pongamos 1 mes, a la vuelta de tus vacaciones. Que no te atienda ella, mejor otro empleado, y si os cruzáis un saludo agradable pero sin pasarse, efímero, como si fuese una semidesconocida.
Que se coma la cabeza ella.
Pero nunca te la vas a hacer, de lo que se trata es que pases de ser tú el rechazado, a ella la impresionada sin ninguna posibilidad, y, por tanto, la rechazada.