En principio iba a ser una reunión familiar intima, es decir, La Niña de Ojos Verdes que Flota en Mi Puerta, mi Pollito Jero, mi Ornitorrinco Paco y un servidor.
La mesa lucía colosal, con pan tostado untado en foie gras La Piara tapa negra, galletitas saladas, nubecitas de malvavisco (rosas y blancas), 25 gorriones fritos a los que había dado muerte un mes antes (ya olían un poco raro) y por supuesto todo ello regado con ingentes litros de Mirinda Naranja.
Todo comenzó bien la cena iba como la seda, pero cuando íbamos a meter mano a los gorriones apareció Benedicto XVI acompañado por la ex-primera ministra de Pakistán Benazhir Bhutto.
Joseph y Benazhir son buenos amigos y son siempre bienvenidos pero me resultó un poco violento que se presentaran sin avisar. Pero como donde comen 4 comen seis les dimos fonda.
La cena fue animada, Benedicto XVI consagró la mirinda y desde ese momento nos empezamos a chispar un poco. A Benazhir se le pusieron los pezones erectos, y Benedicto se empezó a poner nervioso ya no solo por los enhiestos pezones pakistanís, sino porque llegaba tarde a la misa del gallo, así que poniéndose la mitra a toda hostia salió como una exhalación pidiendo un taxi.
Tras cerrar la puerta anonadado por la espantada de Ratzinger, me encontre a Benazhir Bhutto abierta de patas y pidiéndome que la penetrase. Me quedé paralizado ante tamaño desatino en la noche del nacimiento del redentor y cuando estaba agobiado por como dar salida a esa situación sonó el timbre.
Le dije a la sucia Benazhir Bhutto que tapará su clitorís gigantesco y cuando se adecentó abrí la puerta. Era el alcalde de La Coruña, Paco Vázquez acompañado de Cristina Narbona, ministra de medio ambiente.
No les conocía personalmente pero Paco Vázquez me dijo que necesitaba un baño para que Cristina Narbona vomitara ya que habían estado de copas y necesitaba llamar a Braulio (vomitar).
Yo a nadie le niego el uso de mi water, así que la ministra paso rauda y veloz y todos oimos regocijados las arcadas de la distinguida dama. Mientras escuchaba deleitado las arcadas de la ministra de medio ambiente, comenzé a oir gemidos a mi espalda.
Benazhir Bhutto estaba sodomizando brutalmente a Paco Vázquez con un enorme consolador con correas.
Violento por la escena mande a la Niña que Flota en mi Puerta a su cuarto y le puse la Playstation a Jero y a Paco.
Cuando la ministra salió del baño miró indiferentemente el cuadro de sodomización que había en mi salón y en seguida me espetó:
"¿Tiene algo de comer? Es que después de vomitar me da hambre, pero no soy bulímica ¿eh?"
Gustosó le mostre los gorriones fritos y se lanzó a ellos como una hiena hambrienta, yo sólo pude comerme dos.
Benazhir y Paco terminaron su coito y se unieron a los postres donde nos comimos unos Frigo Dedos que guardaba como oro en paño en mi congelador desde 1983.
Tras una tertulia sobre el incesto en "Los Serrano" Paco y Cristina se despidieron, prometiendo volver. Benazhir me dijo si se podía quedar a dormir, pero se lo negué por Pakistaní y la envié con unos Kunderos que iban camino del centro.
Luego vino lo peor, recoger todo, pero con la satisfacción de haber pasado una Nochebuena dando hospitalidad a mis semejantes que es lo que el Niño Santo de Emaús esperaba de mi.
La Paz sea con todos Vds.
Buenas Noches