Duque de Alba
Aborto de Forero
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- 11 Sep 2008
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Lamento copypastear el texto que viene a continuación, pero creo que se trata de un tema muy interesante que, aun ligeramente alejado de lo estrictamente político, bien podría ser tratado y debatido como si lo fuese, pues se trata de un tema de actualidad.
Feliz y relajado. Fernando Sacristán sonreía después de batallar durante los últimos años. El lunes, acabó la «guerra». La Audiencia Provincial de Madrid condenaba al Colegio Suizo a pagar 30.000 euros por no evitar el acoso a su hijo Miguel, que durante años sufrió los desmanes de sus compañeros de clase. Incluso grabaron sus collejas, burlas y golpes con una cámara de vídeo, a pesar de las continuas peticiones del cansado muchacho. Ahora, el chaval y su familia recibieron como agua de mayo la decisión del tribunal, que revocaba una primera sentencia contraria del Juzgado de Primera Instancia de Alcobendas nº 1.
El padre de Miguel indicó que este fallo, al que se puede presentar un recurso de casación en el Tribunal Supremo, da luz y es «un ejemplo» para la lucha contra el bullying. «Ningún colegio dice que hay acoso escolar. Todo el mundo diluye sus responsabilidades», criticó Sacristán, quien consideró que todos los padres estarían encantados de contar «con las pruebas que yo tuve».
Recordó que su hijo fue acosado desde 2005. Sólo gracias a que se apoderó de una cámara de vídeo pudo demostrar una pequeña aprte de lo que había sufrido su hijo. Esa cinta demuestra la «premeditación» de los compañeros de Miguel. Asimismo, la sentencia recoge que la simple grabación presupone la difusión de las humillaciones a las que estaba sometido. «A mi hijo los Reyes le han traído justicia. Al Colegio Suizo un camión leno de carbón negro, negro», apuntó el padre.
Ante esta situación, el chaval se adaptaba como podía, según explicó la psicóloga Ana María Álvarez Sánchez: «Se centraba en el estudio y se relacionaba con niñas, algo muy normal en chavales que sufren acoso, o se encerraba en sí mismo». La doctora comentó que Miguel sufrió una alta dosis de estrés, que ha superado gracias al apoyo de su familia y a la edad que tenía entonces (entre 12 y 13 años). Esto le va a permitir superar este trance sin problemas y no tendrá secuelas, ya que si hubiera tenido dos o tres años más hubiera sido todo el proceso más complicado.
Ahora, Miguel está «feliz e integrado», disfrutando en su nuevo centro educativo con compañeros diferentes. En cambio, el Colegio Suizo mantiene en sus aulas a los agresores del joven. Incluso uno de ellos, que fue matriculado en Alemania, ha vuelto a España después de ser expulsado .
FUENTE: «A mi hijo los Reyes le han traído justicia»
El acoso escolar, un nuevo problema social menos inofensivo de lo que parece a simple vista, no tiene ninguna solución salvo cuando el daño ya está hecho y es demasiado tarde, aparentemente es así, a no ser, reflexioné tras conocer esta noticia, que se creasen leyes especiales para acabar con el Bullying. La idea en principio no es del todo descabellada, mas el problema es que, legalmente -que me corrijan si me equivoco- no se podría aplicar sobre los escolares en sí, sino tan sólo sobre los descuidados docentes, por lo que el control que se ejercería sobre la situación no sería tan eficaz como se desearía.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que el chaval que ha protagonizado la noticia tan sólo ha recibido una suma simbólica, un dinero que hipotéticamente podría ser invertido en terapeutas, pero que quizá nunca le haga olvidar la experiencia vivida. Las disculpas que pudiesen recibir su familia no servirán de nada si no se adoptan medidas de carácter preventivo, en lugar de tratar de reparar daños, a veces, irreparables.
Tema del hilo:
¿Qué medidas, legales o de otro tipo, deberían adoptarse contra el acoso escolar?
Feliz y relajado. Fernando Sacristán sonreía después de batallar durante los últimos años. El lunes, acabó la «guerra». La Audiencia Provincial de Madrid condenaba al Colegio Suizo a pagar 30.000 euros por no evitar el acoso a su hijo Miguel, que durante años sufrió los desmanes de sus compañeros de clase. Incluso grabaron sus collejas, burlas y golpes con una cámara de vídeo, a pesar de las continuas peticiones del cansado muchacho. Ahora, el chaval y su familia recibieron como agua de mayo la decisión del tribunal, que revocaba una primera sentencia contraria del Juzgado de Primera Instancia de Alcobendas nº 1.
El padre de Miguel indicó que este fallo, al que se puede presentar un recurso de casación en el Tribunal Supremo, da luz y es «un ejemplo» para la lucha contra el bullying. «Ningún colegio dice que hay acoso escolar. Todo el mundo diluye sus responsabilidades», criticó Sacristán, quien consideró que todos los padres estarían encantados de contar «con las pruebas que yo tuve».
Recordó que su hijo fue acosado desde 2005. Sólo gracias a que se apoderó de una cámara de vídeo pudo demostrar una pequeña aprte de lo que había sufrido su hijo. Esa cinta demuestra la «premeditación» de los compañeros de Miguel. Asimismo, la sentencia recoge que la simple grabación presupone la difusión de las humillaciones a las que estaba sometido. «A mi hijo los Reyes le han traído justicia. Al Colegio Suizo un camión leno de carbón negro, negro», apuntó el padre.
Ante esta situación, el chaval se adaptaba como podía, según explicó la psicóloga Ana María Álvarez Sánchez: «Se centraba en el estudio y se relacionaba con niñas, algo muy normal en chavales que sufren acoso, o se encerraba en sí mismo». La doctora comentó que Miguel sufrió una alta dosis de estrés, que ha superado gracias al apoyo de su familia y a la edad que tenía entonces (entre 12 y 13 años). Esto le va a permitir superar este trance sin problemas y no tendrá secuelas, ya que si hubiera tenido dos o tres años más hubiera sido todo el proceso más complicado.
Ahora, Miguel está «feliz e integrado», disfrutando en su nuevo centro educativo con compañeros diferentes. En cambio, el Colegio Suizo mantiene en sus aulas a los agresores del joven. Incluso uno de ellos, que fue matriculado en Alemania, ha vuelto a España después de ser expulsado .
FUENTE: «A mi hijo los Reyes le han traído justicia»
El acoso escolar, un nuevo problema social menos inofensivo de lo que parece a simple vista, no tiene ninguna solución salvo cuando el daño ya está hecho y es demasiado tarde, aparentemente es así, a no ser, reflexioné tras conocer esta noticia, que se creasen leyes especiales para acabar con el Bullying. La idea en principio no es del todo descabellada, mas el problema es que, legalmente -que me corrijan si me equivoco- no se podría aplicar sobre los escolares en sí, sino tan sólo sobre los descuidados docentes, por lo que el control que se ejercería sobre la situación no sería tan eficaz como se desearía.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que el chaval que ha protagonizado la noticia tan sólo ha recibido una suma simbólica, un dinero que hipotéticamente podría ser invertido en terapeutas, pero que quizá nunca le haga olvidar la experiencia vivida. Las disculpas que pudiesen recibir su familia no servirán de nada si no se adoptan medidas de carácter preventivo, en lugar de tratar de reparar daños, a veces, irreparables.
Tema del hilo:
¿Qué medidas, legales o de otro tipo, deberían adoptarse contra el acoso escolar?