A mí me parecéis unos moñas con el rollo ese de los sentimientos y el dormir acurrucaditos al lado de la mujer que amáis. Joder, que no tenemos ya veinte años, hostias. Idealizáis demasiado a las mujeres y os enamoráis del amor, o al menos fantaseáis con lo idílico que puede ser en vuestras cabezas. Yo estoy pasando por un divorcio ahora mismo y llevo sin meterla en caliente desde que la hija de la gran puta me denunció el 30 de junio, aunque ya tengo sentencia absolutoria (a Dios gracias, siempre alabado). Pero, os lo digo muy claramente, ahora mismo tengo un trauma y estoy a otras cosas muchísimo más importantes.
Al tema del hilo, como dice
@emperorx, muchos matrimonios pasan por esa casi última fase donde parecen compañeros de piso. Yo he usado también esa expresión y me ha chocado encontrarla aquí en el foro. Cuando ya las cosas empeoran, lo último que deseas es estar junto a esa persona y si te pilla en confinamiento es la muerte en vida. Aunque mantuve en dos meses relaciones, siempre fueron después o durante largísimas discusiones.
Todo esto te hace aborrecer el sexo, porque cada vez que se te viene la imagen de la tipa gritando, te se pone mal cuerpo. Supongo que el caso de Max es diferente, porque él echa de menos un estilo de vida, más que una serie de actos concretos. Pero los demás, no, no os hagáis una ilusión pensando en encontrar esa mujer que te acurruca y te dice cariño cada mañana cuando volvéis del trabajo con la comida puesta. No os hagáis ilusiones con encontrar eso ni en España, ni en el extranjero.
Sí se puede vivir sin sexo. No nos perdemos tanto. No es ese paisaje almibarado que están pintando algunos. El sexo es otra cosa. Es también petarle el orto o que te la coman en el baño de la discoteca. Es también el polvo en el coche a las seis de la mañana borracho. Es follarse a la gorda del Tinder con el sobaco apestoso y rancio. Es el coño que huele a lata de anchoas rancia. También es el de la niñata aquella que te desvirgó y por la que te morías literalmente. Pero, con las edades que gastamos aquí, no sé si compensa. No creo que irse de putas sea tampoco una gran idea, no creo que pagar cincuenta o cien euros, con los que puedo comprar otras cosas que sí me hacen feliz, sea lo mejor. No creo que perder el tiempo intentando tener otra pareja, sea tampoco lo mejor. Ellas cuando quieren se te acercan, no hay que hacer casi nada cuando quieren algo serio. Y se puede estar perfectamente tres o cuatro años, tranquilo y como en la novela aquella de Moravia, donde se sublimaba el protagonista por no tener sexo. Un poco eso.