snow
Freak
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Esta mañana me he levantado de un humor pésimo. Llevada por el he decidí ir a trabajar con una falda corta y una sonrisa larga
Sin embargo al entrar en la oficina me dí cuenta de que todo el mundo estaba distraido, mi jefe japonés habia cerrado la puerta de su despacho, (cosa nada habitual) y no daba señales de vida. Mis compañeros permanecian extrañamente silenciosos y yo creia notar cierta tensión en el ambiente.
Por un momento me sentí mal, no soy el ombligo del mundo asi que mi pequeña provocación habia pasado desapercibida, pero luego comencé a sentir la intriga del momento; ¿que es lo que ocurre y yo no sé?.
Así he estado durante un buen rato, una vez más improductiva y adivinando conspiraciones ocultas en mis compañeros, paranoicas y delirantes escenas de consignas que se entregan a todos excepto a mí con el fin de ocultarme algo vital para los seres humanos que viven y trabajan en esta empresa, y quien sabe si para el mundo en general.
Sin embargo hace diez minutos he salido a por unos folios y de nuevo he notado el ambiente habitual. Las sonrisas cómplices de algunas y las caras malhumoradas de otros... lo de siempre. Es una pena, prefería seguir imaginando tonterías que me situaban como protagonista de una gran trama para destruir el Universo nacida en una empresa publicitaria de la cual yo era dibujante y al fin, salvadora.
Es bonito dejarse llevar por los caminos inventados y saberse como una niña. Me gusta creer que el mundo gira en torno a mi aunque en el fondo sepa que la realidad es que el mundo gira sin sentido.
Sin embargo al entrar en la oficina me dí cuenta de que todo el mundo estaba distraido, mi jefe japonés habia cerrado la puerta de su despacho, (cosa nada habitual) y no daba señales de vida. Mis compañeros permanecian extrañamente silenciosos y yo creia notar cierta tensión en el ambiente.
Por un momento me sentí mal, no soy el ombligo del mundo asi que mi pequeña provocación habia pasado desapercibida, pero luego comencé a sentir la intriga del momento; ¿que es lo que ocurre y yo no sé?.
Así he estado durante un buen rato, una vez más improductiva y adivinando conspiraciones ocultas en mis compañeros, paranoicas y delirantes escenas de consignas que se entregan a todos excepto a mí con el fin de ocultarme algo vital para los seres humanos que viven y trabajan en esta empresa, y quien sabe si para el mundo en general.
Sin embargo hace diez minutos he salido a por unos folios y de nuevo he notado el ambiente habitual. Las sonrisas cómplices de algunas y las caras malhumoradas de otros... lo de siempre. Es una pena, prefería seguir imaginando tonterías que me situaban como protagonista de una gran trama para destruir el Universo nacida en una empresa publicitaria de la cual yo era dibujante y al fin, salvadora.
Es bonito dejarse llevar por los caminos inventados y saberse como una niña. Me gusta creer que el mundo gira en torno a mi aunque en el fondo sepa que la realidad es que el mundo gira sin sentido.