Situaciones vividas en salas de cine (de cine X también sirven, para los viciosillos)

Yo trabajé dos años y medio de acomodador siendo jóven. Tengo secuencias para contar que dan para hilo... ¿o las cuento aquí?
 
spizo rebuznó:
¿Por qué me insulta? Yo le animo polla en mano para que las cuente, sin trolear.
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Entonces me disculpo. Entendí lo contrario. Mea culpa.

Pues a ver. Comencé con 23 años a currar de acomodador en un multicines de Palma de Mallorca. En esas épocas iba mucha gente al cine. Todavía seguía la burbuja del ladrillo y aquello se llenaba los fines de semana de canis que curraban en la obra y no tenían problema en llevar a la jenny al cine, palomitas, coca cola y gastarse 40 euros para ver Fast and Furious, Torque, xXx o canimovies del estilo.

Había que currar mucho los fines de semana, limpiar la sala, acomodar a los susodichos canis más alguna que otra tribu etniana ya que relativamente cerca hay un conjunto de viviendas de protección oficial donde los metieron en la época de Franco en lugar de meterlos en barco de rejilla o en un horno crematorio.

Como buenos seres indeseables, lo típico era que fumasen en la sala. Tabaco y porro indistintamente. Y había que llamar la atención. El segundo encargado era un cagado y generalmente no quería historias por lo que no terminaba expulsando a nadie del cine a menos que fuera algo muy heavy. Recuerdo perfectamente cuando estrenaron la mierda de la película de Camarón. La sala llena de gitanos, humo, olor a mierda, llantos de los suyos, etc. Nadie se atrevía a entrar en la sala a llamar la atención a los que fumaban. Yo sugerí cerrar la sala y tirar una lata de Zyklon B dentro, pero poco captaron a qué me refería y el resto pensó que sería un chiste. Recuerdo una tarde de sábado, entrar a limpiar la sala luego de un pase lleno de gitanos, y encontrarme un truñaco en medio de la sala. Me negué en rotundo a limpiar eso, lo mismo que el resto de compañeros. Al final tuvo que limpiarlo el segundo encargado. Encontrarse botellas llenas de meo en cualquier sala, era un clásico. La gente es extremadamente guarra.

Era un trabajo de mierda. Haciendo más horas que un reloj, encerrado en un bunker sin ver el sol y siempre metido ahí los fines de semana. Por ende los que nos quedabamos a trabajar ahí no éramos gente normal. Quedabamos los frikis, los rechazados, y las tías más putas que hubiera. Lo cual daba para eróticos resultados que en este subforo no vienen mucho a cuento y sobre todo que nos pasabamos el rato haciendo el ganso, especialmente en los días de entre semana que apenas venía gente al cine y no había encargados. Más de un ex compañero seguro es forero en las sombras. Sin embargo diré que en aquellos días la nómina era buena, y los extras, matinales y nocturnas, se cobraban en negro.

El encargado general era un moro de mierda que se parecía a Sadam Hussein. Estaba ahí porque en teoría era un tío de confianza del dueño. Antes de eso se dedicaba a cuidarle los caballos. El moro no venía nunca y cuando venía era para dar por culo a cuanto empleado se le cruzase, sobre todo con las tías. Si veía una puta palomita suelta en el pasillo, llamaba a una chica para que viniera a barrerla: "Oiga tía, ven a barrer esto" esra lo que decía, y si veía a alguno haciendo el moñas su frase era "Oiga tío, esto no correcto" Si hay antiguos acomodadores pululando por aquí, seguro reconocerán esta última frase. A mí, por algún motivo que desconozco, el moro me tenía mucho respeto y me hablaba bien.

Como no era un trabajo de gente normal, cuando alguien se iba, o bien porque encontraba un curro mejor o bien porque no le renovaban, le hacíamos "la despedida" que no era más que una novatada pero al revés. El primero en recibir la despedida era un vividor estudiante de filosofía que movía los hilos para vivir de becas y subvenciones y se ponía a bailar en el pasillo, asi que ganó el nombre de Farruquito ya que por ese entonces había sido el mentado caso. Farruquito tuvo que ponerse en pelotas y taparse la polla y el culo con los elevadores para niños y correr un domingo por la tarde por el pasillo del cine con mucha gente entrando y saliendo de salas. Años después Farruquito, como buen vividor, se metió en Potemos y terminó de concejal pero tuvo que dimitir porque salieron a la luz ciertos tejemanejes que hizo durante su tiempo en la universidad.

Y luego sigo contando, no es que me haga rogar pero tengo que hacerme la cena.
 
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Viendo una de Torrente, 2 tíos se liaron a ostias porque uno de ellos hacía ruido. Tuvieron que parar la película y vinieron los de seguridad.

Ya eran talluditos, el LOL fue que debido al incidente nos devolvieron la pasta.
 
emperorx rebuznó:
Y nos comportabamos. Saltabamos como gilipollas cuando Rocky tumba al otro en el último combate cuando lo estan friendo a hostias. O cuando Karate Kid arreaba la patada aquella voladora cuando tenía ya la cara hecha un cuadro. Ahí todos aplaudiendo en plan friki como futuros foreros que eramos la mayoría. Pero eramos educados. Al menos la mayoría. Ibamos al cine a ver las películas, no a molestar.
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Te molesta que unos chavales hablen en el cine, pero cuando eras enano tú te comportabas y eras educado porque solamente te ponías a pegar saltos en mitad de la película o a aplaudir porque sí.
 
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naxo rebuznó:
Te molesta que unos chavales hablen en el cine, pero cuando eras enano tú te comportabas y eras educado porque solamente te ponías a pegar saltos en mitad de la película o a aplaudir porque sí.
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Otro que no se ha entendido una mierda.

Sí, era un macarra.
 
Diga día y hora y alguna película para ir a ver después de reventarle a hostias.

Eso sí, una en que vayan niñatos de HOY EN DÍA que no se comportan y son una panda de delincuentes juveniles. No como LOS DE MI ÉPOCA que eramos educados y como Satán manda.
 
Yo cuando era chinorri, fui a ver "GoldenEye" con un compañero del colegio, y el muy hioputa, en la escena que la Famke le hace llaves cachonda perdida, se casco una paja. Fue muy raro, era descendiente de Granadinos y veía esas cosas normal. Meses mas tarde fuimos a ver "Twister", y el muy perro se la volvió a pelar, encima era de estos que se corria y después no paraba de olerse la mano.

Decir que a partir de ese momento, la relación se deterioro, no me hacia puta gracia esa actitud, para mi que me mandaba mensajes, si salía una tía buena por la película y empezaba su ritual, luego te decía que eras maricon por no hacer lo mismo.

Me juego los cojones a que ahora tiene hijos y es supercuñado, y por los fines de semana se come alguna que otra polla.

Puto cine, lo maldigo.
 
DarthMauricius rebuznó:
Entonces me disculpo. Entendí lo contrario. Mea culpa.

Pues a ver. Comencé con 23 años a currar de acomodador en un multicines de Palma de Mallorca. En esas épocas iba mucha gente al cine. Todavía seguía la burbuja del ladrillo y aquello se llenaba los fines de semana de canis que curraban en la obra y no tenían problema en llevar a la jenny al cine, palomitas, coca cola y gastarse 40 euros para ver Fast and Furious, Torque, xXx o canimovies del estilo.

Había que currar mucho los fines de semana, limpiar la sala, acomodar a los susodichos canis más alguna que otra tribu etniana ya que relativamente cerca hay un conjunto de viviendas de protección oficial donde los metieron en la época de Franco en lugar de meterlos en barco de rejilla o en un horno crematorio.

Como buenos seres indeseables, lo típico era que fumasen en la sala. Tabaco y porro indistintamente. Y había que llamar la atención. El segundo encargado era un cagado y generalmente no quería historias por lo que no terminaba expulsando a nadie del cine a menos que fuera algo muy heavy. Recuerdo perfectamente cuando estrenaron la mierda de la película de Camarón. La sala llena de gitanos, humo, olor a mierda, llantos de los suyos, etc. Nadie se atrevía a entrar en la sala a llamar la atención a los que fumaban. Yo sugerí cerrar la sala y tirar una lata de Zyklon B dentro, pero poco captaron a qué me refería y el resto pensó que sería un chiste. Recuerdo una tarde de sábado, entrar a limpiar la sala luego de un pase lleno de gitanos, y encontrarme un truñaco en medio de la sala. Me negué en rotundo a limpiar eso, lo mismo que el resto de compañeros. Al final tuvo que limpiarlo el segundo encargado. Encontrarse botellas llenas de meo en cualquier sala, era un clásico. La gente es extremadamente guarra.

Era un trabajo de mierda. Haciendo más horas que un reloj, encerrado en un bunker sin ver el sol y siempre metido ahí los fines de semana. Por ende los que nos quedabamos a trabajar ahí no éramos gente normal. Quedabamos los frikis, los rechazados, y las tías más putas que hubiera. Lo cual daba para eróticos resultados que en este subforo no vienen mucho a cuento y sobre todo que nos pasabamos el rato haciendo el ganso, especialmente en los días de entre semana que apenas venía gente al cine y no había encargados. Más de un ex compañero seguro es forero en las sombras. Sin embargo diré que en aquellos días la nómina era buena, y los extras, matinales y nocturnas, se cobraban en negro.

El encargado general era un moro de mierda que se parecía a Sadam Hussein. Estaba ahí porque en teoría era un tío de confianza del dueño. Antes de eso se dedicaba a cuidarle los caballos. El moro no venía nunca y cuando venía era para dar por culo a cuanto empleado se le cruzase, sobre todo con las tías. Si veía una puta palomita suelta en el pasillo, llamaba a una chica para que viniera a barrerla: "Oiga tía, ven a barrer esto" esra lo que decía, y si veía a alguno haciendo el moñas su frase era "Oiga tío, esto no correcto" Si hay antiguos acomodadores pululando por aquí, seguro reconocerán esta última frase. A mí, por algún motivo que desconozco, el moro me tenía mucho respeto y me hablaba bien.

Como no era un trabajo de gente normal, cuando alguien se iba, o bien porque encontraba un curro mejor o bien porque no le renovaban, le hacíamos "la despedida" que no era más que una novatada pero al revés. El primero en recibir la despedida era un vividor estudiante de filosofía que movía los hilos para vivir de becas y subvenciones y se ponía a bailar en el pasillo, asi que ganó el nombre de Farruquito ya que por ese entonces había sido el mentado caso. Farruquito tuvo que ponerse en pelotas y taparse la polla y el culo con los elevadores para niños y correr un domingo por la tarde por el pasillo del cine con mucha gente entrando y saliendo de salas. Años después Farruquito, como buen vividor, se metió en Potemos y terminó de concejal pero tuvo que dimitir porque salieron a la luz ciertos tejemanejes que hizo durante su tiempo en la universidad.

Y luego sigo contando, no es que me haga rogar pero tengo que hacerme la cena.
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Trabajabas en Porto Pi? Es el unico cine asi grande que recuerdo antes de que abrieran Festival Park.
 
lagmanda rebuznó:
Ni idea pues
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¿Ni idea de qué? ¿De si me habías visto ahí? jejeje

Siguiendo con recuerdos de las idioteces que solíamos hacer, una tarde que me encuentro en la puerta, aburrido como una puta ostra rompiendo las entradas. Abro uno de los cajones y veo unas gafas oscuras horribles que me hacen recordar a las que usaba Ray Charles. Por supuesto me las puse y estuve toda la tarde haciendo de ciego, tocaba las entradas que tenía que romper, como si tuvieran braile y les indicaba donde estaba la sala. Toda la gente flipando y mirando la entrada a ver si de verdad habían puntitos en relieve. Lo que me reí no tiene nombre.

Otra vez un trastornado, que tenía mucha flexibilidad, giró el brazo para esconderselo en la espalda y se arremangó la camisa. Llevabamos en invierno una camisa y un chaleco horrible. Dio el cante como que era manco y de hecho a un par les dijo que estaba recién llegado de Irak y que había perdido un brazo. También otra secuencia que dio para Loles.
 
DarthMauricius rebuznó:
¿Ni idea de qué? ¿De si me habías visto ahí? jejeje

Siguiendo con recuerdos de las idioteces que solíamos hacer, una tarde que me encuentro en la puerta, aburrido como una puta ostra rompiendo las entradas. Abro uno de los cajones y veo unas gafas oscuras horribles que me hacen recordar a las que usaba Ray Charles. Por supuesto me las puse y estuve toda la tarde haciendo de ciego, tocaba las entradas que tenía que romper, como si tuvieran braile y les indicaba donde estaba la sala. Toda la gente flipando y mirando la entrada a ver si de verdad habían puntitos en relieve. Lo que me reí no tiene nombre.

Otra vez un trastornado, que tenía mucha flexibilidad, giró el brazo para esconderselo en la espalda y se arremangó la camisa. Llevabamos en invierno una camisa y un chaleco horrible. Dio el cante como que era manco y de hecho a un par les dijo que estaba recién llegado de Irak y que había perdido un brazo. También otra secuencia que dio para Loles.
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No coño, ni idea de que cines son.
 
Doctor Senbei rebuznó:
Una vez le saqué las tetas a una chica con la que estaba, momentos antes de que hubiera un system failure y se encendieran las luces de la sala tras detener la proyección.

En otra ocasión sufrí un intento de agresión por parte de una venezolana por llamar subnormal a su hijo hiperactivo.

Y anteayer obligué una imbécil a apagar el móvil con el que chateaba en la fila de enfrente porque no me dejaba disfrutar de megalodón en condiciones.

Apasionante.
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Yo fui una vez a una Sala x, me saque la verga y casi me violan ,solo.me entraban tios de cierta edad y abuelos, incluso un abuelo en la oscuridad tenebrosa del lado oscuro me dio un papel con su telefono,y me decia guapo guapo quieres ser mi novio? Onde estaban las tias,habia tias?,coño es que jode que para una vez que tuve exito me tiraron los tejos los de la residencia de al lado.
 
Vulcanox rebuznó:
Yo fui una vez a una Sala x, me saque la verga y casi me violan ,solo.me entraban tios de cierta edad y abuelos, incluso un abuelo en la oscuridad tenebrosa del lado oscuro me dio un papel con su telefono,y me decia guapo guapo quieres ser mi novio? Onde estaban las tias,habia tias?,coño es que jode que para una vez que tuve exito me tiraron los tejos los de la residencia de al lado.
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Aclaro para los degenerados y los putos pesados que se trataba una sala normal de La Maquinista. Fuimos a ver una de Nicolas Cage.
 
Eso os pasa por ir a ver películas made un holliwood, yo solo voy a películas de directores suecos e iraneses, los intelectuales nos comportamos educadamente
 
Bueno yo ahora, me comporto como una persona normal en el cine, pero hace años cuando era más chaval, me gustaba sentarme atrás del todo, y tirarme un pedo con todas las ganas, o lanzar un sonoro eructo, normalmente nadie decía nada, pero en una ocasión me tire un eructo de 3 pares de cojones, y un señor de nos 50 años, que estaba varias filas más alante, pero a tomar por el culo estaba el tío, que había gente más cerca y no dijeron ni mu, pues se levante y dice ¡ CERDO !, me dió tanta verguenza, que poco a poco me fui moviendo de sitio, y me largue antes de que acabara la peli.
 
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