Lo peor no es haber perdido sin haber hecho un gol, no es la imagen triste que da Suárez en cada partido, no es ver que cada año se forma un peor equipo a expensas de que Messi resuelva todos los partidos importantes con cuatro goles, ni siquiera es saber que los 220 millones de Neymar van a ser dilapidados por la peor directiva de la historia del club. Lo peor es ver como el Madrid sin su estrella y sin su mejor jugador, sin apretar demasiado, se levanta al Barcelona como si fuera un Valencia de la vida.
El Barça tiene que mejorar muchísimo si quiere sacar algo este año.
Por otra parte, no entiendo muy bien el partido de jugadores como Deulofeu o Aleix Vidal, uno ha sido cedido a tres equipos antes de volver al Barcelona y el otro no contaba para el anterior entrenador. Llega uno nuevo y cuenta con ambos en el primer partido oficial de la temporada nada más y nada menos que contra el Madrid: Uno juega de extremo al lado de Messi y no fue capaz de crear una micra de peligro, ni tan siquiera de regatear. El otro es lateral, la temporada pasada perdió el puesto contra un tío que no había jugado en esa posición en su puta vida y en el primer partido en el que le toca demostrar, demuestra que como defensa es un puto 0 y arrastra al hoyo a todo el equipo, que por otra parte, ya estaba jugando de lástima.
Además, el mediocampo del Barcelona se nota falto de físico, lo que corrió Rakitic no lo corren ninguno de los otros dos, jugadores excelsos en su mejor momento pero a los que se les nota demasiado el bajón, Iniesta por la edad, Busquets porque hace tiempo que el padre no le salva de una plancha hirviendo. Desde que el fútbol lo inventó Guardiola en el 2009, ha evolucionado mucho y ahora que el Barça no tiene a los tres grandes del medio en su mejor momento (de hecho, el más grande está en Qatar) es el momento de plantearse cosas como la necesidad de fichar un negro para el medio. Da igual cómo de bueno sea, es importante que sea negro y que haga el despliegue que se le presupone.
P.D: Asensio es un puto crack, enormes los ojeadores y directiva culé, dejándose pasar la polla de Florentino por la cara otra vez.