Rafael Medina rebuznó:A ver, ella con él, o ella sola, pidió unos préstamos a saber para qué y acabaron con la nómina embargada y las dos casas. La mujer participó en ese préstamo, está claro. No fue cosa del pintor. Ella se llevo dinero que tenían ahorrado, no sé si del banco o de dónde. Dinero ahorrado de los dos, no suyo.
No sé para qué quería el préstamo. A saber de cuánto era el préstamo para quedar sin dos casas y sin la nómina.
Hombre, ella sola no creo que lo haya pedido ya que puso como aval cosas que no eran suyas, la casa y la nómina de su marido, así que él habrá dado su consentimiento.
Cómo bien dices el préstamo debió ser bien jugoso, y normalmente cuanto más caro es algo más probable es que no lo necesites para nada. Obviamente da mucha pena ver llorar a un viejo, lo que no quita que esto le haya pasado seguramente por avaricia.
No justifico el comportamiento de ella, que es de zorra traidora, eso no lo vamos a negar, pero no conocemos todos sus motivos. Y cuando el barco se hunde...