¿Vale más la vida de una mujer cualquiera que la tuya?

Supongo que todos habréis visto las fotos y videos del accidente, con los vecinos de barrio de Angrois sacando cadáveres y heridos hechos puré después de deslizarse por un terraplén hacia los restos de un tren que tal vez podía explotar en cualquier momento, con la posibilidad de ser arrollados por un nuevo convoy inadvertido de la catástofe o de ser reventados por una bomba tardía de lo que podría perfectamente ser tomado por un posible atentado terrorista...

¿A cuantas mujeres podéis distinguir? No hablo de la llegada posterior de policías y bomberas que hacían su trabajo, sólo de los vecinos que tuviero el primer impulso heroico de jugarse la vida.

Es curioso que ni siquiera los políticos de izquierdas, esclavos de lo políticamente correcto, se atrevan a hablar de vecinos y vecinas, héroes y heroínas. Solo usan el masculino genérico, pues de lo contrario podrían poner en evidencia el hecho casi escandaloso que no nombra nadie.

Hasta un chaval de 15 años ha tenido más cojones que cualquiera de ellas...
 
AhoraEsEM rebuznó:
Plantearos algo mucho más sencillo:

Aparte de vuestra propia madre, ¿qué mujer que conozcáis o hayáis conocido daría la vida por vosotros o se arriesgaría a darla?

Me parece que la reflexión sobre esa respuesta os va a deprimir un poco...


Mi agüela, que cada vez que me ve me dice que a mis 35 añazos estoy más alto, más wapo y más buen mozo. Si eso no es amor incondicional que venga Dios y lo vea..............

Las demás t_d_s p_t_s...........
 
stavroguin 11 rebuznó:
Supongo que todos habréis visto las fotos y videos del accidente, con los vecinos de barrio de Angrois sacando cadáveres y heridos hechos puré después de deslizarse por un terraplén hacia los restos de un tren que tal vez podía explotar en cualquier momento, con la posibilidad de ser arrollados por un nuevo convoy inadvertido de la catástofe o de ser reventados por una bomba tardía de lo que podría perfectamente ser tomado por un posible atentado terrorista...

¿A cuantas mujeres podéis distinguir? No hablo de la llegada posterior de policías y bomberas que hacían su trabajo, sólo de los vecinos que tuviero el primer impulso heroico de jugarse la vida.

Es curioso que ni siquiera los políticos de izquierdas, esclavos de lo políticamente correcto, se atrevan a hablar de vecinos y vecinas, héroes y heroínas. Solo usan el masculino genérico, pues de lo contrario podrían poner en evidencia el hecho casi escandaloso que no nombra nadie.

Hasta un chaval de 15 años ha tenido más cojones que cualquiera de ellas...


Pues había, y no pocas. Con unas cuantas hablé yo horas después de lo ocurrido. Y no solo estuvieron sacando restos del tren, sino que después estuvieron consolando a las familias y acompañándolas. En todos los dispositivos de voluntariado había mujeres. Una chica de 17 años me llamó la atención especialmente, puesto que no solo estuvo sacando cadaveres y ayudando a sacarlos del tren, sino que también estuvo con los familiares acompañándolos a dar su ultimo adiós a los fallecidos en una guardia de casi 48 horas hasta que por fin les relevaron. Y con una fuerza y un aplomo que ya quisieran muchos de por aquí.
 
Comparar la fuerza física entre un hombre y una mujer es tan absurdo como patético.
 
Si las mujeres no lo confundiesen, encanallasen y embarrasen todo con falsos argumentos no serían mujeres, sin duda.

Nadie ha hablado de la fuerza física ni de la capacidad de solidaridad, sino de arriesgar tu vida por un extraño o grupo de extraños. No he visto ni una sola imagen, ni un solo testimonio femenino entre las personas que se jugaron la vida en los primeros momentos ( entre ellos un adolescente varón), cuando bajar a las vías podía suponer una muerte terrible por una explosión o un arrollamiento. Horas después por supuesto que uno podría encontrarse mujeres que aportaron mantas o echaron una mano a los heridos, pero no al principio, cuando la solidaridad podía costar la vida.

Si quieren desmontar mis penosos prejuicios misóginos, arrollenme con testimonios de las numerosas heroínas de Angrois que bajaron a las vías nada más descarrilar el tren. Yo solo he oído a una que contaba que un vagón se le echó encima cuando tendía la ropa.
 
Arriesgar mi vida cuándo mis condiciones son ínfimamente carentes del atributo propio de mover un cuerpo (peso muerto en términos mancuerneros) es como hacer paracaidismo sin paracaidas.
 
dolby montero rebuznó:
Arriesgar mi vida cuándo mis condiciones son ínfimamente carentes del atributo propio de mover un cuerpo (peso muerto en términos mancuerneros) es como hacer paracaidismo sin paracaidas.

La intención es lo que cuenta, pero si no la tienes no hay de dónde rascar.
 
dolby montero rebuznó:
Comparar la fuerza física entre un hombre y una mujer es tan absurdo como patético.


dolby montero rebuznó:
Arriesgar mi vida cuándo mis condiciones son ínfimamente carentes del atributo propio de mover un cuerpo (peso muerto en términos mancuerneros) es como hacer paracaidismo sin paracaidas.

Ahá, muy bien. No sé, por ejemplo puede ayudar a las personas que hayan sacado de los vagones en unas condiciones lamentables. O puede echar una mano a los que están sacando víctimas, porque aunque al parecer Ud. no puede levantar una mosca, toda ayuda es buena y seguro que el hombre que está haciendo esa tarea la hará más fácilmente si Ud. ayuda. O, por increible que le parezca, a lo mejor en ese tren iban bebes o niños de corta edad de menos de 15 kilos, a los cuales sí que Ud. podrá mover. Digo yo.

No he leído disparate tan aberrante para escurrir el bulto en mi vida. Qué asco me acaba de dar, señorita.
 
dolby montero rebuznó:
Arriesgar mi vida cuándo mis condiciones son ínfimamente carentes del atributo propio de mover un cuerpo (peso muerto en términos mancuerneros) es como hacer paracaidismo sin paracaidas.

Y esta es la razón por la que deberías optimizar tu culo gordo para hacer peso muerto, pero supongo que este poderoso argumento os sonará como un lejano sonido de campanas traído en volandas por el viento.
 
Black Adder rebuznó:
Y esta es la razón por la que deberías optimizar tu culo gordo para hacer peso muerto, pero supongo que este poderoso argumento os sonará como un lejano sonido de campanas traído en volandas por el viento.

¿Acaso tú habrías bajado a la vía a rescatar gallegos? No me jodas, en todo caso, a doblar la chapa de los vagones para que costase más sacarlos.
 
Desde luego que no haría nada. Sólo lo dice para joderme. Debe de tener un pacto con el diablo o algo así.
 
stavroguin 11 rebuznó:
Si las mujeres no lo confundiesen, encanallasen y embarrasen todo con falsos argumentos no serían mujeres, sin duda.

Nadie ha hablado de la fuerza física ni de la capacidad de solidaridad, sino de arriesgar tu vida por un extraño o grupo de extraños. No he visto ni una sola imagen, ni un solo testimonio femenino entre las personas que se jugaron la vida en los primeros momentos ( entre ellos un adolescente varón), cuando bajar a las vías podía suponer una muerte terrible por una explosión o un arrollamiento. Horas después por supuesto que uno podría encontrarse mujeres que aportaron mantas o echaron una mano a los heridos, pero no al principio, cuando la solidaridad podía costar la vida.

Si quieren desmontar mis penosos prejuicios misóginos, arrollenme con testimonios de las numerosas heroínas de Angrois que bajaron a las vías nada más descarrilar el tren. Yo solo he oído a una que contaba que un vagón se le echó encima cuando tendía la ropa.

Da lo mismo, Sr. Stravroguin, enseguida saldrá alguna diciendo que en no se qué edición de algún año de un periódico que se edita en Wichita se ve cómo hay una mujer que se arroja sin conciencia del riesgo a salvar a alguien y de inmediato "todas podemos" y "todas somos héroas" y tal y pascual.

No me considero ni por asomo un héroe, y más cuando (y ahí puedo darle un atisbo de razón a la que aduce razones de vigor físico) los años lo hacen a uno menos ágil, fuerte y con capacidad de reacción rápida y eficaz. Sin embargo un par de veces en mi vida me he visto en la situación de tener que decidir si auxiliar sopena de mayor o menor riesgo de mi vida. La una fue en mar relativamente calmado donde una persona tuvo dificultades y un amigo y yo nos lanzamos sin pensarlo un momento a sacar a aquel bañista que sufrió un calambre, pánico, fatiga o vaya uno a saber qué; tal vez si el mar hubiese estado bravío me hubiese quedado clavado, no lo sé; acaso si llego a estar solo también podría haber dudado o quedarme acobardado en la orilla, quién sabe; puede que de haber sido peor nadador de lo que soy o era no hubiese tenido la misma decisión. La otra fue en la carretera, cuando varios conductores asistimos atónitos a cómo un coche se salía sin ton ni son de la vía, daba varias vueltas de campana y quedaba panza arriba y comenzaba a humear y a asomar alguna llama; tres o cuatro conductores paramos, salimos a la carrera terraplén abajo sin pensarlo y los que lo teníamos llevamos el extintor a mano; al final y por suerte sólo iba el conductor y estaba magullado, atontado y poco más y el incendio quedó en conato porque lo cortamos a tiempo pero al principio uno no podía estar muy seguro de que las cosas fuesen a resultar así.

En ambas ocasiones sea por instinto, programación genética o cultural o vaya uno a saber por qué motivo el proceso de valoración y acción fue rápido, uno piensa pero al mismo tiempo no lo piensa tanto. Sin embargo sí que les puedo asegurar que ni en una ni en otra situación vi a ninguna mujer mover el puto culo y supongo (insisto, supongo porque no estaba para fijarme en esas cosas) que su mayor aporte no pasase de proferir chillidos histéricos y, por supuesto, de reclamar que alguien (un hombre, claro está) haga algo.
 
En estos casos que mencionáis la influencia social es más fuerte de lo que pensamos, la adjudicación de roles y demás. Tú mismo aseguras que no lo pensaste demasiado, y es cierto, sólo pensabas que era lo que debías hacer. Que los hombres vivamos menos años que las mujeres no tiene mayor explicación que este tipo de comportamientos, para nada es un asunto biológico. Los hombres somos más temerarios y arriesgamos más nuestra vida en general, y eso está vinculado al patrón masculino en el que nos hemos/han criado.

Y sabiendo eso hay que estar orgullosos de que así sea.
 
Ellas son el refuerzo generalizado para todo lo que hacemos. Ese es el problema. El dinero y los coños. Curramos como esclavos 8 horas al día y arriesgamos la vida y lo que haga falta para que nos admiren. Putas!
 
dolby montero rebuznó:
Arriesgar mi vida cuándo mis condiciones son ínfimamente carentes del atributo propio de mover un cuerpo (peso muerto en términos mancuerneros) es como hacer paracaidismo sin paracaidas.

Un hombre físicamente fuerte también hace paracaidismo sin para caídas cuando se arriesga a una muerte violenta. Las posibilidades de palmarla son independientes de la fuerza física. En las vías estarían tan indefensos como usted, cacho puta.

saca-al-tarado rebuznó:
Da lo mismo, Sr. Stravroguin, enseguida saldrá alguna diciendo que en no se qué edición de algún año de un periódico que se edita en Wichita se ve cómo hay una mujer que se arroja sin conciencia del riesgo a salvar a alguien y de inmediato "todas podemos" y "todas somos héroas" y tal y pascual.

No me considero ni por asomo un héroe, y más cuando (y ahí puedo darle un atisbo de razón a la que aduce razones de vigor físico) los años lo hacen a uno menos ágil, fuerte y con capacidad de reacción rápida y eficaz. Sin embargo un par de veces en mi vida me he visto en la situación de tener que decidir si auxiliar sopena de mayor o menor riesgo de mi vida. La una fue en mar relativamente calmado donde una persona tuvo dificultades y un amigo y yo nos lanzamos sin pensarlo un momento a sacar a aquel bañista que sufrió un calambre, pánico, fatiga o vaya uno a saber qué; tal vez si el mar hubiese estado bravío me hubiese quedado clavado, no lo sé; acaso si llego a estar solo también podría haber dudado o quedarme acobardado en la orilla, quién sabe; puede que de haber sido peor nadador de lo que soy o era no hubiese tenido la misma decisión. La otra fue en la carretera, cuando varios conductores asistimos atónitos a cómo un coche se salía sin ton ni son de la vía, daba varias vueltas de campana y quedaba panza arriba y comenzaba a humear y a asomar alguna llama; tres o cuatro conductores paramos, salimos a la carrera terraplén abajo sin pensarlo y los que lo teníamos llevamos el extintor a mano; al final y por suerte sólo iba el conductor y estaba magullado, atontado y poco más y el incendio quedó en conato porque lo cortamos a tiempo pero al principio uno no podía estar muy seguro de que las cosas fuesen a resultar así.

En ambas ocasiones sea por instinto, programación genética o cultural o vaya uno a saber por qué motivo el proceso de valoración y acción fue rápido, uno piensa pero al mismo tiempo no lo piensa tanto. Sin embargo sí que les puedo asegurar que ni en una ni en otra situación vi a ninguna mujer mover el puto culo y supongo (insisto, supongo porque no estaba para fijarme en esas cosas) que su mayor aporte no pasase de proferir chillidos histéricos y, por supuesto, de reclamar que alguien (un hombre, claro está) haga algo.

Yo tampoco soy un héroe, estimado conforero. En alguna ocasión he echado una mano en situaciones difíciles, otras veces me he mantenido en un discreto segundo plano.

Haciendo memoria de todas las noticias que recuerdo de muertes heroicas (rescates en edificios en llamas, ahogamientos playeros, los muertos del 11-M que acudieron a ayudar tras la primera bomba y murieron por la segunda...) no recuerdo un solo caso de una mujer sacrificando su vida por un extraño. Ni uno. Pero es que ni uno, oiga. A ver si las zorritas del foro hacen un pequeño esfuerzo y tiran de hemeroteca, por si aparecen esas héroas de Wichita.
 
pastanaga rebuznó:
¿Acaso tú habrías bajado a la vía a rescatar gallegos? No me jodas, en todo caso, a doblar la chapa de los vagones para que costase más sacarlos.

Una cosa no quita la otra.


stavroguin 11 rebuznó:
Haciendo memoria de todas las noticias que recuerdo de muertes heroicas (rescates en edificios en llamas, ahogamientos playeros, los muertos del 11-M que acudieron a ayudar tras la primera bomba y murieron por la segunda...) no recuerdo un solo caso de una mujer sacrificando su vida por un extraño. Ni uno. Pero es que ni uno, oiga. A ver si las zorritas del foro hacen un pequeño esfuerzo y tiran de hemeroteca, por si aparecen esas héroas de Wichita.

Bueno... ellas también sufren. Eso lo iguala todo.


ruben_clv rebuznó:
En estos casos que mencionáis la influencia social es más fuerte de lo que pensamos, la adjudicación de roles y demás. Tú mismo aseguras que no lo pensaste demasiado, y es cierto, sólo pensabas que era lo que debías hacer. Que los hombres vivamos menos años que las mujeres no tiene mayor explicación que este tipo de comportamientos, para nada es un asunto biológico. Los hombres somos más temerarios y arriesgamos más nuestra vida en general, y eso está vinculado al patrón masculino en el que nos hemos/han criado.

Y sabiendo eso hay que estar orgullosos de que así sea.

Esto es como cuando dices que echarle sobras a un arroz de ayer quemado es hacer la mejor paella de la península. Dista mucho de ser cierto, lo que hacéis vosotros es una mala imitación de la paella original de Palamós, y la adjudicación de roles y demás soplapolladas tabularásicas que tanto les gustan a los estudiantes de letras para justificar su nulo conocimiento en biología y genética sólo tiene importancia en los comportamientos más externos, superficiales y ordinarios.

Cuando estamos en peligro los vasos sanguíneos se dilatan, empieza la secreción de adrenalina al torrente sanguíneo, el cortisol se dispara y el cerebro reptiliano toma el control. En estas situaciones poco importa si tus padres te hacían ir a misa o si te criaste en un kibbutz obligado a jugar con barbies, el monstruo sale a la superfície y no es hasta pasado un rato que vuelve a sumergirse y puedes racionalizarlo todo.

Si los hombres vivimos menos que ellas ha sido, a lo largo de la historia, por nuestra caprichosa manía machista opresora de escojer para nosotros mismos los trabajos más ingratos y con más riesgo para la vida. Pero dado que nunca jamás se le ocurrió a ninguna hacer otra cosa que no fuera quejarse, por ejemplo tomando la iniciativa y tirando del arado en enero o enrolándose a levas, supongo que su puerilidad les induce a pensar que rezando muy fuerte a Arthemis estas tareas se acometerían solas.
 
dolby montero rebuznó:
Comparar la fuerza física entre un hombre y una mujer es tan absurdo como patético.


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Digo yo que habrá de todo...




Pues no, ya la ley se encarga de decir que no, que la generalización no es una generalización, que la generalización engloba al 100 % de la población.


Y como eso es así, pues para qué vamos a discutir.



Yo es que en caso de un accidente como ese, me limitaría a disfrutar del espectáculo, así que tampoco soy quien para criticar nada a las mujeres.

Las mujeres me han enseñado muchas formas de pasar por la vida disfrutando de ciertas ventajas y aprovechándome de los necios que pululan por el mundo. Gracias a todas ellas.
 
ruben_clv rebuznó:
En estos casos que mencionáis la influencia social es más fuerte de lo que pensamos, la adjudicación de roles y demás.

Ni de coña.

No voy a decir que nuestro entorno no influye en absoluto en este caso que nos ocupa, pero si lo hace, lo hace de forma mínima si lo comparamos con el condicionante biológico.

El siguiente vídeo es una especie de documental que trata de dilucidar si las mujeres y los hombres nos diferenciamos mentalmente, y en caso de ser así, si es algo innato.

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TL-DW se muestran estudios que demuestran la diferencia innata en los cerebros de niños y niñas, por ejemplo hay uno en el que niños con un día de vida mostraban predilección por juguetes mecánicos y las niñas por muñecas y cosas con cara y tal. Con un día de vida no ha habido tiempo para que ningún tipo de influencia social haya calado en nosotros.

Para mí, tener que hacer tropecientos estudios para llegar a la conclusión de que somos diferentes no sólo en lo físico sino también en lo mental de forma innata es absurdo, es algo que cualquiera con dos dedos de frente puede ver, pero bueno. Si no, a ver de qué cojones iban las mujeres a tener que montar sus propias competiciones de ajedrez porque no son capaces de estar a años luz de los mejores hombres, por ejemplo.



Los hombres somos más temerarios y arriesgamos más nuestra vida en general, y eso está vinculado al patrón masculino en el que nos hemos/han criado.

:lol:

Esto es propio de gente cuyo único conocimiento "científico" viene de poco más que de la tele.

Los mancuerneros serios llevamos una gran ventaja a la mayoría de la gente en este aspecto porque al querer medrar en lo nuestro nos encontramos con que hay que tener ciertos conocimientos básicos sobre ciertas hormonas y sus efectos, como la testosterona. Los que se inyectan testosterona (ciclaos para vosotros) para ganar músculo cuentan cómo les cambia el carácter, cómo son más agresivos (roid rage), están salidos todo el tiempo, se meten en más líos y corren más riesgos, se levantan cada mañana con más ganas de comerse el mundo y muchos se sienten como si fueran DIOS al caminar por la calle, puesto que la testosterona es la hormona de la dominación y el que más testosterona tiene es el que tiende a dominar, a llevar la voz cantante cuando dos personas están hablando, por ejemplo. Estos cambios no "están vinculados al patrón masculino en el que nos hemos/han criado", están vinculados a que sudas testosterona por cada poro. Sugerir lo contrario es absurdo, porque "el patrón masculino en el que nos hemos/han criado" no cambia en el momento en el que te inyectas testosterona.

Del mismo modo, hombres que por el motivo que sea (un accidente, un estilo de vida de mierda, etc) se encuentran con una testosterona más baja de lo normal cuentan que cuando algo malo les ocurre se ponen tristes, en lugar de cabrearse sin más como les pasaba antes. Se sienten con menos ganas de hacer cualquier cosa, menos iniciativa, toman menos riesgos y en general tienen menos cojones.

Los hombres tenemos así como ¿10 veces? (no lo recuerdo bien) más testosterona que las mujeres de forma natural. Así que eso de que corremos más riesgos porque así nos lo han enseñado es una gilipollez como la copa de un pino, propia de progres e ignorantes en general que exponen su retraso sin pudor alguno.




Así que sí, podéis decir sin miedo que las mujeres se comportan como lo hacen en situaciones como la del tiroteo del cine y la del descarrilamiento del tren por naturaleza, ni condicionamientos sociales ni pollas.
 
Lo único que se nota es que leéis libros de los años 50 y pa´tras. :lol:
 
¿Un argumento para rebatir vuestras opiniones? Claro hombre, estoy acostumbrado a discutir con mujeres.

Yo es que tengo la mala costumbre de ausentarme cuando veo que alguien empieza a decir que la antropología es cosa de gente de letras y tal. Prefiero daros la razón y que lo toméis como una victoria, como con las mujeres.
 
ruben_clv rebuznó:
¿Un argumento para rebatir vuestras opiniones? Claro hombre, estoy acostumbrado a discutir con mujeres.

Yo es que tengo la mala costumbre de ausentarme cuando veo que alguien empieza a decir que la antropología es cosa de gente de letras y tal. Prefiero daros la razón y que lo toméis como una victoria, como con las mujeres.

No tienes argumento, no? Qué sorpresa.
 
Ese exceso de testosterona también se relaciona directamente con el mayor índice de delincuencia en hombres. La testosterona no sólo sirve para salvar vidas en situaciones límite. En eso ellas vienen mejor diseñadas para la vida en sociedad. Igual no nos rescatan de un incendio, pero tampoco delinquen con tanta frecuencia como nosotros. Empate a 1
 
Yes we jarl rebuznó:
Ese exceso de testosterona también se relaciona directamente con el mayor índice de delincuencia en hombres. La testosterona no sólo sirve para salvar vidas en situaciones límite. En eso ellas vienen mejor diseñadas para la vida en sociedad. Igual no nos rescatan de un incendio, pero tampoco delinquen con tanta frecuencia como nosotros. Empate a 1

Así es.

También es cierto que si bien el que tiene mucha testosterona suele dominar en las relaciones interpersonales y tener mucha iniciativa y arrojo, muchas veces suele ascender menos en el mundo laboral y tiene más papeletas para acabar en el trullo.

Los que saben controlar esa "energía" extra, por otro lado, son los que más lejos llegan.
 
La testosterona es vuestra amiga joder. Es un privilegio poder segregarla. Esta cruzada culpabilizadora de la Hormona de la Victoria sólo la puedo entender desde la óptica de estudiantes de letras comedores de tofu a sueldo de los illuminati.
 
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