De indefensos y apaleados nada, eso el que se deje, como dice iskariote.
Queridos fraters in generis de tres al cuarto, pobres almas descarriadas del camino recto, o perdidas entre caminos curvos como buscadores de santos griales cuyo encuentro sólo es posible siguiendo el camino recto que no veis porque malas artes de malas madres os impusieron la cegera.
Sois hombres joder, comportaros YA como tales. Honor, heroísmo, cohesión de grupo, amistad, lealtad, competitividad, agresividad, moral... son nuestros compañeros de viaje. El hombre, sólo el hombre, es capaz de llevar todos esos valores consigo, y con ellos forjar civilizaciones. No pidáis igualdad con la mujer, no es posible, no existe, es una quimera. La mujer no puede con esos valores, su egoísmo se lo impide. Ellas son relativas a ellas, porque el interés está por encima de todo.
No mis queridas hamigas, no os cabréeis. Yo no me cabreo cuando alguna me espeta que “sólo” los hombres cometemos las violaciones, las peleas, los asesinatos violentos, las guerras. Reconozco mi naturaleza violenta. Yo la he asumido, porque soy un hombre y quiero serlo, me gusta serlo. Me gusta levantar pesos y más pesos, pensar con la cabeza fría y tener un sistema propio de vida. Por eso mi moral se forjó con el bien y el mal asumido e inquebrantable, y por eso reconocí mi bien y mi mal. Y por eso, reconocí mi naturaleza violenta. Soy violento, soy un hombre. Soy así. Y acepté que mis innatos instintos de imponerme al resto por métodos rápidos, fugaces y violentos, no era una forma de construir una civilización en paz. Para la Paz, en la Paz, desde la Paz y entonces por la Paz, mis maldades, mis demonios innatos, mi “violencia de género” debía ser educada, ser reconducida, ser retenida. Y acepté una educación donde el ÚLTIMO recurso fuera la violencia que el cuerpo me gritaba y exigía aplicar cuanto antes y si ello era favorable desde bien pequeño. Acepté que el hombre fue, es y será violento por naturaleza, y decidí corregirme, moralizarme, hacerme MIEMBRO de un grupo que es mi familia.
¿Y vosotras, ninfas desviadas? ¿Y vosotras, malvadas de la escoba? ¿Y vosotras, peterpanas perpétuas? ¿Aceptáis vuestras innatas cualidades? ¿Aceptáis vuestra alma con sus claros y sus oscuros? ¿Aceptáis retener lo oscuro? ¿Aceptáis cosas que vuestro ser os grita HAZLO, pero que hacerlo es MALO? ¿Sois capaces de tener moral?
No, o cada día menos. Hay chicas que son excepción, aunque no se bien si ello se debe misteriosamente a que pasan ya la edad de 28, donde se produce el punto de inflexión, donde las mujeres, decentes, serias, buenas parecen salir de debajo de las setas olvidando lo putas, zorras y brujas que han sido. No lo sé... no me importa.
Hamigos, no os lamenteis, comportaos como hombres. Veo en vosotros la necesidad de justificaros por un comportamiento que os parece, en el fondo, incorrecto. No lo es. Dejad de quejaros del comportamiento de las mujeres de hoy y actuad. Somos el mejor sexo, somos el sexo favorecido por la naturaleza, el sexo especial, el bicho raro, el experimento que salió bien a pesar de ser una mala idea. Somos el sexo a ser cazado, a ser retenido, a ser buscado por ellas. Tened orgullo e imponed vuestro gusto, nuestro gusto, nuestra voluntad. Ellas son las que van a perder, su opción es o cocina o harén... el futuro es el que es y se cierne inexorable sobre nosotros. No os sintais culpables
¿Os molestan las mujeres que no saben cuidar de sus hombres? No os preocupéis por cambiarlas. Olvidaos de ellas. Son mierda.
¿Os molestan las mujeres que no os ofrecen una imagen acorde a lo que nosotros consideramos femenino? Olvidaos de ellas. Molestan a la vista.
¿Os molestan las mujeres excesivamente promíscuas? Aprovechad su promiscuidad y dadles por el culo mientras buscáis algo mejor, o marchaos con putas de verdad, más sinceras y seguras que esas, esperando encontrar lo buscado.
¿Os molestan las mujeres independientes y solteras per vida? Olvidaos de ellas. No existen. Son un ser sin nada, de la nada y que generará nada. No tendrán hijos a los que educar. No hay futuro. Son un mueble. Su idea pasará, su vida pasará, su mundo se irá. No dejarán nada en herencia.
¿Os molestan las mujeres que no saben reprimir su innato egoísmo y su amoralidad derivada de su relativismo egoísta? Que otros padres se encarguen de educar a mujeres que sepan reprimirse. Vosotros a esas mujeres no tenéis por qué cambiarlas... ni quererlas... ni protegerlas.
¿Os molesta esta mierda feminista? Tomad conciencia de lo que sois, de para qué fuísteis creados y descubriréis que sólo cuando la voluntad viril se restablezca, volveremos a jugarnos la vida por ellas. O sea, que sean ellas las que den su sangre para defenderse. Que los Neiras de la vida se vayan a la puta mierda.
Ningunead a la mala mujer, a la confusamente socializada, a la feminista, a la liberada, a la manipuladora, a la egoísta. Buscad mujeres educadas con valores tradicionales y, ante todo, dejad de ser niñatos. El sentido de la vida es el tener descendencia y prepararla para un futuro. Lo demás es autodestrucción, malditos capullos.
Se abre un cielo de esperanza.