40 (por el culo te la hinco)

El viernes un amigo nos dijo que iba a rayos UVA (teniendo una piel blanca como la leche, sólo consigue estar rojo), se ha depilado completamente y piensa en una liposucción porque no se quita cierta barriga. O se divorcia o sale del armario ya. Apuesto que, dadas las camisas hawaianas que lleva desde hace un par de años y de la vida sexual nula que tiene con su mujer que la segunda opción es la ganadora.

Hoy dos personas me han quitado cinco años, @Troy McClure.

Pues que te los devuelvan.
 
Yo me he propuesto ponerme más en forma que nunca, ahora que viene la cuesta abajo de la edad.
Así que llevo tiempo haciendo dieta y mi hora de ejercicio mancuernero y calistenia y bueno, cuesta mucho recuperarse de las sesiones y en algunas series, pero en general me encuentro mucho más ágil que hace cuatro o cinco años.
Lo que llevo mal es tener el pelo en el pecho canoso. Joder que pinta de viejo me da
 
Lo que dicen aquí del gordo Cenobita, que tiene margen para estar mejor a los 40 porque ahora es una panceta semoviente se aplica también a otros órdenes diferentes del físico. Si alguien tuvo una juventud no particularmente afortunada (físico poco atractivo, pandillitas de “amigos” algo tóxicas, intereses minoritarios, estudios estresantes), las posibilidades de que la decrepitud física asociada a la vejez se vea recompensada por un mundo de ventajas es enorme: independencia de criterio, nula tolerancia con las gilipolleces ajenas, tiempo y dinero para aficiones, pasotismo con los chantajes femeninos, dinero para follar cuando apetece.

Creo que puedo afirmar que mi vida es mucho más feliz y plena con 53 de lo que lo fue con 20, 25 o 30 y estoy seguro de no ser una excepción. La nostalgia no tiene ningún sentido. Se puede elaborar una enorme lista de tareas de juventud que con la perspectiva madura se ven como una colosal pérdida de tiempo: noches de copas acabadas en una triste paja o un polvo mediocre y resacón, tardes de estudio sin fin a la luz del flexo, socializaciones de juventud hablando y oyendo mierda sin fin, toxicidades que no se cortaban de cuajo por ingenuidad y falta de experiencia, puteos femeninos por la misma causa, las dificultades de los inicios laborales y sus arbitrariedades adyacentes.

La soledad constructiva, la compañía escasa, puntual y selecta, el sano egoísmo que no cede a chantajes, el orgullo del camino recorrido valen mil veces más que todo eso. Y llegados a ese punto, uno no necesita gimotear recordando paraísos perdidos, ni hacer un crucero o senderismo con un grupo de divorciados, ni teñirse canas o poner tiras de led en la ducha para matar el hastío vital. Simplemente, después de recorrer un camino de espinas, eres tan feliz como el posibilismo de la realidad lo permite.
 
Última edición:
Yo me he propuesto ponerme más en forma que nunca, ahora que viene la cuesta abajo de la edad.
Así que llevo tiempo haciendo dieta y mi hora de ejercicio mancuernero y calistenia y bueno, cuesta mucho recuperarse de las sesiones y en algunas series, pero en general me encuentro mucho más ágil que hace cuatro o cinco años.
Lo que llevo mal es tener el pelo en el pecho canoso. Joder que pinta de viejo me da
Eres lo que se conoce como un zorro plateado. Un hombre maduro cuyas canas no solo no quitan atractivo sino que lo potencia. El concepto lo leí el otro día en un reportaje sobre Kike Ponce, me hizo gracia y resulta que eso existe y que a las nenas les encanta. Se vuelven locas, creo.
 
Eres lo que se conoce como un zorro plateado. Un hombre maduro cuyas canas no solo no quitan atractivo sino que lo potencia. El concepto lo leí el otro día en un reportaje sobre Kike Ponce, me hizo gracia y resulta que eso existe y que a las nenas les encanta. Se vuelven locas, creo.
No creo que yo llegue a tanto y las nenas dudo que les encandile mi pecho blanco tanto como un torso juvenil musculado.

Pero el otro día, tomando unas cañas, les puse en el móvil a las mujeres cuarentonas de mis amigos el vídeo del Enrique Ponce bailando a lo Michael Jackson y algunas hasta creo que se echaron mano al peluche por las caras que ponían.
 
Última edición:
Madre mía lo que está saliendo Enrique Ponce en el foro últimamente
 
Los que decís haber pasado o estar pasando una crisis de edad es porque pensáis que ese río que es vuestra vida ha dejado de fluir para convertirse en agua estancada la cual va perdiendo líquido poco a poco sin que llegue agua nueva que refresque aquello.
La sensación de haber llegado a la meta se da en la treintena. Muchos ya han tocado techo en lo laboral; donde hayan llegado a esa edad es muy probable que no se muevan en el resto de su vida. También en lo sentimental se llega a la meta; muchos se han casado y otros tantos viven con la pareja de manera muy similar a estar casados.
También en muchos casos la prole la elaboras en este decenio. Tienes un par de retoños y a verlos crecer, como si fuese aquello una película.

Las rutinas ayudan a esa sensación de estancamiento. Ves pasar las estaciones con el mismo pasmo que cuando vas por el campo y de pronto ves pasar un tren de mercancías a toda velocidad. Cuando todavía no estás recuperado de navidad ya estás en semana santa y cuando te quieres recuperar de aquello ya es verano y sin solución de continuidad vuelve a ser navidad.

Empiezan, pues, los años a granel. Un día echas la vista atrás y ves que te cuesta diferenciar un año de otro. ¿Qué hice en 2014? ¿Y en el 16? Fueron iguales, ¿no? Y también lo fue el 17, el 18 y el 19. Este año se salva, fíjate, porque ha habido una pandemia. Lo más emocionante que te ha pasado en los últimos 15 años es que no te dejaron salir de casa en 3 meses.
Los años ya no son individuales. Son puñados de arena que te los tiras encima y que tienen un extraordinario peso que cada vez te hacen encorvar más la figura.

Algunos se dan cuenta de esto y tiran por el camino del medio: dejan a la mujer, dejan el trabajo e intentan llevar lo que ellos pensaban que daba emoción a sus vidas, que no es otra cosa sino salir, beber, en definitiva intentar volver a la adolescencia.
Esta gente ¿Qué consigue? Consigue dar una repugnante imagen de niño eterno. De niño calvo y con achaques que se regodea en su ser pueril, porque un niño se divierte sin saber que se divierte porque es un niño, pero un adulto que te dice que se divierte porque es como un niño es disparatado.

No consiguen una mujer mejor. Consiguen viejas que, como ellos, creen que volver a la adolescencia es una buena estrategia por lo que al saco de años que llevan encima y al deterioro físico le añaden una estupidez que te quita las ganas de vivir. Recuerdas que a los 20 ligar con una tía aportaba frescor a tu vida. Te ponías nervioso al pensar cómo tendrá las tetas, cómo será salir a cenar con ella, qué cine le gustará, qué habrá estudiado, cómo besará.
Ahora ligar con una vieja solo aporta malas preguntas: ¿Qué manías tendrá? ¿molestarán mucho los hijos? ¿Tendrá cicatriz de la cesárea? ¿Qué camino tortuoso la habrá llevado hasta aquí?

En lo laboral tampoco mejora la cosa. Lo que ellos creían que era un trabajo rutinario que te destrozaba el alma no era tan malo, en realidad. Ahora que vas dando tumbos en la incertidumbre laboral te das cuenta que no por quitar la rutina mejora la cosa. Recuerdas cuando antes se te acababa un contrato o te echaban o te ibas y te duraba el susto una tarde porque al día siguiente ya estabas con grandes planes para tu futuro, pensando cómo esto que te había pasado era una oportunidad y no una crisis. Ahora ves que no te llaman de ningún sitio y si lo hacen no mejora en nada tu situación anterior y ves al futuro no con esperanza sino con miedo.

En resumen, hagas lo que hagas la deriva va ser la misma. El camino del descubrimiento ha acabado. La sensación rutinaria se da porque ya todo lo bueno lo has visto, todo lo has vivido, todo lo has saboreado, todo lo has olido, todo lo has tocado. Esa sensación de novedad ha acabado para siempre y por más que quieras volver a ser un niño no lo vas a conseguir porque es como la que se hace una reconstrucción de himen; por mucho colgajo que te pongan ahí, ese coño ya está follado.

No hay buena solución. Ahora las novedades que quedan son todas fatales: saborear la novedad de ser hospitalizado, de acudir al tanatorio, de levantarte con dolor de huesos, de resoplar al sentarte, de ver cómo te va dando cada vez más asco tu mujer.

Supongo que este proceso es más doloroso para aquellos que no han convertido ni una de sus esperanzas e ilusiones y echando la vista atrás ven que ha desperdiciado sus años de crecimiento, esperanzas e ilusiones y la cuesta abajo les va a tocar afrontarla desde una posición muy incómoda.
Para los que han conseguido cumplir en todo o en algo también habrá esa cuesta abajo, pero al menos tendrán el consuelo de haber conseguido algo.

Habrá quien diga que conoce a tal persona que se fue del lado de la bruja de su mujer para irse con una veinteañera, que se fue de su trabajo para formar su empresa y ahora es multimillonario y que los fines de semana se toma sus copas y tan contento.
Haberlos los habrá, si, pero ¿Crees que precisamente tú tendrás esa suerte?

Para intentar frenar esa caída lo suyo es ponerse un buen paracaídas que te ayude en que el aterrizaje sea suave, delicado y de pie: como ya te han comentado profundiza en tus intereses y busca otros nuevos. Lee, escucha, viaja, saborea, haz deporte. Son formas de religión menores que no te van a salvar de la hecatombe ni de esos años a granel, pero van a salvar tu espíritu y van a enriquecer tu existencia al igual que ayudará que con quién estés haga lo mismo y que no se deje arrasar por los años.

Cuando el peseto alopécico da el do de pecho con un post magistral, no cabe sino reconocerlo.
 
Última edición:
Cuando el peseto alopécico da el do de pecho con un post magistral, no cabe sino reconocerlo.

El post es cojonudo y seguramente sea la perspectiva de muchos pero ¡joder! que pesimismo tan bestia. ¿La gente no disfruta viajando?¿planteándose retos nuevos (no se, a mi padre le dio por construirse un barco) ¿no disfruta de los pocos colegas decentes que llegan a esa etapa con ellos?¿no disfruta de la independencia de irse a cenar, comprarse lo que le apetezca, ver lo que le salga la polla? ¿no disfrutan más, o de forma distinta, del cine, arte, música, etc..? ¿no disfruta construyendo algo, ya sea un legado profesional, una empresa, un hogar? ¿no disfruta descubriendo todo aquello que antes no podía por falta de dinero o independencia?

Es que algunos parece que se van a pegar desde los 40 a los 80 del curro a casa y de casa al curro con tremendo sufrimiento y dolor de huesos para los restos. Yo entiendo que desde la perspectiva de alguien de 20 todo eso suene a un coñazo, porque a mi con 20 me sonaba a coñazo, pero es que con cierta edad como que ves todos esos aspectos de la vida con otros ojos y lo de antes no te llama tanto.
 
Última edición:
El post es cojonudo y seguramente sea la perspectiva de muchos pero ¡joder! que pesimismo tan bestia. ¿La gente no disfruta viajando?¿planteándose retos nuevos (no se, a mi padre le dio por construirse un barco) ¿no disfruta de los pocos colegas decentes que llegan a esa etapa con ellos?¿no disfruta de la independencia de irse a cenar, comprarse lo que le apetezca, ver lo que le salga la polla? ¿no disfrutan más, o de forma distinta, del cine, arte, música, etc..? ¿no disfruta construyendo algo, ya sea un legado profesional, una empresa, un hogar? ¿no disfruta descubriendo todo aquello que antes no podía por falta de dinero o independencia?

Es que algunos parece que se van a pegar desde los 40 a los 80 del curro a casa y de casa al curro con tremendo sufrimiento y dolor de huesos para los restos. Yo entiendo que desde la perspectiva de alguien de 20 todo eso suene a un coñazo, porque a mi con 20 me sonaba a coñazo, pero es que con cierta edad como que ves todos esos aspectos de la vida con otros ojos y lo de antes no te llama tanto.

Es un post buenísimo pero es tan negativo que me resulta algo irreal.

En todo caso, os quería agradecer personalmente todas vuestras respuestas ya que tienen un nivel elevadísimo. Soy un bujarra, qué le voy a hacer.
 
¿no disfruta descubriendo todo aquello que antes no podía por falta de dinero o independencia?
Yo no cambio mis 20 por mis casi 40 por lo que dices.

El acceso a tener dinero me ha hecho cumplir sueños como el de viajar por cinco continentes; ver cosas que nunca creía que iba a poder ver y que admiraba por la televisión.

Suena a chiste o frikada, pero de pequeño me flipaba la fauna australiana, especialmente los ornitorrincos por ser uno de los animales más extraños que existen.

Pues bien, uno de los días más felices de mi vida fue cuando puede visitar un puto zoo en Sidney; cuando fui a ver las peceras de los ornitorrincos se me pasó toda mi infancia por delante; fue bonito, mucho.
 

Archivos adjuntos

  • E880582E-AC1F-4E3A-9530-D439D36A194B.jpeg
    E880582E-AC1F-4E3A-9530-D439D36A194B.jpeg
    36,5 KB · Visitas: 58
Sin duda todo es relativo. Yo les tengo una gran envidia sana a esta gente que tiene 7 hijos de 5 mujeres, se han pateado medio mundo siendo aprendices de todo y maestros de nada pero que te salvan cualquier situación en cualquier momento y en cualquier lugar. Son unos inconscientes y unos irresponsables, sin duda. Pero cuando estén en el lecho de muerte no tengo duda de que su viaje ha sido mucho más intenso e interesante que el de la mayoría. Debe ser por eso que dicen que los ignorantes son los más felices.
 
[
Es un post buenísimo pero es tan negativo que me resulta algo irreal.

En todo caso, os quería agradecer personalmente todas vuestras respuestas ya que tienen un nivel elevadísimo. Soy un bujarra, qué le voy a hacer.
No lo escribí pensando en negativo o estando en una mala racha. Pienso que es así, que es el ciclo de la vida, que la edad del descubrimiento ha acabado, la edad de las locuras, la de que te pasen cosas no previstas y que éstas sean positivas.
En definitiva se acaba la edad en la que forjas lo que vas a ser en tu ser adulto y que es otra, muy diferente, mucho más aburrida por esa calma chicha que da la rutina y cierto grado de satisfacción. Pero no es malo, igual que la vejez no lo es. Es simplemente otra etapa de la vida.
Pero es que ¿Quién no iba a echar de menos cuando estudiabas en la universidad y un día podías ir con la intención de ir a clase pero acababas a las 5 de la mañana por ahí? Conocer gente nueva, iniciar relaciones, conocer sitios, salir, experiencias laborales. Todo tenía un tufillo a aventura algo difusa. Algo tiene de épica la juventud aunque lo único que hagas sea salir por ahí.
Todo eso lo haces por primera vez en la juventud y lo que hagas con 40 sonará a refrito o a sitcom de tu propia vida, pero sin ese frescor de la novedad.
Es imposible volver a sentir esa novedad, imposible volver a esa frescura y a esa inocencia y ni por asomo hay que dejarse llevar por los fantasmas que te instan a volver a esos años porque caes en el ridículo.
¿No conocéis gente que viajó a Londres con 20 años y vuelve a los 40 y dicen que ya no les ha gustado tanto? Lo que no les gusta es ese señor que va por Londres mirando todo con ojos cansados y se preguntan dónde está ese chaval que no pudo dormir el día de antes de ir allí hace 20 años porque no necesitaba de otros estímulos extra. El solo hecho de viajar allí era increíble.
Ahora e viejo de ojos cansados se queja del mal tiempo, de la gente, de lo caro que es todo y acaba diciendo a modo de claudicación ante sí mismo que es la última vez que sale de España.

Y claro que se puede disfrutar a partir de los 40, claro que sí. Es esa, precisamente, la tabla de salvación; disfrutar de lo que te rodea, de leer, de viajar y de ahondar en tus intereses y si puedes aprender cosas nuevas y no dejarse arrasar por los años pensando en qué le habrá pasado a ese Londres para que no te haya gustado esa vez, porque corres el riesgo de darte cuenta que en vez de usar la tabla de salvación te has dejado ahogar sin darte ni cuenta y que Londres es el mismo Londres que hace 20 años y que en realidad lo que no te gusta eres tú
 
[
Todo eso lo haces por primera vez en la juventud y lo que hagas con 40 sonará a refrito o a sitcom de tu propia vida, pero sin ese frescor de la novedad.
Es imposible volver a sentir esa novedad, imposible volver a esa frescura y a esa inocencia y ni por asomo hay que dejarse llevar por los fantasmas que te instan a volver a esos años porque caes en el ridículo.
¿No conocéis gente que viajó a Londres con 20 años y vuelve a los 40 y dicen que ya no les ha gustado tanto?

Joder, pues yo precisamente pienso que con 20 años viajaba de una forma distinta y buscando unas cosas y ahora es cuando estoy redescubriendo ciudades y países que ya conocía con otros ojos completamente distintos. Y lo cierto es que casi los estoy disfrutando más ahora que antes.
 
Joder, pues yo precisamente pienso que con 20 años viajaba de una forma distinta y buscando unas cosas y ahora es cuando estoy redescubriendo ciudades y países que ya conocía con otros ojos completamente distintos. Y lo cierto es que casi los estoy disfrutando más ahora que antes.
Es que tú estás utilizando esa tabla de salvación de la que te hablo. Tú estás aprendiendo a viajar de otra forma, tal y como hago yo también por cierto. Tú no añoras constantemente los tiempos pasados ni suspiras al pensar en tu edad porque estás sabiendo adecuarte a las diferentes etapas.
Pero hay otros muchos, como el ejemplo que te puesto, que no saben hacer eso, que simplemente se dejan arrasar y pierden el interés por todo, ¿o no conoces gente que su único ocio es beber en el bar?
Tú tienes 40 y sabes que ya no te interesa lo de los 20, que ya no te vas a perder por ahí a mamarte sin ton ni son y a ver a quién le clavas la polla. Ahora te interesan otras cosas, pero hay gente que no ha aprendido o no se ha interesado en otras cosas y si no es como en aquél entonces no se saben divertir y es cuando pierden el interés y es cuando vienen los lamentos de la edad y esa es la gente peor lo va a llevar porque van a convertir el resto de su vida en un lamento eterno por esa juventud perdida
 
[

No lo escribí pensando en negativo o estando en una mala racha. Pienso que es así, que es el ciclo de la vida, que la edad del descubrimiento ha acabado, la edad de las locuras, la de que te pasen cosas no previstas y que éstas sean positivas.
En definitiva se acaba la edad en la que forjas lo que vas a ser en tu ser adulto y que es otra, muy diferente, mucho más aburrida por esa calma chicha que da la rutina y cierto grado de satisfacción. Pero no es malo, igual que la vejez no lo es. Es simplemente otra etapa de la vida.
Pero es que ¿Quién no iba a echar de menos cuando estudiabas en la universidad y un día podías ir con la intención de ir a clase pero acababas a las 5 de la mañana por ahí? Conocer gente nueva, iniciar relaciones, conocer sitios, salir, experiencias laborales. Todo tenía un tufillo a aventura algo difusa. Algo tiene de épica la juventud aunque lo único que hagas sea salir por ahí.
Todo eso lo haces por primera vez en la juventud y lo que hagas con 40 sonará a refrito o a sitcom de tu propia vida, pero sin ese frescor de la novedad.
Es imposible volver a sentir esa novedad, imposible volver a esa frescura y a esa inocencia y ni por asomo hay que dejarse llevar por los fantasmas que te instan a volver a esos años porque caes en el ridículo.
¿No conocéis gente que viajó a Londres con 20 años y vuelve a los 40 y dicen que ya no les ha gustado tanto? Lo que no les gusta es ese señor que va por Londres mirando todo con ojos cansados y se preguntan dónde está ese chaval que no pudo dormir el día de antes de ir allí hace 20 años porque no necesitaba de otros estímulos extra. El solo hecho de viajar allí era increíble.
Ahora e viejo de ojos cansados se queja del mal tiempo, de la gente, de lo caro que es todo y acaba diciendo a modo de claudicación ante sí mismo que es la última vez que sale de España.

Y claro que se puede disfrutar a partir de los 40, claro que sí. Es esa, precisamente, la tabla de salvación; disfrutar de lo que te rodea, de leer, de viajar y de ahondar en tus intereses y si puedes aprender cosas nuevas y no dejarse arrasar por los años pensando en qué le habrá pasado a ese Londres para que no te haya gustado esa vez, porque corres el riesgo de darte cuenta que en vez de usar la tabla de salvación te has dejado ahogar sin darte ni cuenta y que Londres es el mismo Londres que hace 20 años y que en realidad lo que no te gusta eres tú

Nadie escribe en negativo o positivo, simplemente expone sus ideas acerca del mundo en el que vive. La realidad es la que es para todo el mundo pero cada uno de nosotros escogemos los detallitos que confirman nuestra visión prefijada, los que dan validez a nuestro prejuicio. Por ejemplo, hay directores de cine más nihilistas que otros que tiran más por los happy endings. Ambos tienen razón. En eso opera mucho la subjetividad.

Obviamente, nadie está diciendo que a partir de los cuarenta sea posible comenzar una carrera futbolística o en el implacable y sangriento mundo de la petanca, por ejemplo. Pero hay veces que cierras puertas para abrir otras. Por ejemplo, una persona que haya invertido muchos años para algo (estudios, trabajos, hijos) puede comenzar a "vivir" a partir de los cuarenta. O mismamente, casos como Cenobita: si se pone fuertote, hace vida social etcétera ya es mucho más de lo que ha vivido antes precisamente por lo paupérrimo de lo anterior. Hay gente que poco ha viajado antes de los cuarenta y ahora se da el lujo de irse a ver cenotes a la Riviera Maya. No creo que sea tan drástico como dices.
 
Es que tú estás utilizando esa tabla de salvación de la que te hablo. Tú estás aprendiendo a viajar de otra forma, tal y como hago yo también por cierto. Tú no añoras constantemente los tiempos pasados ni suspiras al pensar en tu edad porque estás sabiendo adecuarte a las diferentes etapas.
Pero hay otros muchos, como el ejemplo que te puesto, que no saben hacer eso, que simplemente se dejan arrasar y pierden el interés por todo, ¿o no conoces gente que su único ocio es beber en el bar?
Tú tienes 40 y sabes que ya no te interesa lo de los 20, que ya no te vas a perder por ahí a mamarte sin ton ni son y a ver a quién le clavas la polla. Ahora te interesan otras cosas, pero hay gente que no ha aprendido o no se ha interesado en otras cosas y si no es como en aquél entonces no se saben divertir y es cuando pierden el interés y es cuando vienen los lamentos de la edad y esa es la gente peor lo va a llevar porque van a convertir el resto de su vida en un lamento eterno por esa juventud perdida

Bueno, entonces acordemos que hay cuarentones amargados, como hay gente de 20 amargada, sobre todo en la generación actual. Yo no considero que me esté salvando de nada, no me estoy perdiendo nada, no estoy anclado a nada. He vivido las cosas que uno suele vivir a los 20 y ahora estoy descubriendo un huevo de cosas nuevas que antes con 20 años no podía por las razones ya mentadas varias veces en el hilo, no es una especie de envoltura protectora ficticia que nos estamos inventando para salir mejor parados.

Me parece tan valioso irse a Paris con 17 años con los colegas del insti, follar, beber y hacer el postureta en la Tour Eiffel, como pasar por la feria navideña en Edimburgo con la pareja, ya en los 40, a picar salmón a la brasa escuchando música en directo y disfrutar de la ciudad mientras planeas la visita a los highlands al día siguiente.

Me parece tan valiosa una noche épica en las discotecas del sur de Tenerife a los 20 como salir con tus colegas en el barco a los 40 a bucear/pescar y beber birras en una cala y echarte unas risas.

El ciclo vital es un todo, no se acaba a una edad, cada puto día eliges cómo y qué quieres vivir y a cada etapa de tu vida tendrás unas armas y unos obstáculos distintos. Esta gente que a los 40 parece que se les cae el mundo encima lo que tienen es un vacío interior que llevan arrastrando mucho tiempo, son personas que no se quieren a si mismos, que necesitan la aprobación externa o a terceros que alimenten un ego más bien pequeño. Por eso actúan como bien mencionabas antes, tirándose de cabeza a todas aquellas cosas que les hicieron sentir importantes en el pasado, aunque fuese algo ocasional. Es como esa chica que cada vez que la deja el novio busca a ese ex que era un pagafantas y la hacía sentir el centro del universo, aunque no le pusiera la pepitilla a tono, para recuperar la confianza y volver al ruedo con el siguiente cabrón de la lista.
 
Bueno, entonces acordemos que hay cuarentones amargados, como hay gente de 20 amargada, sobre todo en la generación actual. Yo no considero que me esté salvando de nada, no me estoy perdiendo nada, no estoy anclado a nada. He vivido las cosas que uno suele vivir a los 20 y ahora estoy descubriendo un huevo de cosas nuevas que antes con 20 años no podía por las razones ya mentadas varias veces en el hilo, no es una especie de envoltura protectora ficticia que nos estamos inventando para salir mejor parados.

Me parece tan valioso irse a Paris con 17 años con los colegas del insti, follar, beber y hacer el postureta en la Tour Eiffel, como pasar por la feria navideña en Edimburgo con la pareja, ya en los 40, a picar salmón a la brasa escuchando música en directo y disfrutar de la ciudad mientras planeas la visita a los highlands al día siguiente.

Me parece tan valiosa una noche épica en las discotecas del sur de Tenerife a los 20 como salir con tus colegas en el barco a los 40 a bucear/pescar y beber birras en una cala y echarte unas risas.

El ciclo vital es un todo, no se acaba a una edad, cada puto día eliges cómo y qué quieres vivir y a cada etapa de tu vida tendrás unas armas y unos obstáculos distintos. Esta gente que a los 40 parece que se les cae el mundo encima lo que tienen es un vacío interior que llevan arrastrando mucho tiempo, son personas que no se quieren a si mismos, que necesitan la aprobación externa o a terceros que alimenten un ego más bien pequeño. Por eso actúan como bien mencionabas antes, tirándose de cabeza a todas aquellas cosas que les hicieron sentir importantes en el pasado, aunque fuese algo ocasional. Es como esa chica que cada vez que la deja el novio busca a ese ex que era un pagafantas y la hacía sentir el centro del universo, aunque no le pusiera la pepitilla a tono, para recuperar la confianza y volver al ruedo con el siguiente cabrón de la lista.
Estamos completamente de acuerdo
 
Es que tú estás utilizando esa tabla de salvación de la que te hablo. Tú estás aprendiendo a viajar de otra forma, tal y como hago yo también por cierto. Tú no añoras constantemente los tiempos pasados ni suspiras al pensar en tu edad porque estás sabiendo adecuarte a las diferentes etapas.
Pero hay otros muchos, como el ejemplo que te puesto, que no saben hacer eso, que simplemente se dejan arrasar y pierden el interés por todo, ¿o no conoces gente que su único ocio es beber en el bar?
Tú tienes 40 y sabes que ya no te interesa lo de los 20, que ya no te vas a perder por ahí a mamarte sin ton ni son y a ver a quién le clavas la polla. Ahora te interesan otras cosas, pero hay gente que no ha aprendido o no se ha interesado en otras cosas y si no es como en aquél entonces no se saben divertir y es cuando pierden el interés y es cuando vienen los lamentos de la edad y esa es la gente peor lo va a llevar porque van a convertir el resto de su vida en un lamento eterno por esa juventud perdida
Te voy a replicar e igual es una mierda lo que digo porque estoy cenando fuera y me he metido unas cuantas birras.

Es ley de vida pero me arrepiento de no haber disfrutado de muchos viajes y lugares donde he vivido porque era precisamente inmaduro para ello.

Me pire con 21 tacos de España y viví en Italia y Uk; fue una etapa de la ostia con claro oscuros.

Me siento un auténtico gilipollas de haber “sufrido” la añoranza de unos amigos que luego te das cuenta que no valían ni para tomar por el culo o de haber echado de menos esa novia que te dejó y que ahora es uña cuarentona desecho de tientas.

Si me pilla esa misma epoca con la madurez mental de ahora, hubiese sido un puto paseo triunfal como lo fue el pegar el salto al otro lado del mundo; la clave; lo hice con 27 tacos y con pasta en el bolsillo.

Con 20 tacos tenía más pelo pero era un perro en pleno proceso de apaleamiento; con 39 todavía tengo cosas que aprender pero es difícil que me ahogue en un vaso de agua.

Mientras me respete la salud,me quedo como estoy y tiempos pasados no fueron mejores.
 

Creo que la frivolidad de la época de Instagram en la que vivimos, consigue que sólo veamos el éxito asociado con la juventud y la precocidad. Como contrapartida, el fracaso está al otro lado de la curva, hermanado con las canas, los kilos de más típicos de la edad y las arrugas. Y lo cierto es que no es así en no pocas veces. Stan Lee era un don nadie antes de los cuarenta; Henry Ford creó su modelo T cuando contaba cuarenta y cinco; y el tipo que erigió McDonalds lo hizo ya frisando los cincuenta.

Obviamente, no digo que seamos millonarios, pero cuando se manejan expectativas modestas y se invierte trabajo o en cosas así, la cosa puede cambiar, y por supuesto, mejorar para bien.
 
Obviamente, nadie está diciendo que a partir de los cuarenta sea posible comenzar una carrera futbolística o en el implacable y sangriento mundo de la petanca, por ejemplo. Pero hay veces que cierras puertas para abrir otras. Por ejemplo, una persona que haya invertido muchos años para algo (estudios, trabajos, hijos) puede comenzar a "vivir" a partir de los cuarenta. O mismamente, casos como Cenobita: si se pone fuertote, hace vida social etcétera ya es mucho más de lo que ha vivido antes precisamente por lo paupérrimo de lo anterior. Hay gente que poco ha viajado antes de los cuarenta y ahora se da el lujo de irse a ver cenotes a la Riviera Maya. No creo que sea tan drástico como dices.
Lo que pasa es que esta gente que ahora viene a exhibir que viven guay con cuarenta y muchos y cincuenta, que viven mucho mejor que con veinte, que ahora la vida sí que sí en realidad están intentando decirse a sí mismos que no han tardado cuarenta o cincuenta años en aprender a vivir, que no han desperdiciado más de la mitad de su vida, y la mitad buena, en otras cosas. Es un poco el querer consolarse y vendernos a los demás la burra de que ahora es cuando empieza la vida buena, y no, no es verdad. La vida buena puede empezar desde la primera juventud si sabes hacerlo y durar hasta la vejez. Ellos se han perdido la mitad y por más que ahora se hayan enganchado a ello no podrán apartar de sí esa sombra de haber tirado a la basura los mejores años de la vida de una persona.

¿Conoces la canción "It was a very good year" de Sinatra?


Para ver este contenido, necesitaremos su consentimiento para configurar cookies de terceros.
Para obtener información más detallada, consulte nuestra página de cookies.



When I was seventeen
It was a very good year
It was a very good year for small town girls
And soft summer nights
We'd hide from the lights
Under the village green
When I was seventeen
When I was twenty-one
It was a very good year
It was a very good year for city girls
Who lived up the stairs
With all that perfumed hair
And it came undone
When I was twenty-one
Then I was thirty-five
It was a very good year
It was a very good year for blue-blooded girls
Of independent means
We'd ride in limousines
Their chauffeurs would drive
When I was thirty-five
But now the days grow short
I'm in the autumn of the year
And now I think of my life as vintage wine
From fine old kegs
From the brim to the dregs
And it poured sweet and clear
It was a very good year
It was a mess of good years

Es esto. En cada edad, lo suyo. Y en cada edad, lo suyo bien hecho. No es fácil lograrlo, pero se parece bastante a lo que acaba de decir @Moporday en el post que precede a este y con el que está de acuerdo @Apofis y yo también.

Pero, ay, hay quien viene a desdeñar todo hasta que han aprendido a medio sobrellevar la vida. Y esta gente se engañan a sí mismos y, lo que es peor, nos quieren engañar a los demás.

Mira @FUMANCHU, que vive bien ahora con cuarenta, y se arrepiente de no haberlo hecho mejor con veintipocos. Él sí es honesto, no intenta engañar. Sabe que no se lo montó bien y hoy, que se lo monta mucho mejor, lo haría diferente. Si dijera "bah, esos años son un desperdicio, no valen para nada, es ahora ahora cuando sí se disfruta" resultaría ridículo.
 
Arriba Pie