Cliffy-Calabria rebuznó:
....Asi que claro que las hay, no hay muchas, pero las hay.
En todas partes hay de todo, es normal.
No todas son unas lagartas, obvio.
La mayoría son, digamos..., unas <em>razonablemente</em> lagartas.
Unas pocas se salen del promedio, por exceso o por defecto, obvio. La puta campana de Gauss.
A la inversa, entre los tíos, también hay de todo en esto. Yo incluso he conocido alguno así. Yo vivo en una ciudad de provincias, tirando a pequeña, y os aseguro que muchas maman de esa leche desde pequeñas, me refiero a esa especie de clasismo (de familias en algunos casos) a la hora de relacionarse en sociedad.
Una mujer es muchísimo más realista que un hombre en ese aspecto, y si puede aprovecharse de un status de privilegio, adquirido o heredado, lo hará SIN DUDARLO.
NI SE PLANTEA OTRA MIERDA, vamos... Para eso, para idealismos, estamos los varones muchas veces.
La de veces que salía de fiesta cuando eran más joven, recién acabada la carrera pero ya con un buen trabajo, 24 soñadores añitos, y cuando me preguntaban a qué me dedicaba, respondía que "estaba en el paro" para descartar así a las que no les interesaba <em>por mi mismo</em>. Y os aseguro que poco más recuerdo de aquellas gijipolleces digno de mentar (porque pocas veces concreté nada) que aquellas caras de DESILUSIÓN y pérdida repentina de interés <em>ipso facto</em>,
Años después ya era consciente de que la estrategia debía de cambiar, de hecho... que debía de ser justamente la contraria, si quería hacer algo. Y sí, me tiraba de los pelos cada vez que lo recordaba, imperdonable pipiolada.
Todo lo contrario a un amigo de entonces, que realmente estaba en el paro, no tenía estudios tampoco, el graduado escolar y con esfuerzo, pero llegaba el sábado y se ponía unas gafas con montura <em>aloabogado</em> sin graduación alguna, para ir diciendo a la que se prestara que era estudiante de... (a veces Derecho, a veces Económicas,etc...) No se comía nada, pero esa es otra historia. La tía que se interesaba no tardaba en darse cuenta más de 10 minutos de que ahí había algo que no cuadraba... jaja.. Era un encanto de chaval, por otra parte.