Cuando son niñas sueñan con su principe azul. Conforme van creciendo y ligan con su príncipe azul (buen tio, formal, etc) se aburren. Su mente les pide el principe azul, pero su coño tiene ganas del chuletas más cabronazo que puedan encontrar.
Entonces ellas acaban sabiendo que nunca van a querer, a amar, desear o como quieran llamarlo a un buen tío tanto como al chuletas. Ése es el amor sincero para ellas. El amor de chuleta.
La prueba está en que mientras al buenazo le dan sexo de poco en poco... al chuletas le entregan su culo virgen en medio de un parque si éste así lo requiere.
Así acaban despreciándose a sí mismas por su naturaleza de sumisas a las que les gusta ser maltratadas psicológicamente y se convierten en sacos de carne con agujeros para que te corras dentro ;)
Entonces ellas acaban sabiendo que nunca van a querer, a amar, desear o como quieran llamarlo a un buen tío tanto como al chuletas. Ése es el amor sincero para ellas. El amor de chuleta.
La prueba está en que mientras al buenazo le dan sexo de poco en poco... al chuletas le entregan su culo virgen en medio de un parque si éste así lo requiere.
Así acaban despreciándose a sí mismas por su naturaleza de sumisas a las que les gusta ser maltratadas psicológicamente y se convierten en sacos de carne con agujeros para que te corras dentro ;)