Crackdevila rebuznó:
Las personas generalmente van en rebaño, y si son tías en este tema se nota mucho más, porque son las que ELIGEN. Ya en torno a los 25, cuando una dice "vamos a sentar la cabeza" todas van detrás.
Lo gracioso será dentro de 8 o 10 cuando una diga "vamos a entrar en fase madurita-loca-sexo in niu yor". Hostias habrá por quitarse a los "lastres" de encima y follarse al primer adolescente que vean.
Profético total, si señor.
Esto también ocurre entre los tíos, no creáis, es algo universal, pero para nada lo llamaría yo amor.
Mucha gente, no sé porqué, sólo parece encontrar sentido a su propia vida teniendo pareja. Será algo "natural", no digo yo que no, pero no lo veo, nunca lo he visto, ni de lejos, algo normal.
Lo de los grupos de amigos y amigas que se echan novia, es desde luego un caso de "maricón el último" muy claro. Nadie quiere quedar el último de la pandilla, saliendo triste y sólo, todos quieren formar parte de la nueva forma de vivir llamada "¡ahora tengo pareja!".
Pero nada, repito, tiene eso que ver con el amor.
De hecho la mayoría de las parejas ni están, ni han estado nunca enamoradas, os lo puedo asegurar. Como mucho lo habrá estado uno de ellos, y el otro habrá seguido el juego por conveniencia: él por sexo, ella por múltiples y variadas razones (evitar la soledad, dinero gratis, lucir al chico ante sus amigas, etc). Repito: él por sexo.
La pareja es tanto una moda como una forma de llenar las propias carencias. En ocasiones, sólo en ocasiones, existe una pareja que se entiende a la perfección, que vive el amor de forma tranquila durante muchos años, y que se complementan y apoyan pese a los malos momentos que, como toda pareja, surgen a lo largo de dicha relación.
Esa pareja VERDADERA, suele darse en dos de cada cien casos sólamente, y es como que te toque la lotería, porque a la mayoría de las personas, para bien o para mal, nunca les toca el premio, y se tienen que conformar con hacer la pantomima. Por supuesto no hablo del cuento de hadas, hablo de una PAREJA REAL, con todos sus problemas y dudas, pero pareja propiamente dicha, compatible por los siglos de los siglos.
Otros, sencillamente, no es que no la encuentren, sino que más bien no están hechos para tener pareja. Soy uno de ellos, y no es ninguna desgracia, sólo otra forma de ser, de estar, de vivir y de pasar por este absurdo que es la vida autoconsciente.
Un bechi.