ElGordoMazapanes
Asiduo
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El otro día andaba yo cerveceando con unos amigos en una bar de tapas que hay frente a un bar en el que Uncle Meat tiene toda la pinta de ir, cuando uno de ellos comentó la afición que tiene un colega suyo, que por curiosidad yo conocía, pero no sus hobbies.
Resulta que el muyayo tiene predilección por asistir a todas las charlas sobre enfermedades concretas y taras, charlas en las que se comentan los avances médicos para dichas patologías o ayudas que deben de ponerse en los portales para que los tetraplejicos no entren untándose aceite y pidiéndole ayuda al hideputa de turno con un empujoncito.
El caballero en concreto asiste a éstas charlas debido a que probablemente, junto al médico, sea el único sano, ergo liga de seguro con las 4 feminazis hiperenfermas y terminales que encuentra. Es una práctica que aprendió cuando estudiaba nosequé pollas con mongólicos, y ya se ha follado desde síndromes de down, leucémicas, enanas (pero enanas de cojones, todo cabeza) y, la última, una mujer sin brazos.
Cuenta que en el momento de correrse la dama quería abrazarlo pero, obvio, no podía, y solo aleteaba como los gorriones bebés que te encuentras tirados en pleno julio por las calles.
Comprendo a la perfección que zumbarse a una mujer sin brazos (y sin piernas, para in extremis yo) conlleva que tras el acto puedes guardarla cómodamente en su funda bajo la cama, sin ocupar apenas espacio, no obstante no sé lo que harían ustedes.
El caso más retrasado en cuanto a sexo que he tenido fue en Torre del Mar, Málaga. En un camping vi a una ninfa en la piscina de curvas increíbles y cara que mis 3 dioptrías veían como la ambrosía del beso, bárbaro. Mi primo, un hijo de puta sin apenas dioptrías me instó con la original frase de "no tienes güevos a decirle algo" ,a que fuera a seducirla y yo, que en valor no me gana naiden, fui.
A llegar a su altura y empezar a escuchar balbuceos más propios de Ry´leh que de la pasarela cibeles comencé a sentirme raro hasta que confirmé que tenía más grados que toda PF junta. No me importó.
Me la follé en una tienda de campaña en la que había unas 40 botellitas de cantimploras zumrok vacías (sería su fetiche, yoquesé) y que olía a una mezcla entre a peo, otra mamá y toallas húmedas. A día de hoy reconozco que fue un buen polvo, aunque poca gente los abe porque me convertiría en un incomprendido de esos.
¿Y ustedes? ¿cual ha sido el engendro con más taras que se han zumbado o, hasta qué tara estarían dispuestos a aceptar con tal de meterla en caliente?
Resulta que el muyayo tiene predilección por asistir a todas las charlas sobre enfermedades concretas y taras, charlas en las que se comentan los avances médicos para dichas patologías o ayudas que deben de ponerse en los portales para que los tetraplejicos no entren untándose aceite y pidiéndole ayuda al hideputa de turno con un empujoncito.

El caballero en concreto asiste a éstas charlas debido a que probablemente, junto al médico, sea el único sano, ergo liga de seguro con las 4 feminazis hiperenfermas y terminales que encuentra. Es una práctica que aprendió cuando estudiaba nosequé pollas con mongólicos, y ya se ha follado desde síndromes de down, leucémicas, enanas (pero enanas de cojones, todo cabeza) y, la última, una mujer sin brazos.
Cuenta que en el momento de correrse la dama quería abrazarlo pero, obvio, no podía, y solo aleteaba como los gorriones bebés que te encuentras tirados en pleno julio por las calles.

Comprendo a la perfección que zumbarse a una mujer sin brazos (y sin piernas, para in extremis yo) conlleva que tras el acto puedes guardarla cómodamente en su funda bajo la cama, sin ocupar apenas espacio, no obstante no sé lo que harían ustedes.
El caso más retrasado en cuanto a sexo que he tenido fue en Torre del Mar, Málaga. En un camping vi a una ninfa en la piscina de curvas increíbles y cara que mis 3 dioptrías veían como la ambrosía del beso, bárbaro. Mi primo, un hijo de puta sin apenas dioptrías me instó con la original frase de "no tienes güevos a decirle algo" ,a que fuera a seducirla y yo, que en valor no me gana naiden, fui.
A llegar a su altura y empezar a escuchar balbuceos más propios de Ry´leh que de la pasarela cibeles comencé a sentirme raro hasta que confirmé que tenía más grados que toda PF junta. No me importó.

Me la follé en una tienda de campaña en la que había unas 40 botellitas de cantimploras zumrok vacías (sería su fetiche, yoquesé) y que olía a una mezcla entre a peo, otra mamá y toallas húmedas. A día de hoy reconozco que fue un buen polvo, aunque poca gente los abe porque me convertiría en un incomprendido de esos.
¿Y ustedes? ¿cual ha sido el engendro con más taras que se han zumbado o, hasta qué tara estarían dispuestos a aceptar con tal de meterla en caliente?