Eso me recuerda al Bastardo, un hamijo del colegio. Ese fue su mote durante muchos años, aceptado por todo el mundo y por él mismo. Un día llegó una nueva profesora que quedó horrorizada al comprender la situación y nos sermoneó acerca del significado de tal vocablo. Y nosotros flipando.
Qué cosas :?
No nos interesan tus historias de vieja, HIJO DE PUTA.